Capitulo 57

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Brisa

Después de quedarnos en la mesa
charlando con todos los familiares de Mateo, nosotros nos levantamos y fuimos a su pieza mientras que los demás estaban ahí

Son las 16:20 de la tarde asique vamos a dormir una siestita

-¿Cuchareamos?- habló Mateo cerrando la puerta mientras se sacaba la remera

Asentí y me puse una remera de él quedando en tanga

Él salió de la pieza para irse al baño y a mi me llego un mensaje de un número desconocido

Hola una vez nos conocimos en una joda, cuchame una cosa, ya mismo te alejas de Mateo porque si no la vas a pasar muy mal. El es mío y no quiero que una sucia como vos esté cerca de él, soy la famosa Colo seguro me ubicas, pero la que va a quedar colorada por tanta sangre vas a ser vos putita
Sos una puta regalada, te mando un beso reina

Y a esta que mierda le pasa, mira si me va a venir a manejar la vida ella, le clave visto y al rato entra Mateo y se acuesta a mi lado

-¿Qué te pasa gordita?- preguntó

Negué -nada, ¿porqué?- deje mi celular en la mesita de luz

-estas con cara de culo- se apoyo sobre su codo mirándome

-es mi cara- respondí

-no, no es tu cara- elevó el tono de voz -¿Pasó algo, entró alguien acá?- preguntó de nuevo

-oy Mateo te dije que no- me di vuelta dándole la espalda

Escuche que prendió el aire y se acomodó bien en la cama, deje pasar unos segundos y me di vuelta lentamente, estaba dándome la espalda

¿Porque lo trate mal? Me pregunté a mi misma

Ese mensaje de la colorada me hizo poner de mal humor sin dudas y no es su culpa

Analice bien su postura, estaba tapado hasta la cintura dejando su espalda descubierta y a la vista sus diez mil lunares

Eso es algo que me encanta de él, la espalda, tiene una galaxia ahí atrás, la cantidad de lunares que tienen es muy flashero

-¿Que miras tanto?- habló con su voz ronca y enojada sin darse vuelta

Miedo, tiene ojos en la espalda definitivamente

-yo no te estoy mirando- me volví a dar vuelta

Cuando menos me di cuenta ya estaba por el quinto sueño

[...]

Me moví un poco en la cama y abrí los ojos lentamente, me estiré largando un quejido y me di vuelta viendo a Mateo en la misma posición que antes

Sus ronquidos se escuchaban por toda la pieza, es un bebé

Agarre mi celular 19:00 de la tarde, hablé un rato con Vicky hasta que vi que Mateo se empezó a mover, se dio vuelta con los ojos cerrados y tanteó la cama buscándome. Cuando se dio cuenta que estaba a su lado me volvió a dar la espalda

Vi que agarró su celular y así se quedó por un rato

Tiene razones para estar enojado, yo lo trate mal solo por un mensaje de la colorada pelotuda

-¿Podemos merendar?- hablé sentándome en la cama

El asintió serio mirando el celular

Me acerqué a él para dejarle besos por toda su cara haciéndome la boluda

-Brisa- habló con voz ronca mientras yo seguía dejando delicados besos por todo su rostro -¿Podemos hablar?- me aleja

-¿Qué?- me senté mirándolo mientras él seguía acostado

-¿Que te pasó?- preguntó apenado

Suspire frustrada -nada me dolía la cabeza- mentí

-no me mientas- se puso serio

-enserio, y aparte estaba cansada por lo de anoche- me volví acostar a su lado

-¿Porqué me mentís a mi?- me agarró de la nuca -podes contarme boluda-

Por inercia hice un mini puchero con mis labios y me quedé en silencio, si me pongo acordarme que hace unos meses atrás, Mateo tuvo la intención de violarme y que Facundo me secuestró me voy a largar a llorar

Más con estos mensajes que me llegaron, pensar que me dijo que estoy en peligro si no me alejo de él me hace peor

No, no otra vez, no

¿Le digo?

-era eso Mateo enserio- conectamos miradas -posta-

-bueno voy hacer de cuenta que te creo- me soltó y se sentó en la cama
-bancame acá me voy a fijar si se fueron- se refería a su familia

Asentí y él se levantó saliendo de la pieza

Dos minutos después entra sonriendo

-estamos solos- se tira a la cama para dejar un beso en mis labios -¿Qué hacemos?- masajea mi mejilla

-tengo hambre- sonreí

Rió -bueno vamos dale- se levantó y yo lo seguí

Bajamos para hacernos la merienda y boludear un poco, entre risas, charlas y besos terminamos y lavamos todo. Subimos de nuevo a su pieza y el se volvió a tirar a la cama boca abajo

-sos un gordito- me acoste encima de su espalda a horcajadas

-me rascas la espalda mi amor- cerro los ojitos

Sonreí e hice lo que me pidió, mis uñas iban y venían en su espalda dejando rayas rojizas. De vez en cuando me agachaba para dejar besos en el

-me voy a dormir de nuevo- hablo con vos ronca

Me baje de él y me senté en la cama

-juguemos a la play dale- lo moví

-¿Queres que te haga el orto?- abrió los ojos y me miró divertido

-ya me lo hiciste- respondí y nos reímos juntos

Se levantó para prenderla y darme un joystik, nos sentamos los dos al borde de la cama y así iba finalizando mi tarde, la pasé al lado de el que es lo que más amo








No todo es de color rosa 🤭

Chau dea diganme chau

Ghetto ; Trueno Where stories live. Discover now