E R A M I S E C R E T O
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Recuerdo ese día que había llegado a casa, después de mis clases de canto a las 9:00 PM.
Me sentía cansada como todos los días.
Me sentía mal, frustrada, arrinconada sin encontrar la manera de escapar.
En realidad todos los días me sentía así.
Luego, de un momento a otro tiré todo de su lugar, con rabia, mientras mis lágrimas se desplazaban por mis mejillas ya rojas.
Mi vida era ir a la universidad, hacer las tareas y quehaceres, luego el trabajo y por último mis clases de canto. No tenía tiempo para mí, y si lo tenía, era muy pocas veces
Aparte, ese chico que dijo que quería que yo fuera su novia, me llamó y dijo que era una absurda apuesta. Y aunque no le hubiese hecho el mínimo caso posible, me dolió.
Dolió por el simple hecho de que me dijera que jamás estaría con alguien como yo, que era muy delgada, no tenía nalgas y otras cosas más.
Pues supongo que ese era el hecho de ponerme ropa holgada.
Pasaron las horas y yo me quedé dormida encima del trabajo que había terminado de hacer para la universidad.
Tú saliste de tú departamento y viste mi puerta a medio abrir.
Entraste y observaste todo el desastre que había creado.
Fue tan vergonzoso que te dieras cuenta así.
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Un Amor Equivocado (COMPLETA)
Short StorySólo tú y yo conocemos esta historia, pues tú y yo la escribimos y, no me importa que algunos digan lo contrario, porque ya sé que hay personas que odian lo propicio. A veces respiro profundamente y me siento con la gran necesidad de devolver el tie...
