capítulo veinticinco

890 78 6
                                    

Los Ángeles, California 1988.

-Sigo sin entender porque quisieron que nos hospedemos en un hotel en LA sabiendo que vivimos por aquí cerca.- bufé mientras ponía un poco de rubor en mis mejillas.

-Yo tampoco lo sé cariño. Pero seguro tendrán su razón.- escuché decir a Duff desde la habitación - ¿Ya estás lista?

-Mmm.. No.- negué y comencé a hacerle algunos arreglos a mi cabello.

Me decidí por utilizar para la velada de los AMA'S, un vestido largo al cuerpo de color rojo, abierto en los costados por lo que dejaba ver mis piernas. Nunca había ido a una premiación de algo, ¿Porque no aprovechar el momento?

-Soy tan afortunado.- me exalté al ver a Duff parado en el marco de la puerta del baño.

-Tonto, me asustaste.- reí - ¿Afortunado por que?- pregunté mientras me seguía arreglando.

-Afortunado de tenerte a ti.- giré mi rostro y el tenía una bella sonrisa acompañado de sus mejillas algo rosadas. Me acerqué a el y e hice puntas de pie para dejar un beso en su nariz.

-Yo soy la afortunada de tenerte a ti.- sonreí y coloqué mis brazos al rededor de su cuello y el sus manos en mi cintura.

-Pero yo soy más afortunado.- sonrió pero su expresión cambió - ¿Estás bien? - me alejé de el.

-Quiero vomitar.- tapé mi boca con la mano y me acerqué al retrete. Trataba de calmar mi respiración para que una arcada repentina no aparezca y me haga expulsar la poca comida que había ingerido en el día.

-Hace días que estas así. No quisiste que te llevara al médico ni nada. ¿Si te sientes mal porque no quieres ir?- dijo mientras se ponía frente a mi y se cruzaba de brazos.

Bien, creo que llegó el momento.

-Duff, tengo algo que decirte..- dije sin mirarlo a los ojos.

-No me asustes Summer, ¿Qué sucede?

-Bien..- respiré hondo - Recuerdas que.. la semana pasada te dije que debía ir al centro de Los Ángeles a comprar unas pinturas..- el asintió - Bueno, te mentí.

-¿Cómo que me mentiste? ¿Qué fuiste a hacer entonces?- en su voz ya podía notar el enojo.

-Te mentí porque fui al hospital.

-¿Y por qué?

-Duff estoy... embarazada.- alcé la vista para ver su reacción, y pude notar como sus ojos se hacían cada vez más grandes y su expresión de enojo cambiaba a una de sorpresa.

-En... ¿Enserio?- tartamudeó.

-Si... estoy de seis semanas, bueno siete contando esta.- largué todo el aire que tenía contenido debido a los nervios. Esperaba alguna otra respuesta de el, pero no emitió ninguna palabra más que quedarse fijamente mirándome - Me enteré hace apenas unas semanas y no te he dicho nada por miedo a como reaccionarías. Se que somos jóvenes aún y que tu estas en la cima de tu carrera y yo bueno, estoy haciendo lo que me gusta. Juro que nunca esperaba esto pero- me interrumpió dándome un gran abrazo.

-De verdad que si soy afortunado.- oí como su voz era algo frágil, mientras que acariciaba mi cabello.

-A... ¿A que te refieres?- pregunté esperando una reacción agresiva.

-Summer.- se separó de mi y tomó mis manos - Antes de conocerte mi vida era realmente una mierda, era negativo, me la pasaba bebiendo mucho peor que ahora, en sí, no quería existir. Pero desde que tu apareciste en mi vida, cambiaron mis perspectivas de como veía al mundo. Sacaste de mi, una persona buena y sana, con ganas de vivir todos los días y luchar por lo que quiero. Por eso mismo digo que soy afortunado. Y ese bebé que llevas en el vientre.- puso su mano allí - Es de los dos, y lo cuidaremos los dos, porque vamos a ser los mejores padres que ese bebé pudiera merecer.- en este punto mis lágrimas ya estaban cayendo.

𝑪𝒐𝒏𝒔𝒆𝒏𝒕𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐 | Duff McKagan [1]Where stories live. Discover now