Chileno Y Que Tanto.

3

Narra Javiera.

La puta madre.

Ya sabía que Dios me odiaba, pero esto es otro nivel.

¿Por qué mierda acepte? Debí quedarme comiendo en el sillón mientras veía películas mamonas.

No en este evento culeke siendo la atención.

—Noé ctm, ¿No podías hablar más bajito? — Aquello lo solté en un susurró, jugueteando con mis manos al ser observada por tantos pares de ojos.

Maldita vida madafaka.

—Pucha perdón, fue la emoción del momento, no pensé que estas gringas se dieran cuenta.— Habló de lo más relax, yo quería darle un puro soplamoco, el Jonny por su parte estaba sonriendo, no sé si estaba gozandolo.

Pude divisar al Bayron junto a unas chicas, lo cual en otro momento me haría reír.

El hueon lacho.

Pero ahora eso no es lo importante, quería irme corriendo lo más rápido posible de allí, me desesperaban las miradas ajenas, y ver al Jacob parado mirándome con la media cara de ahueoneitor me desesperaba más.

En menos de lo que canta un gallo la chica que se encontraba junto al Jacob comenzó a hablar, y toda la atención se fue más rápido de lo que llegó, y eso me devolvió el alma.

Alabado sea el señor, amén.

Examine a la niña, la tal Millie, era tierna y bastante expresiva, eso era muy dulce a decir verdad, aunque verla compartir sonrisas, manoseos y palabras con el Jacob me alteraba.

Conchetumare que esta pasando aquí.

—¿La conocías? —La voz del Jonny me sacó de los pensamientos, ah, que sonó lindo.

—Noup, nunca la había visto en la vida, no cacho mucho de los famositos gringos, la verdad.— Sincera como siempre, así era Javiera Morales.

—Es muy linda, dicen que llevan aproximadamente un año, aunque nunca lo han confirmado, aunque los llevo siguiendo hace bastante.— Siguió hablando el rubio de ojitos claros, pucha, se me fue la oportunidad.

Nomentira, aunque para ser sincera muchas veces me imagine hablando con el Jacob, tratando temas del pasado, dándonos otra oportunidad incluso, obvio todo eso se acababa rápido, en cuanto se me venía a la mente el tema de su fama, me daba rabia hueon, me sentía super estúpida, super pendeja.

Aunque aún lo soy, a decir verdad.

Pero de algo estoy segura, no me caigo dos veces con la misma piedra, no me como dos veces al mismo hueon.

—¡Hola! —Exclamó una niña a mi lado, pelito castaño, bastante bonita, le mostré mi mejor cara, o eso intente, a su lado estaba el Bayron, que pasó aquí, que pasó aquí nene.

—¿Hola?

—Soy Mackenzie Ziegler, es un placer conocerte.

—Soy Javiera, pero dime Shavi, me gusta más.— La tal Mackenzie asintió con su cabeza, y se puso hablar con la Noé y el Jonny, bien tiernucha la niña.

—No tenía idea de que el hueon tenía polola, nunca había visto nada en sus redes, amix.— Sabía que decía la verdad.

Me costó un poco creerle, pero es mi mejor amigo, mi bff, mi otra mitad, mi piojito, no puedo enojarme toda la vida con él. Aunque me dolió sí, esas cosas se superan.

¿Y como no perdonarlo con la cara de perro mojado que me puso?

Se veía más feo que la mierda. Pero había que perdonarlo.

—Tranqui, no pasa nada, igual, era de esperarse paso harto tiempo, y hay que seguir po, wawi.— Trate de sonar sincera, aunque algo dentro de mi igual sentía un poco de incomodidad.

No estaba preparada para verlo. No tan rápido.

Ya, pasaron caleta de años, pero el formó algo fundamental en mi vida, algo bonito. Aunque era chica y hueona, igual fue importante.

—Siento que hay algo raro aquí, pero no sé, sigo sorprendido, lo veo y no lo creo.— Comentó con su mirada fija en la parejita, que habían comenzado a montar el show.

—Mh, igual es tema de ellos, no hay que meterse, cada quien en sus asuntos.— No quería hablar más de esa huea.— ¿Quién es la niña, Mackenzie?

—Estaba con un grupo de niñas y me parecía super linda, después las minas la dejaron solita, y pucha, soy corazoncito de palta, comenzamos a hablar... ¿Qué te parece? — Me miró con sumo interés.

Yaaa... ¿Qué está pasando aquí?

—¿Qué me parece?

—Si po, ¿Qué te parece? ¿Es buena niña? ¿Qué opinai?

—¿Qué tengo que opinar yo? Watafak, espera, ¿Te gusta? — El hueon se quedó callado y se hizo el tonto mirando para otros lados.— ¿Rilly? Bayron maraco, la conociste hace como diez minutos y te gusta, estoy sorprendida.

Me hice la enojada, viendo como mi amigo ponía cara de poto, analice mejor a Mackenzie, es muy linda, además de dulce, su manera de hablar era muy tierna, ¿Me la veía con él cara de guanaco del Bayron? Pues sí, la vida es un poco loca.

—Es linda, me gusta, se nota que no es una mala niña, aunque no la conozco mucho, así que me guardaré los comentarios más a fondo.— Solté de la nada, llamando la atención del Bayron, quien mostró la sonrisa ms grande, hueon bipolar.

—Ay, mi Javiera hermosa, sabia que te iba a caer bien, igual se que es rapidito, pero quiero ver que onda, de verdad me gusta.— Comentó con una sonrisa de hueon.— Amor a primera vista po.

Que película es esta.

Lo mire con cara de burla, y me plante a reír, pucha que me da risa el Bayron, igual, algo me dice que esta siendo sincero y no se porque me gusta que lo sea.

Aunque a decir verdad, ¿Cómo chucha te puede gustar alguien tan rápido? Y no, aquí no entran los amores de micro, de calle, de supermercado y de toda huea que sabes que nunca pasará. No sé qué pensar.

Pero mientras los dos disfruten, yo estoy tiki taka pal mambo.

—¿Después vamos a comer unos completitos? — Preguntó la Noé mientras pasaba su brazo por mis hombros, abrazándome un poco brusco.

Su clase de amor que sorprende a ratos.

—Aquí solo venden hotss dogss, y son más malos que la mierda, hagamos algo en el departamento, será más piolita.— Soltó el Bayron, como todo dueño de casa que es.

—¿Yo puedo ir..? — La voz dulce de la Mackenzie llamó la atención, pucha la culia linda, tkm.

—Obvio que sí po, eso no se pregunta, amix.— Esta vez hablé yo, ganandome una sonrisa de la castaña y del baboso del Bayron. Hueon.

Mire de reojo el escenario, y por un mili-segundo pude conectar mis ojos con los del Jacob, sintiéndome nerviosa en el primer momento, mientras mis mejillas se sonrojaban.

Yaa, la huea, obvio que nos miramos, pero ponía mi cara de culo que estoy segura que captó el mensaje de: “Hueon maraco, te odio.”

Pucha que soy expresiva por la mierda.

Quería irme, quería irme altoke yes, pero parecía que mis amigos estaban disfrutando el show, no me queda más que esperar.

O ir por un hots dogs más malo que la miercale.

No hay tanto que pensarlo. La segunda opción es la más tentativa.

Allí te voy pedacito de pan con vianesa.