028

854 79 4
                                    

Febrero había hecho su aparición, lo cual significaba una sola cosa en sí, el amor se sentía en el aire por partes de las chicas que empezaban a hablar que les comprarían a los chicos hasta que al final de la clase de Inglés MinSu levantó su estupida mano para poder hablar con el resto de estudiantes de la clase, se fue al frente de esta moviendo sus caderas de un lado al otro, como quien anda buscando que todas las miradas vayan hacia su trasero casi descubierto por aquella falda corta.

  Mis mejillas comenzaron a colorearse por el enfado y si seguía apretando con tanta fuerza mi mandíbula acabaría por terminar lastimada y de alguna manera muy obvia JungKook parecio notarlo por lo que llevó su mano a mi pierna que había comenzado a mover con nerviosismo para luego apretó suavemente esta dedicándome un guiño junto con una adorable sonrisa intentando mejorar mi humor, cosa que no me había dado cuenta de lo cuán bajo podía haber caído de enojarme por la ridiculez que hacía otra persona.

— Como saben me encargo de las actividades divertida que ocurren en el instituto.– habló MinSu moviendo su larga melena hacia uno de los lados de su cuello, provocando varios suspiros en el aula.— Y pronto se acerca San Valentín por lo que hay que empezar repartir el trabajo para la fiesta que se dará en esa fecha en el salón de gimnasia y el campus-. un gran nudo se forma en mi garganta, lo último que quería era una fiesta rodeada de parejitas celebrando lo bonito que era el amor, definitivamente no quería ir.

— ¿Iras?.- me preguntó Jungkook suavemente en un susurro, luego de acercarse a mi, supongo que mi mirada contestaba porque se quedó pensativo durante unos segundos haciendo cara de estupido y al mismo tiempo tierno para volver a hablar.

— Debes ir.

— No tengo con quien.

— Alguen te lo pedirá estoy seguro de ello.– contestó con una coqueta sonrisa mientras  me hacía cosquillas para tratar de hacer sonreír.

Después de que MinSu repartiera el trabajo, suspire aliviada al saber que estaría integrada al grupo de decoraciones y que Jimin en el de limpieza por lo que no tendría que pasar más horas de las necesarias viendo su cara de mal humor cuando me observaba mientras me mataba con sus ojos fijamente a los míos.

Al fin el timbre sonó para dar paso a cientos de alumnos golpeándose entre sí para ver quién salía primero. Andaba observándome los pies con miles de pensamientos en la cabeza y a la vez en nada en particular cuando choque contra el fuerte pecho de alguien y este tembló con su angelical risa.

— ¿En qué pensabas?¿En mi?.– preguntó Joshua con una sonrisa burlona.

— Ni en tus mejores sueños.– contesté alzándome sobre la punta de mis pies para poder despeinar su cabello.

— No te diré que ocurre en mis mejores sueños.– Joshua me cortó la respiración con su comentario provocando que pisará su zapatilla derecha.— ¡Oye! ¡Eso fue injusto!

— Te lo tienes merecido.

— Mi mejor sueño es ser un actor reconocido.– dijo haciendo pucheros haciendo que una risa saliera en el momento que tanto necesitaba.

Joshua comenzó a caminar junto a mi hasta casa como de costumbre mientras hablábamos de muchas cosas, el tiempo pasaba volando cuando estaba en su compañía; sin embargo, en cuanto nos íbamos acercando al lugar donde siempre nos separabamos el se encontraba más y más nervioso hasta que finalmente se aclaró su garganta.

— Oye.... ______....

—Dime.– contesté mientras enmarcaba una ceja esperando a que siguiera. Comenzó  observar en suelo cuando el color rojo hacía aparició en su rostro de forma espontánea momento que me resulto tan adorable que no pude evitar sonreír y llevar mi mano a su mejilla para rozarla suavemente dándole ánimos a lo que sea que quisiera decir y al parecer en el momento que conecto sus ojos a los míos adquiridos la fuerza suficiente para continuar con una sonrisa en su rostro.

— He pensado que la fiesta de San Valentín no tendría ningún sentido ir solo y mucho mejor ir con cualquier chica que no seas tu... ¿Te gustaría ser mi pareja ese día?.– habló uniendo las palabras por la velocidad, no pude evitar reír por inercia a lo tierno que se veía, Joshua abrigo sus ojos más de lo normal.— ¿Estás riéndote de mis sentimientos? Eres cruel.– terminó de hablar con un falso resentimiento. Yo negué con mi cabeza rápidamente pero mi sonrisa se mantuvo intacta.

— Me río porque no entiendo la razón de que estés tan nervioso además claro que iré contigo.

— ¿De verdad?

— Si.– dije sacándole mi lengua. Entonces Joshua se acercó a mi y me abrazó levantando mis pies del suelo sin parar de sonreír como un loco.

— No te arrepentirás, te lo juro.

Cuando llegue a casa no podía parar de sonreír, al menos no estaría sola en aquel momento de felicidad de terceras personas. Las cosas empezaban a mejorar poco a poco. Pero aún así debía de empezar a buscar un detalle para Joshua, ya que de eso se basaba la fiesta.

My Sweet Bad Boy (Park JiMin Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora