𝔓𝔩𝔢𝔞𝔰𝔞𝔫𝔱 ℌ𝔢𝔩𝔩 [Thomas Shelby]

𝒾'𝓂 𝒶 𝒮𝑜𝓁𝑜𝓂𝑜𝓃𝓈

Volvió al mundo cuando terminó su taza de té, la mujer, que si mal no recuerda se llamaba Louisa, mantuvo la mirada fija en la libra.

-¿algo más que quieras agregar?- no quería volver a recordar el calvario que vivió ayer, por lo cual saldría y buscaría ella misma al Shelby.

-si se algo más te lo contaré, pero...- observo nuevamente el billete, Scar asintió entregándoselo completamente.

-Gracias, Louisa- subió nuevamente escaleras sin mirar atrás.

La anciana observó el papel entre sus manos, desde hace tiempo no escuchaba la palabra gracias, se había sentido... cálido el saber que le agradecen por algo, observó por donde se fue la mujer, quizás estuvo bien en aceptarla durante aquella semana.

Golpearon fuertemente la puerta, ella se levantó guardando entre sus ropas el billete, al abrir casi se desmaya al ver a Thomas Shelby mirándola fijamente.

-buen día, ¿está Scarlett?- asintió muda- ¿puedo?

-Por favor- su voz se escuchó temblorosa- ¿quiere algo?

-no, señora Daniels, solamente ver a Scarlett- señaló la escalera y Shelby subió con rapidez.

Golpeó la puerta con sutileza, no quería espantarla, solamente conversar.

Scarlett arreglo la sobaquera junto con su abrigo, el arma no se notaba a simple vista, era algo bastante impulsivo de su parte, pero quería llevar el arma, con ella se sentía más segura, y con justa razón.

Abrió la puerta encontrándose con los ojos azules de Thomas, al verlo este mantuvo los labios cerrados.

-vamos al Garrinson- Lo dijo en forma de orden, Scarlett rodeo los ojos.

-no, tengo cosas que hacer- su corazón se aceleró cuando volvió a observar el rostro frío del contrario.

-Antes de ir a las carreras tengo que hablar contigo, ahora- relamió sus labios nerviosa, su intento de no hacer caso había fallado, pero le interesaba el tema del que hablarían.

Más que nada porque no encontraba razones para que Thomas sintiera un interés repentino en ella.

¿Podría haber sido porque ayer pasó la tarde con John? Lo desconocía, por ello asintió y buscó el pequeño bolso que llevaría. Donde habían algunas libras, la llave de su habitación y cigarrillos, lo importante vaya.

Salieron a la par, Scarlett se sorprendió al ver el auto frente a ella, dudo unos segundos pero procedió a subirse al asiento que le ofrecía Thomas.

El trayecto fue silencioso, recibía varias miradas del contrario, sabía que si hablaban sería algo más serio y que la pondría a ella en una encrucijada. También podrían hablar de que sabía quién era ella y preguntar qué hacía en su ciudad, dudaría en responder pero lo haría, ya no había marcha atrás y no sería tímida con Shelby, la primera vez puede que se haya sentido algo cohibida, pero ahora estaba más segura.

-El otro día no respondiste mi pregunta- faltaban metros para llegar al Garrinson, Solomons negó.

-creo que si quisiera acostarme con usted al menos debería de conocerlo más- Tommy asintió- Thomas, ¿puedo...?

-dime Tommy, te sentirás más cómoda- su voz iba con burla, paro el auto y giro a abrirle la puerta.

Ella realmente iba a bajar sin esperar al hombre, pero al ver su intención prefirió darle en el gusto.

Voz segura, mirada desafiante pero no lo suficiente, mantener la calma, avanzó por el Garrinson junto con el Shelby, quien mantenía una mano en su espalda sin tocarla, guiándola por el pub que conocía como la palma de su mano.