Cuando llego me bajo rápidamente del auto y corro a la oficina.

-Hola, señor Reeve-dice Lucy, mi asistente. Cuando mi padre era el dueño tuvimos varias aventuras pero ahora que me hago cargo de toda la empresa, será mejor que no haya nada entre nosotros dos. Ella se muerde el labio y me ve de arriba a abajo. Si me dieran un dólar cada vez que las mujeres hacen eso, seria mucho mas millonario de lo que ya soy.

-Lucy-la saludo con la cabeza y entro a la oficina. Muchos ejecutivos me quedan viendo y mi padre también. El me está sonriendo pero en sus ojos puedo ver lo furioso que está. Se supone que hoy me anunciará como nuevo jefe y no estoy dando una buena primera impresión.

-Disculpen-digo y me siento al lado de una mujer pelirroja. Seguramente es la asistente de un ejecutivo que no pudo asistir. Le sonrío causando que se ponga roja y se muerde el labio viéndome. Mi papa sigue con su charla sobre una nueva idea para la empresa pero lo ignoro pensando en Scarlett ¿Que estará haciendo ahora? Cuando mi padre dice mi nombre me levanto y le sonrío a todos ya que me presenta como el nuevo dueño de la empresa. Todos aplauden de acuerdo con mi ascenso y cuando terminan de aplaudir me vuelvo a sentar. Mi padre dice unas cuantas palabras más y todos salen de la oficina.

-Kaden-me llama él molesto mientras se acerca a mí.

-¿Si?-alzo ambas cejas arreglando mi saco.

-Serás el jefe ahora, debes ser responsable-me reprende.

-Si, señor. Lo se-asiento poniendo una expresión seria.

-Dime ¿Porque que llegaste tarde?-el se cruza de brazos alzando una ceja.

-Bueno...-comienzo a decir rascando mi cabeza.

-Me enojare más de lo que estoy si estuviste con una te tus zorras Kaden-me espeta y ruedo los ojos. Mis padres están decepcionados de mi actitud. De como trato a las mujeres, pero no me interesa. Solo me acuesto con ellas si ellas también quieren hacerlo. No hay ningún compromiso y me molesta que ellos estén así de decepcionados de mi cuando mi hermano es así y creen que es el chico bueno. Todas las personas creen que es el joven bien portado que aparenta ser.

-No es una zorra-digo lentamente al ver que su expresión furiosa.

-Kaden ¿Hice lo correcto en elegirte a ti?-pregunta entre dientes y me pongo serio. Por supuesto que hizo la mejor elección. Yo he dado nuevas y excelentes ideas para esta empresa que la han hecho aún más famosa.

-Por supuesto que si señor-le digo y asiento. Yo quiero este trabajo más que nada y se que soy bueno.

-Dime... ¿Con qué señorita estuviste? ¿Tengo que hacerme cargo de algo como la última vez?-me pregunta relajándose un poco pero me observa igual de serio. La última chica con la que estuve era...una loca. Muy loca y obsesionada conmigo.

-No, ella es diferente-digo y sin poder evitarlo sonrío.

-¿Diferente?-el alzo sus cejas-¿Como? ¿Ya estas sentando cabeza?-me sonríe lentamente.

-Lo es-digo sonriendo pero luego niego con la cabeza-No estoy...solo estamos...no es nada tan serio-le digo alzando ambas manos.

-Kaden ¿Como se llama?-me pregunta, ahora sonriendo abiertamente. Me quedo en silencio. Debí decirle que estaba con una zorra para que no preguntara. Se que la reconocerá ya que nuestros padres son grandes amigos.

-Scarlett Fields-digo lentamente y su cara se ilumina al escuchar el apellido Fields.

-¿Sales con una Fields? Con Scarlett, la pequeña. Estoy orgulloso de que al fin decidieras sentar cabeza y es incluso mejor por qué es con esa mujer-palmea mi espalda. Hago una mueca. Ay, mierda-¿Estas en una relación seria con ella, verdad?-el alza las cejas.

-Bueno...-comienzo a decir.

-Kaden, si no lo estas, quiero que acabes esta relación inmediatamente. Si lo estas, tienes que llevarla a casa, quiero verla de nuevo-sonríe-Han pasado años, tu madre y tu hermano también la querrán conocer. Una gran señorita te conseguiste, serás un estúpido si esta relación no es seria-me señala. Yo me quede pensando, si esta relación debe durar tres meses, tengo que presentarla a mis padres ¿Cierto?

-Nos vemos hijo, llévala pronto o nosotros vendremos-dice papa sonriéndome antes de salir de la oficina. Suspiro recostándome en la mesa y paso mis manos por mi cara.

Levanto mi cabeza al escuchar la puerta abrirse, por un momento creo que es mi padre entrando por qué olvido algo pero cuando veo a Lucy alzo una ceja. Me queda viendo y de pronto se quita la camisa. Abro los ojos sorprendido.

-Hagamos esto rápido-dice viéndome directamente a los ojos mientras se acerca a mí y comienza a quitarme el cinturón. Me comienzo a alejar de ella diciéndole que pare pero cuando mete su mano a mí pantalón suelto un gemido. Me sonríe y besa mi cuello.

-De acuerdo-digo con voz ronca y nos doy la vuelta para ponerla en el escritorio y estar encima de ella. Cuando terminamos me abrocho el pantalón y la veo ponerse su ropa.

De repente siento un malestar en mi estómago pero niego con la cabeza, también ignorando el nudo en mi garganta.

-Nos vemos mañana-dice ella sonriendo y cuando me está por dar un beso en los labios giro la cabeza.

-No-le digo cerrando los ojos.

-¿Que?-pregunta ella confundida.

-No podemos seguir haciendo esto-le digo serio y me alejo de ella cuando trata de tocarme.

-Los dos sabemos que sederas muy rápido-me susurra seductora y se va moviendo las caderas. Esto será más duro de lo que creí.

Un Padre Inesperado ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora