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Dos años antes :
Reiner tenía unas ganas tremendas de colocar un hechizo silenciador alrededor de su cama, porque sus compañeros de cuarto nunca paraban de hablar hasta altas horas de la madrugada; prefería no hacerlo por seguridad, de vez en cuando igual hacían alguna tontería y no quería explotar solo por no oír el peligro.
—Mi madre me va a matar, no creo obtener un Supera las expectativas— escuchó que decía Connie.
No era un participe constante y efusivo en sus pláticas, pero escucharles era inevitable.
—¿Y qué? Mientras no repruebes no veo el problema. Sería malo si sacaras un Troll...— le contestó Jean. —Olvidalo, eres tú, probablemente obtengas un menos Troll— agregó riendo.
—¡Ey!— replicó Connie con enfado.
Las bromas, risas y quejas continuaron un buen rato, pero él estaba muy cansado para prestarles demasiada atención. Dejaba que algunas palabras se colaran en sus oídos para no dejar de estar alerta.
—Oye, Reiner. ¿Sigues despierto— preguntó Connie.
—No— respondió. "Idiota" se insulto en su mente. Su absurda necesidad de usar sarcasmo, quedarse callado fue lo que tuvo que hacer para que lo dejaran en paz.
—Pues ahora lo estás.
Hizo una mueca sin ánimos de decir algo.
—¿Es cierto que lograste formar un Patronus corpóreo en el examen de encantamientos?— Connie mostró mucho interés.
Eso lo había tomado desprevenido. No le contó a nadie como se había desenvuelto en sus exámenes prácticos, no le gustaba alardear si existía la posibilidad de quedarselo para sí mismo.
Seguro McGonagall lo mencionó en algún lado, orgullosa de que uno de sus alumnos hubiera logrado tal mérito. No se pudo molestar por eso, entendía que la profesora era muy alegre con esos temas.
—No. Incorporeo como siempre— contestó indiferente.
—¡Qué mal! Quería saber que habías pensado para poder hacerlo— chasqueó la lengua con decepción. —Vuelve a dormir, entonces. No me sirves para nada.
Repetirselo una vez más, sería innecesario. Tomó la sábana y se cubrió por completo, ya no importaba explotar junto a la cama, o que explotara la torre completa, el castillo incluso. Lo único que quería era dormir.
