Lo que no te mata, te hace más fuerte.
Pensó Ruby.
Quizá podría estar en lo cierto, pero siempre va a estar alguien que demuestre lo contrario. Ruby aprenderá que no todo lo que planeó podría salir exactamente igual, pero los resultados podrían ser...
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Omnisciente
Estando esa misma noche ya en casa, apenas Ruby cruzó la puerta de su casa, Bella tomó su brazo en donde se pudo percatar que había llegado apenas al igual que ella. Su padre las miraba desde el marco más cercano a las hermanas suspirando.
- saben, los muchachos pudieron respetar la hora de la cena.-
- yo estuve con Dominic en la reserva.-
- y yo fui a hablar con Jake por la tarde.-
Charlie dejó de hablar ante las revelaciones de ambas, las miró un poco extrañado pero al notar que ninguna de sus hijas mentía, asintió. Ni siquiera pudo decir otra cosa, ya que la puerta sonó un par de veces y enseguida el mayor se vio obligado a adivinar que se trataba de sus "yernos."
- oh, esta bien... supongo que, los dejaré a solas.- otra palabra no se escuchó, simplemente ambas chicas se aseguraron de que Charlie no estuviera cerca para abrir la puerta.
No se imaginarian que ambos vampiros reflejaran sus ojos completamente negros y con aura de preocupación.
- saben lo preocupados que estabamos? - inició el castaño con su reproche.
- estabamos perfectamente a salvo, Ruby más que nada... la vi en la reserva, todo esta bien.- contestó Bella mirando a ambos, la menor frunció su boca con ligeridad pidiéndole a su novio con la mirada algo de confianza.
- casi rompemos el tratado para asegurarme que- entonces Jasper dejó de hablar en el momento que a penas dió un paso adelante para acercarse a la rubia. Su semblante cambió al igual que Edward, por lo que las hermanas pensaban que era gracias al olor a perro.
- ya sabemos que apestamos a perro- Edward no dejo terminar a Ruby, y haciéndolas a un lado, ambos vampiros entraron a la casa.
Ni siquiera les dijeron nada, solamente subieron con rapidez primeramente al cuarto de Bella y de último al de Ruby. Al final, el cuarteto se reunió en la última habitación nombrada, donde Jasper tomaba con ambas manos uno de los cuchillos de Ruby y Edward tenía a la mano el atrapasueños que anteriormente hace unos segundos tomó del cuarto de su novia.
