¿Fueron solo Billy y Stu?
¿Fueron solo Mickey y la Sra. Loomis?
¿O realmente hubo alguien más detrás de todo?
Sinopsis: Transcurrida desde antes de los sucesos de la primera Scream, hasta el final de la tercera entrega. Narra como un joven Roman Bri...
Desde 1998 hasta finales de 1999, Roman se mantuvo planeando cuidadosamente cada detalle de su plan. Esta vez estaba decidido hacer esto completamente solo, sin nadie más que pudiera estropear todo.
Entre todas las cosas que estuvo haciendo, logró crear un artefacto tecnológico capaz imitar de una forma muy convincente las voces que a él se le vinieran en gana. Luego, conseguir gracias a algunos contactos una droga capaz de parar el pulso, en caso de que le conviniera "morir".
Además de eso, se mantuvo trabajando mucho en su carrera de cine, tanto que hasta le dieron el trabajo de dirigir STAB 3 y que empezarían los rodajes en el 2000.
Claro que esto le vino como anillo al dedo. Y aprovecharía por traer como actor a Cotton Weary, quien por fin pudo limpiar su nombre tras los acontecimientos en Windsor en el 98.
No solo eso, sino que también había una actriz llamada Jennifer Jolie, la cual llevaba alguna especie de relación con Dewey Riley. Por lo que aprovecharía de cargarse a otro entrometido más... o dos si esa reportera y escritora molesta de Gale Weathers fuera a chismosear todo lo que se vendría. Para finalmente traer a Sidney de una forma u otra a Hollywood, sabiendo que sus amiguitos estarían en problemas.
Año 2000:
Ghostface ya había matado a varios de los actores de su película. Tanto, que la policía ya investigó a Roman como sospechoso; sin embargo, todo le estaba saliendo perfecto. Ya hasta tenía un final planeado para su historia en la mansión de su padre, John Milton.
Pero aún faltaba la pieza clave: Sidney.
Roman logró conseguir el número al que llamaban a Sidney para los problemas de abuso domésticos y más. La llamó como Ghostface, se burló de ella y amenazó con acabar con sus amigos, a menos que ella viniera a ayudarlos.
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Tras la llamada, ella decidió agarrar coraje e ir hasta Hollywood para salvar a sus amigos. Salió esa misma noche de su casa bien alejada hacia su destino.
Pasaban las horas y Sidney empezaba a sentirse cansada a más no poder, así que decidió hacer un pequeño desvío para descansar.
Mientras iba avanzando, empezaron a llegarle los malos recuerdos. Lo de su madre, lo de Billy y Stu. Incluso una horrible pesadilla que la acechaba muchas noches, en la que veía a su madre siendo asesinada frente a ella en su habitación por múltiples Ghostface, y al terminar con su madre se irían a hacer lo mismo con Sid. Todo eso le venía a la mente a la vez que llegaba a un vecindario.
Se estacionó frente a una casa y tocó la puerta. Enseguida fue atendida por una señora, la cual era su tía, Kate Roberts.
La sobrina la saludó y abrazó, a la vez que se disculpaba por molestarla tan tarde, pero ya estaba muy cansada por su viaje y no sabía adónde más llegar.
Eran como las 2:30 A.M, pero aún así la tía Kate se alegró de volver a verla después de varios años. Le dió unos sandwiches con jugo, porque Sid aparte de no dormir, tampoco había comido nada desde que salió de su casa.
