HEIRS OF THE DEAD: "Murmuro celestial"

Prólogo

Los mixmonts atacaban ferozmente a Nicolas y Joselyn evitando que llegaran al trono donde se posaba la muerte.

-Podemos terminar con esto, juntos logramos salir de la travesía, no necesitamos el trono- dijo Nicolas mientras agitaba su espada para protegerse. Joselyn le arrancó de un sarpaso la cabeza a un mixmont, dejando a Nicolas acabar con la vida de los últimos dos que quedaban.

Joselyn miro directamente a los ojos azules de Nicolas que parecia preocupado, por un momento se quedaron mirando y entonces Nicolas se aproximó a ella y la besó fuertemente, estrechadola entre sus brazos, pasando una mano por su cabello rubio y lacio.

-Porfavor-dijo el

Ella asintió, era casi imposible que Joselyn renunciara al poder, pero Nicolas no habia perdidi la esperanza de que aquella joven humilde, abnegada y extremadamente hermosa de la que se había enamorado en la guerra de las 100 almas, seguia dentro de la mujer ambiciosa y obsesiva por el poder en la que se había convertido.

Nicolás y Joselyn a abandonar la guerra por el poder del trono extendieron sus alas dispuestos a mancharse, pero el hielo del inframundo comenzó a derretirse, convirtiendose aquel paisaje congeladi en uno húmedo y sin vida.

Ambos jóvenes impresionados por el cambió no notaron qué un cielo se había creado, del cual se comenzaban a mostrar destellos, dejando caer en forma de lluvia un líquido azul que les impedia volar.

-Maldito bastardo- dijo ella en en un murmuro-El nos quiere fuera de esto, nos quiere muertos, o al menos a mi. Tienes que irte Nic o sino también te matara, porfavor vete, el no te quiere a ti.

-¡No!, es estúpido que me lo pidas, jamás lo haría, no te dejaré

-Nic...- alcanzó a decir Joselyn, pero se vio interrumpida por el precipitado jalin de Nicolas que la hizo caer. Ella rápidamente se incorporó y vio a Nicolas atravesado por una lanza con tres plumas en la cola que la daban dirección y poder. El poder de tres almas. Un grito de dolor salió de la boca de Joselyn acompañado de lágrimas, mientras se acercaba a Nic que aun estaba con vida. Miri en la dirección de donde había venido la lanza. Marcus "la muerte" estaba ahi, mirandola de una forma burlona.

Con un gesto furioso se limpio las lágrimas, se arrancó una pluma, la unio a su espada y corrió hacia la muerte decidida a destronarla.

La muerte al igual libero su espada, para recibir el acero de Joselyn.

-¿De verdad Josy? ¿Pretendes matar a la muerte?

Las espadas chocaban una y otra vez, hasta que se enredaron quedando de espaldas ambos.

-Dijiste algo muy cierto Marcus, la muerte no mata solo posee.

Con un agil movimiento Joselyn se separo y le arrancó un collar con un pétalo de rosa blanca marchito, lo lanzó y de un sarpaso corto el pétalo por la mitad.

Miro hacia Marcus que se desvaneció en el aire, mientras las almas salian a recibir a su nueva dueña.

Joselyn corrió hacia Nic y se arrodilló junto a el, colocando su cabeza sobre sus muslos.

-Nic...,lo siento tanto...

- No, no hay nada que perdonar, has sido la única persona que he amado, gracias.

Joselyn sintio una punzada de culpa, mientras una lágrima recorria su mejilla, no queria que el partiera sin saber la verdad.

-Lo logré, el trono es mio y tu te quedarás junto a mi, y te prometo que algun dia te reuniras con tu hija

-¿Esta viva? ¿La exentaste?-ella asintió mientras veía como lus ultimos rayos de vida se alejaban de el