EL REY LEÓN: SHISAZEN: EL PADRE DE NALA (FIC OFICIAL: TRADUCCIÓN AL ESPAÑOL)

Partes: 5,6,7 y 8

PARTE 2

EL REY LEÓN

LOS LÍDERES DE La Manada.

LA HISTORIA DE SHISAZEN.

de la historia:

Historia por: Justin P. Reese "The Sonic God,"

TRADUCCIÓN: (TAKAFANDUB)

LAS SIGUIENTES CUATRO PARTES: De la 5 a la 8."

Nota importante: Me he tomado la libertad de Betear un poco esta historia, ya que hay errores de gramática y ortografía, incluso en la versión en inglés, así como también he realizado la transcripción y he añadido el equivalente de ciertas expresiones, palabras y frases para adaptarlas al español común, para hacer de esta historia de fácil y agradable lectura para los hablantes de habla-hispana. Sin más...

¡Disfrútenla!

Parte 5

Durante las primeras semanas, de estancia de Shisazen en las tierras del reino, comenzó a integrarse rápida y fácilmente con su reciente entorno. Él hizo muchos amigos, disfrutaba jugando, y resultó ser muy filosófico en sus conversaciones. Su mejor amiga, era Sarafina, con la que, él sintió una atracción, desde el principio. Sarafina y Shisazen se conocieron para estar uno junto del otro, muy a menudo. Ellos se platicaban todo. Pero, ya que ellos, eran aun pequeños cachorros, ellos no comprendían todavía qué tan poderosa era su amistad... los comienzos de un amor de niños.

Por otro lado, Mufasa y Taka, Taka, quien ahora Era llamado Scar, creció temeroso e incluso, con sentimientos, de venganza hacia el otro. Scar sabía que su tiempo en las Tierras del Reino, se vería delimitado, ya que él no sería Rey. Scar tenía un corazón lleno de odio, una oscuridad dentro de él, de la cual no podía escapar. Aunque él trataba de ser juguetón con los otros cachorros, algo dentro de él hacía que los demás le huyeran. Mufasa por el contrario, creció sabio, y se hizo de grandes amigos, pero sobre todo hizo una gran amistad con la cachorrita Sarabi. Su amistad creció tanto, como la de Shisazen y Sarafina.

Por aquellos días, Uru y Shisazen solían compartir algún tiempo juntos. Con el tiempo, Shisazen comenzó a tratar a Uru como a su verdadera madre. Su vínculo con Uru creció cada vez más fuerte, y é aprendió de los tiempos de niñez de Uru con Mapenzi, la verdadera madre de Shisazen.

Uru y Shisazen caminaron juntos a solas, y platicaron sobre sus pasados, porque si Shisazen tenía sueños, por consiguiente no temería hablar de su pasado ni de cómo fue separado de sus padres, muy pronto, él comenzó a recordar lo que realmente había pasado. No había sido la tormenta lo que lo había separado de sus padres... había sido un trío de hienas. Shisazen le hablaba lentamente a Uru sobre aquella fatídica noche.

"...Yo estaba horrorizado... Asustado, fuera de mí. Corrí tan rápido como pude, pero seguían llevándome la ventaja. Caí al suelo, muy cansado, y dos hienas me rodearon." Uru estaba preocupada e interesada al mismo tiempo que escuchaba la historia de Shisazen. "¿Qué más puedes recordar?" Shisazen miró al suelo, y pensó por un momento. "Bueno... Había una tercera hiena, más grande que el resto. Les dijo que me dejaran en paz, porque ellas gastaban sus energías en insistir en atraparme. Aproveché ese momento para escapar." Uru suspiró y miró a Shisazen. "Querido, ya no hay nada que temer. Todo se ha ido, ya." Shisazen estaba mal aconsejado por las palabras de Uru, sobre no temer. "Pero, Mami... Yo ya no le tengo miedo a lo ocurrido, gracias a ti." Uru abrió mucho sus ojos. "Aprecio que me consideres como a tu madre, en verdad, me siento halagada, pero, yo veo algo en ti, que no puedes explicarte a ti mismo. Eso vendrá a ti, con el tiempo." Shisazen miró a Uru. "Quieres decir ¿Las hienas?" Uru hizo una pausa. "No, Yo me refiero a Sarafina. Ustedes dos se ve que son muy afines." Uru sonrió y también se ruborizó, al recordarse a ella misma en los días, cuando había conocido a Ahadi. Zazú sobrevolaba por encima de ellos, para escuchar la conversación. Él después voló hacia abajo, y se colocó en el hombro de Uru. "Buenos días, su majestad." Uru asintió, mientras que Zazú se inclinó. "Hola, Zazú. ¿Cuál es tu reporte?" Zazú anunció que nada relevante había ocurrido. "Las nubes se ven espesas, ¿Alguna tormenta, Tal vez? Como sea, no pude evitar escuchar su conversación. Demasiado interesante." Uru levantó una ceja. "Tú estabas espiando. No lo apruebo." Zazú se inclinó de nuevo. "Mis disculpas, su majestad." Zazú brincó enfrente de Shisazen. "Entonces, tú serás la gran fortaleza de Las Tierras Del Reino." Shisazen estaba un poco confundido, pero comprendió la profecía. "Lo he dicho, muchas veces."