Drowned (EDITANDO)

Capítulo 7

Recordar es el primer paso para avanzar, pero olvidar también ayuda.

Camino apresuradamente luego de bajar del autobús, sujeto mi mochila de las anzas demasiado fuerte. Puedo ver los edificios que hay a mi lado, es muy distinto al barrio al que estoy acostumbrada. Saco un papel con la dirección que había en el sobre, tan solo estoy a una calle de llegar.

Cruzo la carretera y llego a un portal con el número 32 escrito, abro la puerta y un sonido de campana suena avisando de mi presencia. Hay mesas con algunas personas sentadas, un mostrador un poco antiguo y las paredes tienen un horrible y viejo tapiz de flores. Me acerco hacia el mostrador, el señor sigue mirando su ordenador un tanto anticuado.

—¿Disculpe? —El sin separar la vista de la pantalla habla.

—¿Si? —Dice con desgana.
Me quedo callada sin saber que preguntar, intento hablar pero no sé exactamente qué decirle.

—¿Quieres algo? El cuarto para revelar fotos esta allí, supongo que es eso lo que buscas. — Me giro hacia donde esta señalando y le agradezco, él vuelve a su ordenador sin decirme nada más, por el rabillo del ojo veo que está jugando al parchís.

Abro la puerta y toda la habitación tiene una luz roja, solo hay un chico al fondo secando algunas imágenes. Me acerco despacio a él , entonces se gira hacia mi y mantenemos la mirada fija, hasta que él avanza y coge una fotografía que esta enfrente de mi.

Me giro para salir, pero antes de ello oigo una voz.

—Hola. —Muevo mi cabeza para poder verle. Sigue haciendo cosas con las fotografías, pero no sé nada de cómo se llama lo que hace.

—¿Dijiste algo?—Él se ríe un poco y asiente, sigue concentrado en su trabajo y curioseo un poco las fotos.

—Dije hola, no viene mucha gente a esta sala, pocos conocen esta tienda ya que esta en un barrio un poco extraño. —Sigo mirando las fotos, son lugares que jamás había visto, lucen un poco antiguos.

—Son bastante bonitas las fotografías, ¿Las hiciste tú?

—Si, ¿Cual te gusta más? —Me acerco un poco para verlas mejor. Señalo una foto de un lago congelado, con un puente por encima. — Veo que tienes buen gusto.— Me fijo mejor en todas las fotos y me doy cuenta de que parece que són todas en el mismo sitio, hay distintas estaciones del año y están sacadas también de distintos ángulos.

—¿Son todas en el mismo sitio? —El afirma con la cabeza antes de que acabe la pregunta, coge una fotografía y la pone junto a la otras en el hilo, me quedo esperando a que la fotografía se muestre un poco, hay algo que cambia, es como la fotografía del lago congelado pero hay una chica en medio con un abrigo, su cuerpo está ladeado.

—¿Es ella tu amiga? —Fuerzo un poco los ojos, para poder verlo mejor, ya que aún no se puede ver bien, veo la seriedad de su rostro y entonces me doy cuenta de el parecido que tiene a mi. — Se parece a mi.

—Si, se parece un poco a ti. —Dice el chico.— Podrías haber sido tu en otra vida, definitivamente. — El alterna la vista entre la foto y yo, como si estuviera comparandonos y luego se ríe.

— ¿Cómo se llama?

—América, ¿por qué? —El corazón se me para por un segundo.