Fraternité privé 1° Temporada [Completa]

CHAPTER VII

«No confíes en nadie»
«Escondete»
«Nos vemos pronto»

Los mensajes seguían llegando y realmente no sabía si sería bueno contestar. Tenía mucho miedo, más que todo por Daxton y su familia, no podría cargar con la culpa si es que a él le pasara algo. Limpié nuevamente mis lágrimas con el pañuelo y me volví a colocar la mascarilla. La espera en esa clínica se estaba haciendo eterna. La madre de Daxton estaba desconsolada, su vista perdida y cada movimiento que hacía pareciera que fuera ya programado. El padre trataba de ser fuerte, pero se le notaba lo acongojado que estaba. Estuve toda la noche con ellos durante los siguientes días, trataba de apoyarlos en todo lo que estaba en mis manos, pero sentía que no era suficiente. Solo fue un momento de descuido, donde baje la guardia y terminamos en este lugar en el que tanto había detestado.

- Lottie, anda a tu casa, nosotros estaremos aquí para tener alguna noticia. - se acercó el padre de Daxton a hablarme.

- Señor, si me lo permite, quisiera quedarme un rato más, necesito saber de Daxton. - le supliqué y aunque estuviera cansada, la necesidad de saber sobre su mejoría o alguna noticia buena, era más fuerte.

- Anda, ve a bañarte, descansa y come un poco, cualquier noticia, nosotros te lo informaremos. - Me volvió a animar para retirarme, pero realmente no quería.

- Solo... - no pude terminar la frase cuando se escuchó la voz de un doctor llamando a la familia de Daxton.

Y tal como si fuésemos resortes, nos levantamos de nuestros asientos. Caminamos presurosos hasta el doctor que estaba atendiendo a Daxton, se sentía la tensión en el aire y según el rostro del doctor, parecía que no habían buenas noticias, lo cual me hacía sentir aún más culpable.

- Hemos controlado todo hasta el momento. Los restos de la bala que estaba en su cuerpo han sido por fin retirados, en estos momentos Daxton se encuentra descansando. - dio esa buena noticia. La noche que él había llegado al hospital, los doctores lo atendieron rápidamente y tuvieron que quitar la bala de su interior, pero habían quedado rastros que ponían en peligro algunos órganos internos, por lo que esperaron unos días para ver si el cuerpo podía tratas de deshacerse de estos como autodefensa, pero no fue ese el caso.

Por lo que ese día le tocaba operación con uno de los mejores doctores del país. Todo había estado saliendo bien y fue cuando me relajé, la tensión se estaba bajando y es por la misma razón que yo había empezado a temblar, la adrenalina era lo que me mantenía de pie tantos días sin poder dormir y comer bien. Me sentía débil, pero no quería demostrarlo.

- En unas horas podrán ingresar para verlo. Solo hay que esperar que haya un mejoramiento en su salud, pero hay buenas señales, Daxton es un joven muy fuerte. - concluyó el doctor para retirarse. La alegría de los padres era inmensa y eso me daba un poco más de fuerzas para quedarme, solo que ahora era momento de caminar hacia la silla y descansar un poco.

Los padres de Daxton estaban festejando, pero aún así no dejaban de preocuparse por mi, por lo que ambos se acercaron. - Mi niña, ya escuchaste al doctor, Daxton se encuentra bien, es momento de que vayas a bañarte, comer y darte un descanso. - dijo la madre de Daxton, sus ojos estaban hinchados de tanto llorar, pero había un brillo en ellos que lograba reflejar la emoción y felicidad que en ese instante tenía. - Vamos, te voy a acompañar. Así también voy a mi casa para bañarme y traer algunas cosas aquí. - volvió a hablar.

¿Cómo podía negarme a eso? Después de todo, Daxton estaba recuperándose, el padre se iba a quedar un rato más. - Está bien, pero usted también tiene que comer y descansar. Por lo que les hago una propuesta. - empecé a hablar y ellos se quedaron sorprendidos por mi reaccionar. - Iré a descansar un poco, comeré algo y en unas horas vuelvo, para que ustedes también hagan lo mismo, han sido unos días muy difíciles y necesitan recobrar fuerzas para Daxton. ¿Les parece? - propuse y aunque al principio estaban negándose, terminaron por aceptar.

Las cosas estaban yendo bien ¿Por qué seguir agobiandose más? Es por eso que la mamá de Daxton y yo nos retiramos del hospital. La acompañé a su casa y luego fui a la mía, durante el trayendo había recibido más mensajes de parte de ese número desconocido. Necesitaba sacarme de dudas ¿Podía ser Jean? Había algo que no me cerraba ¿Tan rápido podría haberme perdonado? ¿Le habría creído a Mae? Sabía lo terco que solía ser Jean, por lo que no creía muy bien que haya sido él quién me esté mandando los mensajes.

«Dime qué estás bien»
«Me enteré del tiroteo»

¿Cómo era posible que supiera mi número si a Mae no se lo había dado? ¿Cómo supo el siguiente número si sólo dos personas lo sabían? El día del accidente había perdido mi celular y tuve que conseguir otro número con otro equipo. ¿Podría ser qué...? ¡No lo podría creer! Tiene que ser una broma o algo parecido. Era mejor que vaya a bañarme y así olvidar todo lo que estaba pasando en ese instante, mi mente se estaba haciendo una película demasiado larga y extraña. A nadie le había dicho donde me fui, ni siquiera a Mae, solo desaparecí, algo estaba ocurriendo y después debería de hacerle caso, no en este momento.

Por esa misma razón, fui a buscar una ropa más cómoda, coloqué la ducha para llenar la tina y mientras eso ocurría, decidí hacerme algo pequeño para comer. Aunque me sentía muy inútil en ese instante, mis manos temblaban y sentía escalofríos recorrer mi cuerpo. Mi mente me estaba jugando una mala pasada, tan solo era eso. Una vez terminé de comer, fui a la tina, tras quitarme todas las prendas de ropa, me introduje en la tina y me relajé, iba a tomarme varios minutos para vaciar mi mente de cada cosa que estaba maquinando.

[ Inicio del Flashback]

Safari's house.

- Hay algo que tienes que saber sobre Mr. V. - Empezó a hablar Ralf mientras colocaba varias carpetas sobre la mesa. - Él no está solo, tiene muchas personas bajo su mando y es por eso que no debes confiar en nadie, ni en tu propia sombra. - continuó mientras me disponía a leer cada hoja que había en esa carpeta, era como un expediente que hicieron los de Privé.

- ¿Deberé estar siempre a la defensiva? - pregunté frunciendo mi ceño y era algo que realmente no me gustaba, no podía vivir con esa paranoia toda mi vida tan solo por pertenecer a los de Privé.

- No, déjalos creer que confías en ellos, que estás apegada y así ellos bajarán la guardia, ahí podrás notar quien realmente es la persona en la que puedes confiar. - contestó Ralf y fue cuando asentí. - Solo es un proceso difícil y largo. - añadió.

Nuevamente asentí entendiendo a la perfección en lo que me metía, cada vez se veía difícil pertenecer a ellos. Quizá por la misma razón varios temían estar al lado de un Privé. - Deberé aprender muchas cosas. - mencioné y fue ahí cuando Libardo se acercó a mi poniendo un brazo alrededor de mis hombros.

- Todos te ayudaremos. - Afirmó mirándome por unos segundos para luego ver al resto de los compañeros.

[ Fin del flashback]

Solté un suspiro abriendo mis ojos y mirando a la nada. - Ojalá estuvieran acá, me sería de gran ayuda. - murmuré para mi misma antes de salir de la bañera y enrollarme en la toalla. Minutos después ya estaba en mi cama tratando de descansar, pero no podía. Necesitaba poner en marcha algún plan para saber quién era aquel que me mandaba los mensajes.

Mensaje

Para: Número desconocido
De: TN

«Estoy bien.»

NOTAS DEL AUTOR:

He aquí les dejo un nuevo capítulo. La pregunta será ¿Quién está mandando los mensajes? ¿Creen que los padres de Daxton están involucrados en algo? ¡Estoy muy emocionada con todo esto!

No me cansaré nunca de agradecerles todo el apoyo y que les guste lo que escribo. Díganme si les está gustando por el nuevo rumbo que está tomando la historia.

Gracias por todo 💙