ser rechazado no es fácil, esta es la historia de Liam un chico quien no es aceptado desde su nacimiento por su progenitora, ella lo maltrataba de manera física y mental, haciendo que pasara por situaciones difíciles, sin embargo todo acaba cuando g...
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Liam junto a los tres chicos, estaban relativamente cerca, la ira del alfa se sentía fuera de los límites de la manada, con ayuda de Laura y Cloud habían logrado salvarse de la muerte varias veces, durante su trayecto las aves salvajes intentaron atacar a Liam por ser el más pequeño, muchas otras especies lo hacían creyendo que era una cría.
Cerca de donde se sentía la pesadez del ambiente, los animales no se encontraban bien sabido era que demasiada clama significaba peligro, - el ruido del silencio - tenían miedo un hombre lobo muy enojado era una máquina de matar
- Chicos, mi alfa está mal, por favor quédense fuera, tengo que arreglar esto - hablaba alarmado
- Déjanos ayudarte en disculpa, por favor - hablaba Río preocupado.
- voy a tratar de arreglar todo, ustedes me ayudaron, creyeron en mí, por lo tanto los recompensará, pero no voy a dejar que mueran -
"Liam" se escuchaba a lo lejos en un rugido, bastante grueso con rabia y sufrimiento , durante el trayecto Liam encontró a Mara, ayudado por ella llegaron con Leia y Marcus
- Liam, escucha, apenas veas a Aaron intenta quedarte quieto frente a él y suelta tu olor, probablemente eso lo tranquilice - Leía abrazada a Marcus habló
- Mara, allá al fondo hay tres chicos se llaman Río, Laura y Cloud, ayúdalos ellos me salvaron, me trajeron y protegieron, por favor - antes de decir más salió corriendo
- por dios - decía en un susurro, las calles vacías solo hacían que su intranquilidad creciera, el instinto hacía que los lobos se ocultaran, Noah quería hacerlo, pero no podía. Aaron desde la entrada de la mansión, lleno de sangre rugía, Liam hizo lo que se le dijo, se paró frente a él, soltando su aroma a tierra mojada, veía como poco a poco su alfa caía al suelo, sin reaccionar a él.
- Liam - decía lento y bajo - Liam - repetía con tristeza y dolor, sus sentidos parecían no funcionar.
+ Lo hemos perdido, Aaron, le fallamos de nuevo, si llegara estar vivo nos rechazara definitivamente por no protegerlo
- Supongo que ya me lo quitaron, han matado a mi pareja, mi Liam, Leo ¿ahora qué haremos? -
+ No lo sé, es hora de ...
El pequeño Omega veía como su alfa en el suelo lloraba y decía cosas ininteligibles
- Aaron, cariño - optó por hablar, si su olfato no servía por el estrés, seguramente sus oídos sí
- Hasta creo que lo escucho Leo - lo dijo en voz alta, haciendo que el chico frente a él riera
- Jaja, Aaron, mi vida, ven a brazos de tu bebé - el Alfa abrió sus ojos llorosos y tristes
- Li...Liam - soltó en un suspiro - dónde estabas - se lanzó como pudo a los brazos del pequeño quedando los dos de rodillas
- Mi vida - acariciaba su cabello
- Liam, que te hiciste no me dejes así, mi hermoso Liam no me dejes te lo pido - sorbía mocos como cachorrito perdido
- Ya, ya, ahora estoy aquí, tres chicos me salvaron y están fuera de los límites esperando a que los veas -
Aaron no hizo otra cosa que alzar en brazos a su pareja, llevarlo a su habitación. Por el camino Liam veía parte de la mujer estaba descuartizada no quedaba nada de ella en la oficina y el desastre del lugar, la escena era espeluznante ¿Qué había hecho aquella mujer para ganarse esa muerte?
No preguntó, se dejó llevar, su alfa había desesperado por él, su Aaron necesitaba ser reconfortado, como omega su tarea era esa entre otras tantas. La calma se sintió en todo el pueblo como una ola de agua que pasaba de un momento a otro, Mara junto al equipo de criminalística, limpiaron el desastre ese mismo día, el alfa y el omega no había aparecido, Marcus tomó el papel del alfa y Mara le ayudaba.
El pueblo regresaba a su tránsito normal, Laura, Río y Cloud, esperaban en la pradera dentro de los límites. Una semana sin sexo era solo para caricias, abrazos y besos.
- alfa, apenas he comido, piensas dejarme aquí - mimaba al alfa acariciando su cabello
- Bebé, tengo que decirte algo muy grave y tratare de ser directo - se le rompía la voz - cu...cuando te secuestraron, esa maldita llegó a la oficina, olía a ti, mi lobo y yo pensamos que estabas ahí..., no sé por qué escuchaba tu voz, y... - se le empezaron a inundar sus ojos
-Tuve sexo con ella, perdóname, Liam, no lo hice con intención - Liam claramente afectado espero a la versión completa
- A ver, cuéntame lo que sigue - insistió con caricias
- Estaba tan ido que solo te veía a ti en mi imaginación, esa maldita me puso una venda para que Leo no viera nada, después cuando empezamos a tener sexo, ella me dijo "bebé hermoso" cosa que odio, ahí fue que mi lobo y yo caímos en cuenta, ya no olía a ti, no te escuchaba, no te sentía, todo era de esa bruja, la mate, la mate Liam, creí que te había perdido y la mate, no la soportaba más el dolor de no verte nunca más y no saber que haría sin ti -
El corazón de Liam, aunque dolía no podía odiarlo, Noah, junto a Leo dijeron la verdad en su mente, así que creería en él, ya sabía que Leo jamás seguiría una fechoría así después de lo ocurrido en el pasado
- cariño, escúchame, solo...-
- Por favor, no me dejes, eres mi compañero, mi pareja, Liam - suplicaba y lloraba a cántaros
- Aaron, no te voy a dejar, no tengo nada que perdonar, Leo me rectifico la información, mi vida, mírame - levantó su rostro con su pequeña mano - te amo y no nos vamos a separar ¿sí? - Aaron cual niño chico asintió metido entre el pecho de su amado
