Siete días (Fred Weasley y tu)

El comienzo del quinto año

Estábamos yo y mi madre en la estación de tren frente a la barrera.

-Te quiero mucho cariño-me dijo mi madre abrazándome.

-Yo también mama- dije correspondiéndola el abrazo.

-¡BRUCK!-grito una voz conocida.

Cuando me gire vi a la señora Weasley acercándose a mí con los brazos extendidos esperando un abrazo.

-Señora Weasley-dije abalanzándome a ella en un abrazo.

-¿Qué tal has estado querida?-me pregunto dándome dos besos.

-Muy bien, ¿y usted?-la pregunte.

-O por favor no me llames de usted, llámame de tú-me pidió.

-Esta bien-reí-¿Qué tal has estado tú?-la pregunte de nuevo.

-Bien, aunque teniendo que aguantar a dos gemelos tremendamente pesados-se quejo.

-Mama te recuerdo que estamos aquí-dijo Fred acercándose.

-Hola Fred-le salude con una amplia sonrisa.

-Anda ven-dijo extendiendo los brazos-se que estas deseando abrazarme.

-Cállate-le dije abrazándolo y apoyando mi cabeza en su pecho.

-Que lindos son, ¿verdad?-le dijo la señora Weasley a mi madre.

-Si-respondió mí madre.

Fred y mí madre no han hablado casi nunca y eso era algo incomodo ya que Fred y yo íbamos a hacer un año.

-Señora Bruck-dijo Fred separándose de mí y estrechándole la mano a mi madre.

-Weasley-dijo mi madre estrechándole también la mano a Fred.

-¿Qué tal ha estado?-le pregunto Fred.

-Bien, ¿y usted?-le pregunto mi madre.

-Bien, muy bien-sonrió Fred-y ahora mejor que acabo de ver a su hija después de tanto tiempo-añadió.

Mi madre solo sonrió.

-Saludas al novio y del resto te olvidas-se quejo una voz femenina.

Al girarme vi a Ginny.

-Claro que no me he olvidado de ti-dije abrazándola.

-¿Y de mí?-pregunto George acercándose.

-Tampoco-sonreí abrazándolo también.

-¿Y de mí?-pregunto Ron cruzándose de brazos por no saludarlo.

No dije nada y me separe de George para después abalanzarme a Ron y darle un beso en la mejilla.

-Claro que no tonto-dije feliz.

-________________ cariño se va a hacer tarde-me aviso mi madre.

-Voy mama-dije separándome de Ron.

Cogí mi baúl y me dispuse a cruzar la barrera cuando escuche a mi madre llamar Fred.

-Fred, ven un momento-le dijo.

-Dígame señora-dijo Fred firme.

-Cuida de mi hija por favor-le pidió.

-No se preocupe suegra-dijo Fred, pero enseguida se puso nervioso al haber llamado a mi madre "suegra" sin haberse dado cuenta.

Mi madre no dijo nada y lo abrazo para después mirarme, la sonreí y después empecé a correr para pasar la barrera. Una vez pasada la barrera deje mi baúl y entre al tren y como no, estaba repleto.