Después de haber terminado de comer, tanto Cassidy como Heon llevaron todo a la cocina.

—Ya debería irme. —dijo JungKook observando la hora en su móvil.

—No trajiste tu moto, ¿estás bien yendo solo? —pregunté. No me parecía seguro que saliera a esta hora.

—Jeon, si quieres puedes quedarte a dormir. —propuso mi padre antes de que JungKook contestara.

—No es necesario...

—Hay habitaciones para invitados, puedes sentirte cómodo.

Genial, la plaga dormirá en mi casa.

—De hecho el cobertizo de afuera tiene el tamaño perfecto para que Jeon duer... —un golpé de Cassidy me hizo callar.

—Tú ve a limpiar la cocina. —jaló mi oreja en dirección a aquél lugar— Buenas noches, Jeon.

Perdóname pero disculpame. Yo cociné, ¿y ahora debo lavar?

Esto no fue para lo que me contrataron.

Lavaba la cocina y maldecía tanto a mi madre como a Jeon, ya que este último estaba detrás de mí sentado frente a la isla de la cocina comiendo tranquilamente una manzana. Sé que se está burlando de mí, su sonrisa lo dice todo.

—Te faltan esos platos. —señaló.

—¡Ya lo sé! —grité molesta. Un momento, este es otro momento perfecto para fastidiarlo— Ojalá Jiminie estuviera aquí para ayudarme, como siempre. —dije de forma agotadora y dolida, dramatizando mi sufrimiento.

El mordisco de Jeon en su manzana se detuvo al escucharme y no era necesario voltear para ver su cara, ya sé perfectamente cual es la expresión de ella. Esos oscuros ojos penetrantes estaban encima de mi, penetraban mi nuca.

Trás un pequeño silencio de algunos segundos, Jeon habló.

—Pues dile a Park que te ayude. —se levantó de su asiento y caminó a la puerta de la cocina.

—¿Qué pasa, Jeon? —lo detuve con mi pregunta— ¿Qué te molesta?

Él volteó a verme de reojo y yo le sonreí con inocencia. Gruñó un «púdrete» y abandonó la habitación mientras yo reía por su comportamiento.

Es efímero, pero el movimiento interno que hace con su lengua estando enojado simplemente me encanta. Sin mencionar que cuando eso ocurre, sus ojos, siempre relajados e inexpresivos, se hacen más grandes, dándole un toque más profundo a su mirada.

Todo eso lo he analizado en medio de nuestras peleas, y llegué a la conclusión de que Jeon JungKook es demasiado atractivo.

Terminé de limpiar todo y entré a la sala buscando a Jeon con la mirada, pero no estaba aquí.

¿Habrá ido a dormir?

Subí las escaleras y entré a mi cuarto encontrándome con un JungKook acostado sobre mi cama mensajeando en su celular con quien sabe quién.

—¿Y ese atrevimiento? —me acerqué a él cruzándome de brazos por haberse metido a mi cuarto y acostado en mí cama como si fuera suya.

Jaja, soy tan hipócrita.

—No empieces. Tú más que nadie sabes que no tienes derecho de reclamarme nada.

Tiene razón, yo había hecho lo mismo en su casa. Pero aquí la diferencia es que no me importa.

—Creí que estarías durmiendo.

—Ni siquiera sé dónde está esa habitación de invitados, y a diferencia de ti, yo no ando revisando lo que no me incumbe.

bad boy ━━ [#1] jeon jungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora