«La Hermana de Naruto» (Hyuga Neji)

"Un Beso Triste y El ultimo Adiós"

-Ahora si, dime ¿Que sucedió?- ella se recargo en el escritorio, bajo la mirada y cerro sus manos haciéndolas puños.

-Lord Hokage esta muerto.- me sorprendí, ahora entendía su tristeza, Hokage-sama era su maestro, ella lo quería y lo trataba como su familia.

Me acerque y la abrace, ella correspondió a mi abrazo, la sentí aferrarse a mi, mis costados comenzaron a dolerme por su fuerza pero en estos momentos ella me necesitaba y no la iba a dejar caer. Mi hombro ya estaba empapado de sus lagrimas sus sollozos eran leves, sabia que trataba de controlarse y no gritar pero todo ese dolor le haría daño.

-No fui.. lo suf.. suficiente rapi.. rápida para ayud.. ayudarle, lo deje morir, es mi.. culpa Dattebane.- su voz era entrecortada, escondió su cara en mi cuello y sus sollozos se hicieron mas fuertes, yo le acaricie su cabello y parte de la espalda para tratar de darle apoyo.

-No es tu culpa, no sabias que sucedería esto.- ella me empujo algo fuerte haciendo que diera tras pie pero logre mantenerme, ella se miraba enojada, sus lagrimas bajaban con rapidez, sus ojos se tornaron morados con un raro patrón pero no pregunte nada ya habría tiempo para eso, le dolía la muerte de su maestro y le dolía mucho.

-¡Claro que es mi culpa! ¡Yo debí saber que esto sucedería! ¿¡Porque mi estúpido don no me advirtió esto!? Pude cambiar las cosas pero en cambio murió el Hokage, murió mi Shisho.- ella se tapo la boca lentamente con sus manos soltando pequeños gritos de dolor, las lagrimas no paraban, se recargo en la pared y se deslizo hasta quedar sentada haciéndose un ovillo.

-No fue tu culpa... Akane, si no pudiste verlo es porque tal vez así de vio ser.- lloro mas fuerte por mis palabras, me senté a su lado y la abrace por los hombros, ella paso sus brazos por mi cintura y recargo su cabeza en mi pecho.

-¿No vas hacer Hokage algún día? - mi peli-roja levanto la mirada, sus ojos estaban rojos he hinchados igual que su nariz, sus mejillas todavía seguían empapadas de lagrimas.- ¿Dejaras desprotegida la aldea?-

-No.- ella susurro bajando de nuevo la mirada.

-¿No protegerás lo que a Hokage-sama le costo su vida proteger? - Akane se quedo en silencio pero su mirada cambio de una de tristeza a una de determinación, sus brazos que estaban a mi alrededor me apretaron con mas fuerza dejándome sin aire pero trate de no demostrarlo.

-Arigato Neji.- susurro en mi oído, lo que hizo que me estremeciera, se separo un poco de mi.- Mi pelea ya termino.-

-¿Qu...- no me dejo terminar ya que sus labios chocaron con los míos, por un segundo quede en shock, trate de reaccionar comenzando a mover mis labios torpemente, cerré mis ojos para sentir mejor las sensaciones y emociones que nos transmitíamos en ese beso, sus labios tenían un sabor a fresas algo salados por las lagrimas pero a un así eran cálidos. Sentí su lengua delinear mi labio inferior, con timidez le cedí el paso creando una pequeña guerra inexperta de lenguas pero a un así me gustaba, era mi primer beso, se sentía muy bien y mas si era con la chica que me gustaba.

Nos colocamos de rodillas para tomarla de la cintura y ella pasar sus brazos a mi cuello rodeándolo y acercarnos mas. El aire comenzó a faltar nos así que nos separamos lentamente, sus mejillas estaban mas rojas y sus labios hinchados, tal vez los míos deben estar igual.

-Pense que me odiabas y solo hablabas conmigo para ser cortés.- dije en un susurro cerca de sus labios.

-Solo odiaba tu manera arrogante de hablar  del destino Dattebane.- me sonrió, todavía había tristeza en su mirada pero lo entendía, sabia que no iba a ser fácil y de un momento a otro olvidaría la situación. Me sonroje por su respuesta así que desvié la mirada hacia la puerta.