La Manada de las Sombras

Justicia en nombre del Antiguo Rey

- ¡Oh...! ¡Ese es el castigo! - Exclamaron John y Raven.

El resto de la Liga y los Titanes los miraron confundidos, hasta que Raven volvió a hablar y, para su sorpresa, parecía un poco avergonzada.

- Yo...joder...ahora me siento mal por haberme enfadado tanto con el Mundo Sobrenatural cuando Ignise murió... - Raven bajo un poco la vista y se frotó el brazo algo incomoda.

- Bueno, en ese momento tenias todo el derecho del mundo de estar furiosa, amor – Dijo John colocándole una mano en el hombro – El Mundo Sobrenatural se la ha jugado, ni siquiera nosotros nos hemos dado cuenta de lo que significaba hasta ahora.

Raven asintió, todavía mirando a Zatanna con cierta admiración.

- Yo...lo siento, estoy impresionada – Dijo Raven cuando Zatanna le frunció más el ceño después de frotarse los ojos – Bien hecho Zatanna, a pesar de todas las advertencias y castigos previos has acabado por condenarte – Raven le sonrió maliciosamente.

- ¡Como te atreves, maldita hija de...! - Comenzó Zatanna, pero Raven la interrumpió.

- ¡Callate! - Advirtió Raven – Has sido tú quien te lo has buscado, para ser justos parecía que lo pedías a gritos.

- Te avisé Zatanna, la primera vez te avisé – Dijo John, negando con cansancio.

- ¡Pero yo no tengo la culpa! - Se quejó Zatanna – Yo solo estaba protegiendo a las personas de ellos, son criaturas peligrosas, yo los salvo ¿Y así es como se me agradece?

- Oh por el amor de... - Raven suspiró mirando hacia sus pies y dando un suave pisotón - ¡Lucy, te la llevas o te la mando! - Gruñó.

- Eres una mujer de mente muy cerrada, Zatanna – Dijo John – Tienes tantos prejuicios que no puedes ver mas allá de tu nariz, eso es lo que te ha condenado.

Muy en el fondo, es posible que Zatanna supiera que John tenia razón, y que el miedo al problema en el que con el tiempo se había metido hablara un poco por ella.

- Esta a sido la tercera vez... - Dijo Raven suavemente – Ya sabes que el Mundo Sobrenatural no suele dar más de tres oportunidades, de hecho, has de dar gracias que te ha dado tres oportunidades.

- Un momento – Dijo Superman – ¿A que tres oportunidades os referís?

John y Raven se miraron antes de mirar a Zatanna con los brazos cruzados sobre el pecho.

- Adelante – Dijo Zatanna con petulancia – Yo se que no he hecho nada malo y ellos también – Dijo señalando al resto de la Liga.

No hace falta decir que los miembros de La Liga de la Justicia se miraron sin saber que decir o que hacer realmente, al fin y al cabo aún no sabían que había hecho.

- Bien, todos ya sabéis (O al menos asumo que ya sabéis) que la gota que ha derramado el vaso, y así ha acabado el plan del Mundo Sobrenatural, ha sido interrumpir el ritual que tenia que sellar el Nexo para que criaturas sobrenaturales no se sintieran tentadas a venir – Dijo Raven – Bueno, pues ahora que Zatanna ha metido las narices donde no la llaman el Nexo esta abierto.

- ¿Que consecuencias tendrá exactamente? - Preguntó Batman, la magia no era su fuerte.

- El Nexo se mantenía cerrado por una razón – Explicó John – El Nexo atrae a diferentes criaturas sobrenaturales, algunas buenas y otras malas. Eso ya es de por si bastante complicado, pero no solo atraerá a criaturas que ya están aquí, sino que también despertara a espíritus y criaturas que no están en paz.

- ¿Moraleja de la historia? No juegues con fuerzas que no puedes entender ni controlar – Dijo Raven – Ahora os aviso: Recordad que leyendas (Urbanas y antiguas) y relatos de terror o fantasía no son solo simples cuentos, muchas de ellas son reales, por eso mismo no hagáis nada imprudente.