Sexo con un Nerd || H.S (editando)

capitulo 2

Capitulo 2:

Entro pasando completamente desapercibido, recibiendo uno que otro empujón innecesario departe de sus compañeros. 

Llegó a su casillero y lo abrió, casi tratando de ocultarse dentro. Guardó sus libros y sacó los de su próxima clase. 
-¡Hey, rizado!- no tardó en reconocer la voz de su amiga. Una muchacha de cabello castaño con una gran sonrisa se hallaba allí sonriendo.
-¿Cómo estas Mari?- dijo desanimadamente
Bufó- nerviosa por el examen ¿Y tú?- dijo aun con ese aire alegre.
Harry levantó los hombros mostrando indiferencia.
-Oh Harold ¿Qué pasó ahora?- dijo posando su mano en el hombro de este
-No lo sé. Todo. Todo pasa- dijo algo enfadado.
-¿Quieres explicarte?
-¡Estoy arto de todo! Cansado de esta basura a la que le dicen “vida”- dijo buscando con irritación en su casillero sus últimos útiles.
-Hey, no hables así. Sabes que todo problema puede resolverse- dijo mirando a su amigo con preocupación.
-¿Qué pasa aquí? – Liam llegó tomando la cintura de su novia.
-¿Quieres hacerle entender a tu amigo de que su vida no es una mierda?
-Harry, tu vida no es una mierda- dijo repitiendo lo que dijo Mari. Harry rio en voz baja y Mariand lo fulminó con la mirada.
Bufó-Hombres ¿Quién los entiende? – rodó los ojos y ambos rieron –Por suerte ya no seré la única chica en este grupo- miró su libro mostrando indiferencia
-¿A qué te refieres?- preguntó curiosamente su novio. Harry lo acompañó.
-Bueno… mi prima se mudó desde España, y vendrá conmigo a esta secundaria – no pudo evitar esbozar una sonrisa al terminar de decir aquello -¡Miren! Alli viene – levantó su mano en forma de saludo.
Una chica rubia, alta, que con su lindo atuendo mostraba sus preciadas curvas, caminaba a paso firme hacia ellos. Tenía un aspecto rebelde, con su chaleco de jean, y sus converses gastadas. Al llegar a su lado, Liam y Harry pudieron notar el su claro color de ojos. La joven sonrió y ambos así lo hicieron.
Harry admitió para sus adentros que era una chica muy atractiva, y ese aspecto solo le daba un toque de misterio aun más encantador.
-Chicos, ella es mi prima, Baby– dijo alegremente. Bárbara, como se llamaba, saludó a Liam, y luego a Harry. Este último aun mostraba una pizca de admiración por su notable belleza.

***


___________ Bajaba del auto de su mejor amiga. Acomodó su vestido, y como una experta camino rápidamente hacia la entrada, manejando a la perfección la coordinación de sus pasos. Claro que esto es muy fácil, excepto cuando, como en esta ocasión, llevas tacones.
La típica rutina de entrar y llevarse las miradas de todos como si fuera un chocolate andante. 
Caminó hasta su casillero, en el camino, Amss se despidió de ella al encontrarse con su novio. Luego de saludar a Louis, ________ tomó su bolso junto con sus libros de Biografía y caminó al salón.
Al doblar la esquina del corredor, diviso no muy lejos de allí a su simpático amigo de rulos perfectos. Una sonrisa se formo en su rostro inconscientemente. No iba a acercarse ni nada por el estilo, pero sentía que verlo era suficiente para comenzar el día de buen humor. Ese era un secreto que, según ella, llevaría a la tumba. 
Su sonrisa desapareció casi instantáneamente al observar a una peculiar rubia abrazarlo. Harry se veía muy a gusto en los brazos de la joven, y ________ no tardó de identificar varias preguntas y sentimientos que surgían dentro suyo. ¿Quién es ella? ¿Por qué lo abraza? ¿Acaso no dirá nada? ¿Por qué no puedo abrazarlo así? ¿Por qué no me deja abrazarlo así?
Sacudió su cabeza ya que su mirada se posaba ausente en algún punto del espacio. Siguió mirando expectante. Había visto a esa castaña con él antes, pero no era un problema, según lo que había escuchado se llamaba Mariand y era novia de Liam. Pero jamás había visto a esa rubia, y desconfiaba que se hallara… lo suficientemente soltera como para conquistar a su nerd. La jovencita se despidió de todos y emprendió camino. Unos metros después pasó por su lado. 
En la mente de Barb no pudo evitar notar el aspecto de aquella chica. Tan arregladamente fina, parecía una muñeca. Rodó los ojos y siguió camino.
Así también __________ observó detalladamente el aspecto de ella. Por una milésima de segundo, sintió temor frente a esas converses, y esos shorts gastados que dejaban ver sus piernas ¿Y si ese era el problema? ¿Y si le gustaban las chicas rebeldes? ________ volteó rápidamente a ver a Harry a lo lejos, él se encontraba buscando algo en su casillero. Su ceño se frunció al notar el pensamiento que acababa de pasar por su mente. “¿Qué te ocurre?” se dijo a sí misma “eres ________ Evans, la chica más hermosa, codiciada y popular de esta secundaria” volvió a repetirse. Suspirando levemente, calmó y animó su autoestima hasta llegar al salón de clases. Al entrar, pudo notar que aquella chica no se encontraba allí. Genial, al menos no compartiría clase con ella. Se sentó en el tercer lugar de la hilera del medio. Varios chicos y chicas ya se encontraban en el curso. Segundos después llegó él, acomodando sus rizos, provocando, inconscientemente, la desesperación de aquella castaña. Se sentó en el primer asiento, al igual que siempre. “Llegó tarde” se dijo mentalmente “¿Qué le habrá pasado?” se preguntó apoyando su pera en la mano derecha. “Me estoy obsesionando con ese chico” se repitió. _________ agudizó la vista y lo observó detalladamente mientras él estaba sentado, metido en sus libros. “Cómo no hacerlo” dijo soltando una risita, recostándose en el respaldo. Sonó la campana indicando el comienzo de la primera clase y en cuestión de minutos el profesor llegó.

***


La campana volvió a sonar y Harry se apresuró a terminar de copiar las cosas de la pizarra. Los chicos fueron desapareciendo del curso quedando él sólo, o eso pensó.

-Háblale tonta- se dijo en su mente.-Apuntes de Literatura, perfecto- Ideó. Una sonrisa maliciosa se posó en su rostro. Lentamente caminó hasta su asiento. 
Harry levantó la mirada, encontrándose con ella. Balbuceó. –Idiota- se dijo en la mente.-Ella me pone idiota- se repitió.

-Harry ¿Verdad?- preguntó mordiéndose el labio. El calor comenzaba a apoderarse de todo su cuerpo. Sabía su nombre. Oh claro que lo sabía. 
-S-si- tartamudeó. –Perfecto- pensó- Está nervioso- sonrió angelicalmente. Harry se paró de golpe, tomando su mochila. Por un insignificante segundo, se sintió intimidada. Harry era alto, y detrás de esas sudaderas escondía un magnífico físico. Lo sabía, lo recordaba como si hubiera sido ayer.
-Y… ¿Cómo has estado, Harry?- murmuró acercándose a él con pasos lentos.
-B-bien…¿y tú?- trató de articular.
-Maravillosamente…- soltó un gruñido apenas audible- Algo acalorada, nada más- dijo acercándose aun más. Gracias al bulto en sus pantalones, pudo comprobar que estaba casi tan excitado como ella. Caminó hasta que sus respiraciones chocaron.-Dime… Hazza- murmuró muy cerca de sus labios- ¿Eres…virgen?- lenta y cuidadosamente tocó su vientre, y subió su mano por su pecho.
-Y-yo…- Harry apenas podía hablar. Su miembro le dolía, sentía que en cualquier momento iba a romper el botón de su pantalón. Y su falta de experiencia no lo ayudaba ¿Qué haría ahora?
-Por supuesto que no… solo mírate- dio un paso más cerca, reduciendo todo espacio entre ambos- Estás como quieres- la nariz de la castaña rozó con su barbilla. Gruñó. Un movimiento más y gemiría. Unas voces se escucharon en el pasillo, y ________ se separó lentamente de él, no sin antes besar su cuello.
-Hasta que apareces- dijo Zayn entrando-¿Y este que hace aquí?- preguntó mirando a Harry con despreció, rodeando su brazo en la pequeña cintura de su novia.
-Le estaba pidiendo los apuntes de Literatura -mintió- ¿Me los das o no?
- Y-yo…- tartamudeó, recobrando la respiración.
-Déjalo así, se lo pediré a otra persona- dijo la castaña para luego voltear e irse con su novio. Al llegar a la puerta, sin más giró su rostro para guiñarle un ojo y lanzarle un beso a un joven totalmente estupefacto. 
Definitivamente tendría que tomar una ducha de agua fría… muy fría…
-Maldita _______- dijo en su mente- maldita y hermosa ________- gruñó luego de salir de la ducha, 15 minutos de agua fría no eran suficientes para sacarla de su mente. No se perdonaba el hecho de ser tan tonto, de no ser hombre y tomar el control de la situación cuando pudo. No se perdonaba el hecho de ser un idiota- Ella me pone idiota- volvió a repetir. No podía evitar sentirse un tonto cada vez que estaba cerca. Pero a decir verdad él era así con todo el mundo. Torpe chocándose con todo y con todos. Aunque a kilómetros era inevitable notar lo nervioso que se ponía al tener a esa castaña cerca, o más bien lo excitado. Era como si todo desapareciera, como si un solo acercamiento pudiera encender su cuerpo. Aunque el mundo estuviera derrumbándose, él no dejaría de sentir el tremendo impulso de perder su virginidad con esa chica, esté donde esté. Quizá sea la pubertad, las hormonas, o quizá sea ella, tan preparada para atacar todo el tiempo. Pero el hecho era que Harry no sabía contenerse a su lado. 
Como si fuera poco ella lo manejaba a su gusto, y más que nada lo confundía. Todo el tiempo se comportaba como una perra como la de las películas, tratándolo como basura o despectivamente, y en ciertas ocasiones, lo comía con la mirada. Aunque claro, era algo que nunca se atrevería a ver. ¿Porqué ________ Evans la chica más codiciada y hermosa de la secundaria quisiera acostarse con él? Era imposible, seguro alucinaba. Su mente buscaba razones para negar algo obvio. 
-Lo hace para torturarme- se dijo a sí mismo- es mala y esa es su profesión, al igual que sus estúpidos amigos. – pensaba. 
Definitivamente, la autoestima de Harry Styles no estaba de humor como para hacerle notar el deseo que mostraban los ojos de la castaña al verlo. 

***


-Estás loca – le dijo Amber
-Lo sé, muchas gracias por la noticia- dijo _________ recostándose en la cama de su habitación.
-Lo que necesitas, es una noche de diversión. ¿Hace cuánto no te acuestas con Zayn?- _______ se levantó de golpe para mirar con los ojos abiertos a tope la expresión de su amiga, buscando algo que demostrara un chiste. Al notar que estaba hablando en serio, bufó.
-No lo sé… una semana- dijo mirando el techo de la alcoba
-¡¿Una Semana?!
-Si…
-¿Y cómo haces para pensar en ese nerd, teniendo semejante cuerpo en tu cama, una vez a la semana?- preguntó incrédula. Pero más lo estaba _________ al escuchar las declaraciones de su amiga.
-No lo sé Mimi… él es… no sé cómo decirlo. 
-¡Pero es un aburrido cerebrito! – repitió
-No me lo digas, recordar sus gafas solo me provoca más deseos de ir a su casa y…
-¡Ya entendí! Mejor cierro la boca- _________ rió –Debemos salir esta noche, llama a Zayn y dile que iremos a emborracharnos - ________ rió aun más – No se le ocurre a Louis, pero necesito sexo. Amiga enloqueceré, Tomlinson es mi adicción.
-Wow, sí que estás enamorada – Ahora Amber reía - ¿Planeas ir a una fiesta y emborracharlo para acostarte con él? – Mimi asintió como si nada –Amiga, ya no es necesario –Esta la miró confundida
-¿A qué te refieres?
-No tienes que hacer eso, el es tu novio. Pueden hacerlo cuando quieran, donde quieran, sin necesidad de estar borrachos – dijo riendo, como diciendo algo obvio.
-Bueno, no sé. Debe ser la costumbre - __________ rió – Es que, ¡Entiéndeme! ¿Recuerdas que debía hacer eso para acostarme con él? 
-Sí, lo recuerdo. Estabas enamorada, y actuabas como una idiota todo el tiempo – Amber le tiró una almohada. 
-Aun lo estoy – sonrió con cara de boba.
-Ya cállate cabeza de novia, y prepárate para esta noche –dijo la castaña levantándose, caminando a