¿Problemas de casa?[Yaoi][IDOLISH7]

Celos Ilógicos

En vista de la actual situación y el incremento en su cansancio, Gaku decidió explorar en la cocina de IDOLiSH7 en busca de una fría y deliciosa cerveza, pues según sus experiencias pasadas, cerveza = felicidad. -Yaotome, tal vez no deberías...- Touma intentó decirle al verlo abrir un paquete completamente nuevo de cerveza, pero decidió callarse al ver la mirada completamente amenazante de Yaotome mientras abría una de las latas del paquete.

Después de un par de muchos tragos para intentar ahogar su fastidio y cansancio, Gaku decidió dejarse de juegos con el molesto líder de ZOOL. -¿Qué haces aquí?- Sí, Yaotome Gaku no conocía el tacto ni la delicadeza.

Touma casi se muere ahí mismo, pues sabe muy bien que no tiene forma de responder y salir vivo de ahí, no porque hubiera hecho algo malo, sino más bien porque Gaku parecía demasiado en el límite como para reaccionar racionalmente a nada. -¿Aquí en la cocina o aquí en los dormitorios?- Touma no se creía gracioso, por supuesto que no, su pregunta era una duda completamente razonable y muy seria, pero a Gaku no pareció gustarle en lo más mínimo.

-¿Qué es lo que quieres exactamente?¿Es por el hermano de Tenn?- Si bien Gaku era demasiado agresivo al hablar y hacer sus preguntas, no tenía intención alguna de provocar o asustar al otro, tan solo era de esa manera porque había sido una mañana demasiado larga.

-¡Para nada!- Touma negó inmediatamente, pero después de hacerlo miró en todas direcciones, casi como si estuviera esperando que alguien lo hubiera escuchado o fuera a hacerlo. -Solo es que Momo-san me invitó a venir.-

Y Gaku le creía, viniendo de Momo no le extrañaba ni un poco, pero aún así el hecho de que Touma se viera tan nervioso por su anterior pregunta no le daba el más pequeño atisbo de confianza. -¿Entonces Nanase no tiene nada que ver?- ¿Por qué Gaku preguntaba esas cosas? Ni él mismo lo sabía, tal vez Tenn le había contagiado ese lado sobreprotector, aunque no tenía sentido que fuera con Riku.

Fuera como fuere, la pregunta estaba hecha, y Touma todavía tenía aquella expresión de querer morirse en el rostro, mientras miraba de nuevo en todas direcciones, probablemente asegurándose de que en verdad nadie estaba intentando escuchar su conversación. -No, Riku no tiene nada que ver.-

Gaku no le creía, pero aun así dejó salir un pequeño sonido de afirmación de su garganta antes de volver a darle un sorbo a su desestresante, de nuevo acallando todo a su alrededor, incluyendo a Touma, que aunque no hablaba, era molesto por su sola presencia.
O eso hacía hasta que escuchó una pequeña, pero demandante, voz desde la entrada de la cocina llamar al líder de ZOOL. Suspiró aliviado y para nada disimuladamente cuando notó que era Haruka y no Tenn quien entraba en la cocina, porque, en verdad, había tenido ya demasiado de Tenn por un día.

-Touma, tengo hambre.- Haruka dijo, en una voz que a Gaku le provocó un momentáneo dolor de cabeza, pues era tan demandante, poco amable y quejosa que le recordó al mocoso que había abandonado en alguna parte de los dormitorios y que rezaba no estuviera haciendo nada malo, peligroso o que le fuera a causar más estrés. -¿Podemos comer?- Bueno, Gaku pensó, por lo menos eso Haruka no lo había dicho como si fuera una orden y más bien como si fuera una pregunta, pero aun así parecía estar demandando algo y eso a Gaku le molestaba.

Pero parecía que solo a él, pues Touma le sonrió amablemente al menor, importándole poco el tono que Haruka usaba al hablar con él. -Habrá comida pronto, Haru.- Touma afirmó, pero Haruka no pareció estar satisfecho con aquella respuesta, y el mayor lo notó, pues rápidamente agregó con el mismo tono paciente, y extrañamente amable, de antes: -¿Puedes esperar un poco?¡Solo un poco!¿Por mí?- Por un momento Gaku pensó que Touma había perdido la cabeza, eso o que el hombre no tenía valor alguno contra un niño evidentemente más pequeño e inofensivo que él, pero este pensamiento desapareció al ver el rostro del menor extrañamente más serio y ligeramente preocupado.

Vio a Haruka suspirar, para después llevar su vista al suelo y cruzar los brazos, mientras Touma aun le daba aquella expresión cálida y, a diferencia de lo que Gaku había creído en un inicio, para nada una de ruego. -Si será solo un poco...- Escuchó decir al pequeño centro de ZOOL con una voz extrañamente más tímida que la demandante que antes había usado, y Touma le agradeció a Haruka antes de que el menor levantara de nuevo la vista, evidentemente queriendo algo más. 

Pero antes de que el menor pudiera abrir la boca, Gaku interrumpió, probablemente solo pensando en molestar al líder de su grupo rival. -Creo que IDOLiSH7 tiene dulces guardados en alguna parte de la cocina.- Gaku dijo, dando un pequeño guiño en dirección a Touma, quien tenía una expresión completamente aterrada por las palabras que Gaku había soltado demasiado alto como para convencer a Haruka de que lo había imaginado. -De hecho...- Gaku continuó, aun cuando Touma estaba intentando decirle silenciosamente que no siguiera, mientras Haruka solo miraba curiosamente a Gaku, con los ojos brillantes de emoción, probablemente la sola idea de comer algo dulce había animado al menor. -Creo que la última vez que revisé, estaban en aquel cajón.- 

Cuando Gaku terminó de hablar y apuntó uno de los cajones de la cocina, cabe destacar que era uno completamente aleatorio, Haruka casi saltó de emoción, sonriendo como si acabaran de darle la mejor noticia del mundo, y miró a Touma con los mismos ojos brillantes de antes, consiguiendo que Touma no tuviera otra opción que abrir el cajón que Gaku había señalado antes, probablemente rezando por que hubiera algo dentro.

Touma parecía que se iba a morir, pues era probable que en el cajón no hubiera lo que Gaku había dicho antes, y explicarle eso a Haruka sería un problema enorme para Touma, quien, al parecer, tenía un punto extremadamente débil por el menor. Pero porque Gaku no era un ser cruel y llenó de maldad, y también porque si fuera Ryuu quien lo miraba con aquella expresión que Haruka portaba, era posible que él también cayera ante la misma debilidad, se colocó frente al pequeño centro de ZOOL mientra Touma buscaba desesperadamente una manera de salir de aquella situación.

-¿Te gusta la magia?- Gaku resistió el impulso de llamarle mocoso a Haruka de la misma forma en que lo hacía con Tenn mientras hablaba, buscando distraer la atención del menor, cosa que, por suerte consiguió en seguida, pues el menor asintió animadamente ante sus palabras. -Bien, entonces, haré un truco para ti.- Todo sea dicho, Gaku no sabía nada de magia o trucos de magia, por supuesto que estos le parecían interesantes y atractivos, pero jamás había hecho uno o intentado hacer uno, pero tenía su plan e iba a apegarse a él. -Inumaru, ¿puedes confirmar que hay algo dulce en ese cajón?- 

Touma quería llorar. 

Pero ya que Gaku parecía tan seguro de si mismo y de su aparente plan, Touma asintió lentamente, rezando por que cualquier cosa que Gaku hubiera planeado fuera a funcionar y no a ponerlo en una situación peor que la actual. 

-Genial.- Gaku dijo para después chasquear los dedos, dejando a Touma muy confundido y a Haruka con una expresión muy curiosa por lo que acababa de hacer. -Ahora, he movido lo que había en ese cajón a otro lado.- Ambos miembros de ZOOL reaccionaron de la misma manera al escuchar a Gaku, con una larga exclamación de sorpresa, aunque probablemente por distintas razones. -¿Qué lado? Ni idea, la magia es curiosa.- Para Touma aquello iba de mal en peor, y casi deseaba haberse quedado en el departamento que compartía con el resto de sus compañeros, pero cuando Haruka le dio una extrañamente entretenida sonrisa a Gaku, Touma pudo respirar  de nuevo, ligeramente aliviado, pues al parecer el menor no se veía molesto.

-¿¡Puedes hacer desaparecer más cosas?!- Haruka preguntó con emoción, ignorando por completo el detalle de que no tendría nada dulce ya que Gaku lo había hecho "desaparecer". -¡¿Podrías?!¡¿Incluso personas?!- Haruka exclamó, jalando la manga de Gaku y, con la inesperada fuerza del menor, llevándolo fuera de la cocina, aun preguntándole sobre el reciente "truco de magia" que había hecho.

Gaku no tenía idea de en qué se había metido, ni tenía idea de como salir de ello, pero si de algo estaba seguro era de que Touma no iba a interferir para ayudarlo y, hasta cierto punto, Gaku creía que se lo merecía.