Yuánfèn

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25 de Abril

Aún guardo algunos escombros que te pertenecen. ¿Sabes? Te había olvidado, pero has vuelto otra vez. ¿Será la última vez antes de que te vayas para siempre? Parecemos la historia interminable; no existe una forma definitiva para borrarnos de la vida del otro, y nuestros recuerdos se repiten como las canciones en un disco cualquiera. Una y otra y otra vez, y así hasta convertirse en polvo. Sin embargo, el nuestro nunca termina; tiene golpes, está rayado, roto, pero sigue sonando. Extraño, ¿verdad? Me rendí hace tiempo intentando arreglarlo, no funciona. Dejé que sonara, y siguió repitiendo los mismos ritmos durante meses. En ese tiempo aún no estaba roto. Lo acabé rompiendo, no podía más, no podía vivir todos los días la misma historia llena de lágrimas. Lo rompí, y aún así, se escucha el eco de su música. Parece que la fuerza que nos une es más fuerte que la que nos separa.

Ayer me ocurrió algo extraño. Mientras miraba mis redes sociales, me pareció verte. Así fue. Y, ¿sabes qué? Mi corazón resucitó, volvió a latir. Después de mucho, mi cabeza y mi corazón tuvieron una extensa discusión sobre ti. Todo este tiempo estuvieron en paz, no hubo guerras entre ellos, pero cuando te vi en una imagen... No supe qué hacer. Por un momento se pasó por mi cabeza un pensamiento que hacía tiempo que no tenía: "Te quiero". Pero esta vez fue diferente. Quería a un extraño. Todo fue distinto, te sentí distinto aunque no estuvieses a mi lado. Pensé en escribirte, contarte lo que me acababa de pasar. Supongo que habrás deducido que no lo hice dado que no recibiste ningún mensaje de según tú "la mujer de tu vida". Quizá lo siga siendo, quizá no. Quizá intentes olvidarme, como yo a ti. Aún así, sé que no quiero perderte. Aunque hubieses robado hasta el último sentimiento que me quedaba y por eso no pudiera sentir. Quizá sigas pensando que la culpa fue mía, aunque no lo fuese. Todavía siento esas dos palabras. Había estado un mes sin sentirlas y han vuelto. Pero no puedo dejarme llevar de nuevo, no a menos que quiera volver a caer en un pozo oscuro y lleno de todas las lágrimas que me hiciste sacar.


* Yuánfèn: idioma mandarín. Principio que define esos amores que nacieron predestinados, una fuerza que los une.


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