Capítulo VIII: Unos meses después

782 71 8
                                    

Estos últimos meses han sido como una montaña rusa. Kikyo había estado tratando desesperadamente de quedar embarazada, usando todos los métodos posibles hasta sentir tensión por la mansión. Tu e Illumi no tenían idea de lo que estaban haciendo, lo que incomodaba, tensionaba y hasta a veces, hacia las cosas aún más interesantes cuando estaban solos. Agreguen todo eso un cuerpo hinchado más sus hormonas alborotadas y obtendrán un emocional monstruo embarazado.

Tus tobillos estaban hinchados, tu cara estaba hinchada, tu vientre obviamente estaba hinchado (¡Por ocho meses!), e incluso tu pecho se hinchó a un tamaño que hasta resultaba incómodo. Los dolores de espalda arruinaban tus días y lo único que lo aliviaba era sentarte y airearte por el calor que hacia. Era junio y hacia mucho calor en la mansión, quitarse la ropa ayudaba pero siempre terminaba con Illumi aprovechando esos momentos para acurrucarse a tu lado y hablar con el pequeño alíen. Este incluso había comenzado a colocar crema sobre tu vientre mientras murmuraba cosas como lo linda que era tu piel y lo afortunada que eras por no tener ninguna estría durante el embarazo, aunque prefieres eso a cuando comenzaba a medir tu vientre diariamente para registrar su crecimiento, lo que causó que te escondieras de él por semanas.

Sin embargo, en este momento lo único que hacías era estar afuera para relajarte y hacer un poco de yoga prenatal. Después de todo, tenías que mantenerte en forma, por lo que le preguntaste a tu mamá su rutina de ejercicios mientras tu aún estaba en su vientre. Luego de unos cuantos estiramientos, comenzaste a sentir unas ligeras patadas y tu de forma juguetona respondiste de vuelta dando unos ligeros golpes a su vientre con su dedo.

—¡Oye! —le hablaste—¡Deja de molestar ahí dentro! Recuerda que tu eres solo un visitante y yo tengo que usar eso después de que te vayas.

—Parece estar ansioso por salir, creo que debe estar demasiado estrecho para él.

Unos brazos se envolvieron alrededor de tu vientre, buscando en el hasta poder sentir las patadas

—Voy a extrañar esto _____. Me gusta este sentimiento de nuestro hijo tratando de comunicarse con nosotros. —Illumi apoyó su cabeza en tu hombro, con su cabello pegado a tu cara. Te sonrojaste ligeramente.

Ustedes dos no habían hecho más que besarse desde que comenzaste a vivir ahí. "Quizás es lo mejor" pensaste. Sin embargo, ustedes dos no habían sido reservados a la hora de demostrar su afecto que podía ser considerado un afecto que iba dirigido a su bebé. Probablemente era puro orgullo lo que les impedía reconocer cuanto disfrutaban el toque del otro, lo que incomodaba la mayoría de esas situaciones. Pero no ahora, en un ambiente extrañamente agradable, te permitiste colocar una mano sobre su sedoso cabello y jugar con el mientras la otra agarraba su mano.

—Te ves muy bien con el cabello largo, Illumi.

—Eso me dijiste la primera vez que nos conocimos.

—¿Lo hice? ¿Qué dijiste después?

—Que el cabello largo se interpondría en mi trabajo.

Reíste —Y aún así no te lo has cortado desde entonces.

Illumi se sonrojó salvajemente, retiró sus manos, alejándose y con las manos en los bolsillos comenzó a irse.

—¿Estás emocionado? —Preguntaste rápidamente. El te miró brevemente.

—Por fuera, soy indiferente.

—Sí, sí, como siempre, pero internamente...

—Quizás solo un poco. —Y con eso, Illumi desapareció en la mansión.

—Yo también.—Susurraste—Yo también.

De repente, Zeno apareció detrás tuyo. Soltaste un grito y por instinto endureciste tus huesos. Ahora es el turno de Zeno para reírse.

—Kikyo tiene algo importante que anunciar, así que por favor dirígete al comedor principal—anunció Zeno. Antes de que pudieras digerir lo que él dijo ya había desaparecido.

—¡Oye! —Gritaste a nadie en particular—¡No puedo correr! —y caminaste hacia el comedor.

The Zoldyck's Nanny [Hunter x Hunter] [Illumi Zoldyck X Reader] CANCELADAWhere stories live. Discover now