CRY [IT]

viii. in home again

viii. en casa de nuevo

1989

Los Perdedores bajaban las escaleras del pequeño "refugio" que Ben había construido para su grupo.

Era una especie de sótano en medio de el bosque, donde aparentemente tenían todo lo que necesitarían para un tiempo de diversión.

─¿Cuándo lo construiste?─ Bill preguntó, mirando a sus alrededores.

Debby se había acercado a su hermano mientras, y ambos revisaban el espacio en donde estaban.

 Tenía un tamaño mediano y (aparentemente) la única luz que tenían era de la puerta-techo que daba al aire libre y de donde salía la escalera. Parecía un buen lugar.

─En algunos ratos, creo─ Hanscom respondió, algo avergonzado retorciendo sus manos─ Ya estaba la excavación. Solo... reforcé las paredes y traje madera para la puerta de arriba y eso fue todo.

─Buen trabajo, Ben. Se ve genial─ Frank acotó, yendo a uno de los rincones y golpeando ligeramente uno de los troncos que sostenía el lugar, el cual se movió un poco─ Si, tal vez aún necesita mejoras─ agregó, mientras su hermana lo tomaba del brazo corriéndolo del lugar.

─Si, pero creo que está bien para mi primera vez─ el rubio insistió, apoyándose en otro de los troncos, haciendo que una de las partes del techo se cayera.

─Si, bueno, ¿y qué pasa si te apoyas en otro pilar, profesor?

No creo que sea necesario especificar de parte de quien vino ese comentario.

─No seas imbécil, Rich. Mientras nadie muera está bien─ La chica Weber señaló, dándole una sonrisa a Ben. Y su hermano rodó sus ojos.

No era verdad aquello, si estaba algo preocupada porque algo cayera encima de la cabeza de alguno de sus amigos, pero Ben había lucido tan feliz de mostrarles su trabajo que no quiso arruinar su ilusión.

Debby podía ser tan necia a veces, y haría lo que fuera por sus amigos. Aunque en esa ocasión pudiera tratar de alegrar a alguien más, de alguna manera podía también exponer a algún tipo de riesgo a sus amigos y a su hermano (aunque también era decisión de ellos quedarse o no, así que no era tanto su culpa si algo llegaba a pasar. Pero ya saben, la culpa mataría a Debora).

Frank detestaba aquello de su hermana.

Como al encariñarse con alguien y tratar casi que de todo para no hacer sentir mal a alguna persona (al menos que fuera solo una broma o tuviera que ser totalmente sincera) podía volverse tan ciega a algún tipo de daño mayor.

Pero no podía discutir con ella por eso, era imposible que le reclamara cosas cuando el ni siquiera le contaba las cosas que pasaban por su mente y ojos de vez en cuando.

─Es justo por eso que existen los códigos de seguridad  y los permisos. ¡Es una trampa mortal! ¿Entiendes?─ Eddie exclamó alterado, moviendo sus brazos de arriba a abajo. 

Frank amaba lo dramático que el podía llegar a ser.

─Aún no está terminado, lo siento Eddie.

─Si me pasa algo es tu culpa─ Kaspbrak se detuvo un momento en una pequeña caja rectangular con cables saliendo de él─ ¿Qué es ésto? ¿Una cámara de tortura?─ exclamó exaltado moviéndola con su mano.

─Es una linterna.

─¿Y eso es para caballos? ¿Cuándo van a bajar? ¡Esto es genial!

─Wow, nunca vi a alguien cambiar de opinión tan rápido desde papá o yo en mi periodo─Debby susurró, impresionada.