Yesterday ||JimSu||

-Uno-

¿Sentirse menos era acaso algo terrible? Yoongi por más que quería admitirlo solo hacía que su corazón se volviese a estrujar como nunca, estaba harto de esas sensaciones, odia sentir como se odia así mismo, y todo era a causa de solo una cosa, y más especifico, de una persona, Park Jimin.

¿Qué es lo que había pasado con él? Un día era una persona dulce, amable y de lo más compasivo, y al siguiente se convertía en alguien grosero y desagradable, parecía que inclusive tiene una segunda personalidad, Yoongi no comprende totalmente lo que sucede con él.

Cerro por fin el grifo para disponerse a dejar esos platos del desayuno simplemente en remojo, no tiene ganas de lavarlos, no tiene ganas de hacer absolutamente nada, preferiría irse, escaparse de allí y nunca más volver, pero... inclusive se consideraría como cobardía de sus actos, y tampoco era como si se pudiese razonar a la primera con Jimin, ya casi no se hablan, Jimin se pasa la mayor parte del tiempo criticando todo lo que hace, y no lo escucha, se la pasa afuera trabajando, y regresa a casa lo más tarde posible, como si en verdad no quisiera hablar con él por ningún momento, quizás piense que es aburrido.

Y tal vez tenga razón, es aburrido, es decir ¿quién siquiera se atrevería a escucharle hablar? Nadie, seguramente nadie lo haría, seguramente le dejarían abandonado, o simplemente darían un asentimiento con la cabeza, fingiendo responder a lo que él habla, fingiendo que le prestan atención.

Ahora que lo esta pensando, eso es lo que hacen todos, sus amigos, sus padres... tal vez por esa razón quiso irse con Jimin en lugar de quedarse en casa, tal vez por eso su hermano mayor le decía que debía dejar en claro que deben escucharle, tal vez debió haber sido todo diferente, tal vez ni siquiera debió conocer a Jimin.

Sonrió con tristeza, todos siempre han tenido la razón, él es una persona inútil, no sirve siquiera para mantener una conversación amena, no sirve para nada, Jimin tiene razón, siempre la ha tenido, y definitivamente, una persona inútil, no debería de estar más en este mundo, después de todo, ¿quién lo llegaría a extrañar? Seguramente ni siquiera Jimin lo haría.

Trago grueso, evitando que el llanto saliese por sus ojos, no quería llorar, pero era algo imposible, se sentía demasiado dolido, y definitivamente ya no soporta estar allí, ya no quiere saber absolutamente nada, se dirigió hacía la habitación que compartía con Jimin, y antes de siquiera tomar sus cosas, lo primero que hizo fue agarrar un cuaderno, no era un diario, pero podía considerarlo uno, allí escribía los momentos importantes, no su día a día, no necesitaba escribir mucho.

Cuando por fin había terminado de escribir, dejo el cuaderno sobre la cama, se dirigió al armario, y se coloco el suéter que Jimin le había regalado, fue el primer regalo que él le había dado por su primer mes juntos, sonrió con tristeza, al menos se iría con un buen recuerdo en mente.

Salio del departamento, dejando todo atrás, sin sus llaves, sin su celular, sin nada de sus pertenencias, no necesitaba nada de eso ahora, y tal vez ni siquiera lo necesite nunca más en su vida.