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Buenos días jovencito, soy Hera, seré una de tus doctores -dijo la mujer twi'lek con una sonrisa amable- como te llamas

Ezra Bridger señora - dije tímidamente

Oh, tú eres el chico del otro hospital, me dijeron que llegarías dentro de unos días -dijo algo nerviosa, de seguro es como los demás- bueno ya no puedo hacer nada para cambiar las cosas, tendrás que compartir habitación por unos días y luego tu moveremos -dijo con una sonrisa antes de ver su computadora- tendrás que disculparme me necesita un paciente, le dire a Kanan que te esplique todo -dijo antes de salir

La doctora parecía amable, la trabajadora que me trajo me dijo que en este hospital me podría recuperar, pero realmente no lo creo e paso la mitades de mi vida en estos hospitales por la culpa del imperio y aunque saliera de aquí no tengo donde ir, no me di cuenta cuando una lágrima recorrió mi mejilla, intente de esconder el echo cuando oí la puerta abrirse

Un hombre de cabello castaño entro, tenia una bata blanca y un pad de dato en su brazo derecho, camino alrededor del escritorio paralelo sentarse frente a nosotros

Bienvenido joven Bridger, soy Kanan uno de tus doctores personales -dijo extendirndome la mano

Gracias -dije tomándola con desconfianza

Hera me dijo que eres el muchacho del otro hospital y no alcanzó a explicarte el programa -me dijo estándose frente a mí

Sí -asenti más tranquilo

Bueno, hasta que empecemos tú tratamiento tendrás que compartir en cuarto con otro paciente -dijo tomando mis papeles

La doctora Hera ya me lo había dicho- dije algo aburrido

Eso es bueno, una vez que te mobamos a tú propio cuarto empezaremos el tratamiento, tendrás una enfermera personal las 24 horas, podrás hacer los talleres que ofrecemos y contaras pon tú propio droide de apollo -dijo con una sonrisa, esta gente esta bien, de verdad tendré una enfermera personal y un broide- esta claro

Sí señor -dije con normalidad

Que bien, ahora revisaremos tus cosas y luego te aremos una revisión para ver como estas -dijo poniéndose se pie acercándose a los guardias con mis pocas cosas

El homdre puso las cosas sobre la mesa, saco una por una las cosas, me dijo que no podía tener los cordones, los lápices, libros, entre otras cosas

Estaba aburrido esperando que terminaran de ver mis cosas, cuando una joven unos años mayor que yo entro, traía un bolso con cosas y sin su uniforme, sus ojos castaños se taparon con los míos y de inmediato desvíe la mirada

Kanan querías verme -dijo una joven con cabello de colores entrando a la oficina

Si Sabine, recuerdas que te habíamos dicho del muchacho del otro hospital- dijo mientras terminaba de separar mis cosas

Sí Kanan, ya llego, dijiste que seria en una semana -dijo un poco molesta, no me sorprende quien quiere a alguien como yo

Sabine el es Ezra, Ezra ella el Sabine sera tú enfermera personal -dijo presentándola antes de ver la computadora como lo había ello la doctora Hera- me necesita, Sabine crees poder hacerle un chequeo para ver como esta

Claro Kanan ve tranquilo -dijo con una sonrisa

La joven dejo sus cosas y me dijo que me sentara en la camilla que había a un costado de la oficina, vio como esta mi respiración, me tomo la presión, me midió y me peso, anoto todo en una libreta y la dejo a un costado de la camilla

Necesitaré unas muestras de sangre y te mostrare el lugar -dijo anotando algo

Es realmente necesario -pregunte nervioso

Sí es para ver los medicamentos que tomaras -dijo preparando la aguja- tranquilo no dolora lo prometo -dijo antes de acercarse a mi

Esta bien- dije algo deprimido

Sabine limpio mi brazo antes de poner la aguja y realmente por primera ves no me dolió no sentí nada, una vez que termino me puso una curita y me entregó ropa limpia, me indicó donde estaban los baños y me dejo tomar una ducha de agua caliente

Me vestí con la ropa que Sabine me dio antes de dirigirme a la habitación, por primera vez me sentí querido por alguien de mi edad, aunque sabía que Sabine lo hacia porque era su trabajo eso no no edito que sintiera una sensación de carillo de ella, era cálido y me gustaría sentirlo siempre, no me di cuánta cuando ya habíamos llegado, su voz me saco de mis pensamiento

Esta sera tú habitación temporal, puedes doctor a la hora que quieras, el desayuno es hasta las diez y los baños hasta las once, puedes ir a los talleres cuando quieras, se necesitas algo solo llámame, te daré tú medicamentos en un rayo mas -dijo antes de irse
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El lugar era hermoso y la gente era muy amable, logre hablar un poco con la persona con la que compartía el cuarto, me dijo que llevaba dos meses aquí internado por ansiedad, que afortunado era yo ya no tengo a nadie y no se cual es mi problema mas que una profunda tristeza

A los pocos días me movieron a mi nueva habitación, era blanca entera temía una cama con sabanas limpias con almohadones del mismo color, a su lado había una mesita de noche con unos libros y también con el peluche que me había dado mi madre el último día que la vi, Sabine estaba en la puerta aun con una sonrisa no me había dado cuenta que ya estaba en el cuarto

Te gusta el lugar? -me pregunto con una sonrisa

Me encanta, gracias de verdad -dije algo sonrojado

No es nada, ponte cómodo, si te sientes mal solo llama -dijo antes de irse

Me senté en la cama unos minutos mirando a mi alrededor, pensado en lo que había ocurrido en los últimos días, me sentía por primera vez querido por las personas que estaban a mi rodean  

PsiquiátricoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora