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“Segun los rumores, esto se debe a la mafia de los Park, se desconoce quienes estén involucrados”

Mi padre golpeó en la mesa como señal de festejo por haber matado a dos personas que eran de la mafia contraria. Yo no le veía algo positivo a ello, sabía que mi padre los había mandado matar y es que ¿por qué no paran todo esto?

—Chanyeol, ven para acá, hijo. Debemos celebrar un logro más. Un logro en la que los Park han dejado nombre y huella.—

No entendía a mi padre por más que quisiera. Nunca me agrado la idea de matar solo para ganar reconocimiento. ¿De verdad era tan necesario matar a dos mujeres del otro bando? Desearía no haber sido de sangre de mafia, desearía poder amanecer y estar en una familia normal. Una familia que al despertar mi mamá se encontrará en la cocina preparándome el desayuno mientras mi padre lee el periódico y yo preparándome para ir al colegio. Una familia la cual pudiéramos salir a la calle libres de culpa, sin la necesidad de salir llenos de hombres guardaespaldas y camionetas lujosas con vidrios polarizados. ¿Por qué tuve que nacer justamente en ésta vida?

–Padre, no quiero seguir con esto. No quiero que llegue  cosas peores. ¿Por qué no pueden parar?–

Sabía que mi padre se iba a negar porque así era. Su ambición por tener más poder sobre encima de todos era más grande que cualquier otra cosa.

–Chanyeol, debes entender que esto no lo pedí yo. Se dieron así las cosas y debemos seguir–

Estaba llegando al punto que hasta escuchar su voz me molestaba, me irritaba tanto. No quería odiarlo puesto que era mi padre pero a veces lo desconocía. No podía creer lo feo que podían llegar a ser las personas.

—Lo entenderás con el paso del tiempo, Yeollie. Todo aquí es mafia.—

–Padre ¿Puedo al menos ir a un colegio? Me aburro aquí esperando por liderar.—
Mentía.
–Quiero hacer algo y entretenerme para cuando lideré tener un gran conocimiento.—

Mi padre al verme decir aquello sonrió con malicia, acercándose a mí mientras su vista se posaba directamente a mis ojos.

–Me gusta tu actitud, hijo. Irás a una de las mejores escuelas, de eso no hay duda.–

Aquello me dejo un poco extraño, no creí que mi padre me fuera a mandar tan fácilmente a estudiar. Quizás ahí podía llevar una vida normal, ocultando mi verdadera sangre. Salir a divertirme, tener pareja y llevar la vida de adolescente que soy.
Al salir del despacho me fui directamente a llamar a mi amigo, indicándole que debíamos ir de compras para tener todo lo necesario para ir a estudiar.

Pasaron exactamente dos meses para mi primer día de clases, estaba tan emocionado aunque no me gustaba para nada la idea de tener que usar un túnel y salir por otro lugar para que no me vieran salir de la casa de la mafia, tenía que tener discreción ante ese tema y fingir que mi sangre no era de los Park.

Al llegar a la escuela estaba perdido, no sabía cómo funcionaba esto, sólo veía en las películas y series que llegabas y le preguntabas a un directivo cuál era tu salón y este te acompañaba pero es todo totalmente distinto. Sentía mis piernas temblar ¿Cómo iba a presentarme? ¿Cómo iba a reaccionar si alguien me preguntaba acerca de mi apellido? No quería pensar en ello pero todo me ponía tan nervioso que lo único que quería era acabar con el nerviosismo del primer día de clases.

Estaba tan perdido buscando salón por salón hasta que una pequeña y suave voz interrumpió mi búsqueda.

—¿Buscas algún salón en específico?–

Me pregunto y giré a verlo, no tenía palabras para responder cuando mire su suave y hermoso rostro, aquel chico era perfecto, mi corazón comenzó a bombear demasiado dejándome sin poder respiración.

—Soy Baekhyun, un placer.–

Mierda, su nombre era tan lindo ¿Cómo es que ese chico me estaba hablando? ¿A caso él no sería como el típico chico popular que le haría bullying como en las series?

–Oh, disculpa. Soy ChanYeol. Park ChanYeol.–

Side Effects - ChanbaekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora