Capítulo 29

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- Entonces es por eso que ella se convirtió en vampiro... - Dice Ethan.

- ¿Fue hoy? - Pregunta sorprendida Naomi - ¿Y te controlaste cuando viste sangre? Eso no lo hacen todos los iniciados -

- Aún así, no puedo controlar el sentir esas ansias de querer matar a alguien por su sangre... pero no quiero hacerlo - Me abracé a mi misma y agaché la mirada.

Odiaba esto, no quería ser esto, no quería tener estas sensaciones. Quise matar a un niño... a un pequeño e indefenso niño. Mis ojos comenzaron a cristalizarse al pensar en que si lo habría hecho, si lo habría matado. Quiero volver a ser humana...

- Quiero mi vida de vuelta... - Solté sin pensar y creyendo que no lo había dicho en voz alta.

Se hizo el silencio; noté que Ethan, quien tenía sus manos juntas, aprieta su agarre en ellas por un momento. Sabía que sin querer lo había herido, no quería que se sintiera mal... Iba a decir algo pero él suspira y me abraza.

- Tal vez no pueda hacer que vuelvas a ser humana... pero te ayudaré en todo lo que pueda y haré que no te odies por esto -

No dije nada, lo abracé lentamente y me aferré a él un momento, se lo agradecía.

- Tranquila, que todo estará bien. Estaremos todos para ti y te ayudaremos - Naomi coloca una mano en mi espalda y luego Nicol.

- Es cierto - Sonreí agradecida con todos quienes me miraban sonriendo con consuelo.

- Bueno... ¿Quieren comer algo, Jake preparará la cena? - Dice Vane levantándose con una sonrisa.

- Sí, claro, papá cocina muy bien - Dice Naomi.

- La apoyo - Le sigue Jason.

- ¿Entonces están diciendo que mi comida no les gusta? - Pregunta Vane indignada.

- Admítelo madre, no sirves para la cocina - Dice Nicol y todos asienten.

- ¡Ustedes...! No si, tienen razón - Se encoge de hombros restándole importancia.

Fuimos hasta el comedor, los demás prepararon la mesa, Ethan me guía hasta mi lugar y cuando todo estuvo listo nos sentamos a comer, pero el problema ahora... es que no me sentía para nada satisfecha. No importaba cuánta comida ingiriera, no conseguía llenarme ni un poco; seguía con hambre.

- ¿Beka? - Ethan me mira al darse cuenta de mi expresión.

- Sigo con hambre... - Murmuré.

- Ahora eres mitad vampiresa, puedes comer pero no es lo que necesitas para saciarte... - Menciona Vane.

- Pero... entonces... - Bajé la mirada, mis manos temblaban un poco por la idea de necesitar sangre.

- Hm... está bien - Ethan se levanta - Te prepararé algo - Dice y camina hacia la cocina.

- Espera - Me levanté - ¿Qué piensas hacer? No creo que tengan sangre guardada aquí... -

- Es obvio. Ethan te dará su sangre - Habla Naomi.

- Pero... -

- Beka, si quieres sentirte mejor será mejor que bebas sangre, así que mejor no discutas - Dice Ethan.

No me gustaba la idea, digo... mi cuerpo realmente quiere sangre y con solo saber que la obtendré... me siento más ansiosa y sedienta. Pero no quiero que luego quiera sacarla por mi misma y descontrolándome en el proceso...

- Ethan... - Me detuve de golpe en el momento en que por la ventana entra una ráfaga de viento que llevaba el olor de la sangre... Noté que ellos se dieron cuenta.

- Espera ¡Beka! -

Salí de inmediato de la casa, esta nueva velocidad era increíble pero no podía controlarme, corría siguiendo el rastro del olor. Entré en el bosque y seguí corriendo.

- Bien, esta es una buena... - Me escondí al escuchar a unos hombres.

Escuché el quejido de un ciervo y al asomarme los vi, cazadores agarrando al animal el cual estaba herido por una de sus trampas.

- Traiganla y vamos... - Los interrumpí cuando me moví.

- ¿Qué fue eso? - Pregunta otro.

Ellos se preparan con sus armas pero yo me movía acorde a mis nuevos instintos. Los confundía en hacer saber dónde estaba hasta que finalmente salté a la espalda de uno, rodamos en el suelo pero al final mordí su cuello succionando rápidamente la última gota de sangre en él.

Mi parte humana sentía náuseas, quería vomitar por el simple hecho de saber lo que estaba haciendo, pero mi nueva parte lo adoraba tanto que no podía detenerse.

- ¡¿Qué es esa cosa... ?! - Miré al otro.

Al parecer era un cazador normal después de todo. Me disparó pero esquivé aquella bala con rapidez y salté sobre él, sentía las venas bajo mis ojos retorciéndose de deseo por las ganas de más sangre. El cazador estaba aterrado claramente.

- ¡Beka! -

Levanté la mirada hacia un lado viendo a Ethan correr hacia mi pero en ese momento el cazador me golpea el rostro y me aparta para comenzar a tratar de escapar. Nuevamente sentí más emoción por atraparlo otra vez y salté de nuevo sobre aquel cazador, sin perder el tiempo volví a beber la sangre.

Sentí a Ethan caminando a mi alrededor para acercarse, lo miré de reojo mientras terminaba de beber, así finalmente pude sentirme satisfecha y al instante reaccioné.

Solté al cazador lentamente y con sorpresa de lo que había hecho, mis ojos parecieran volver a la normalidad y en lugar de ver en rojo por la sed veía normal. Miré mis manos temblantes.

- Beka... - Me sobresalté al sentir su mano en mi hombro, me levanté y aparté con aquella nueva velocidad, choqué mi espalda contra un árbol.

- N..No te me acerques... - Mencioné asustada de mi misma, Ethan me mira sorprendido por medio segundo pero ignora mis palabras y camina hacia mi - Ethan, no -

Volví a apartarme hasta otro árbol pero entonces escuchamos los quejidos del ciervo y lo volteamos a ver, este se levanta sin usar una pata; nos mira, luego solo a mi, se queda quieto un momento antes de darse vuelta e irse con rapidez.

Prestaba tanta atención hacia donde iba el ciervo que cuando Ethan apoyó su mano en mi mejilla, volví a sobresaltarme e intenté huir pero me sujeta ambos brazos.

- No te dejaré ir, Beka. Puedes olvidarte de eso -

- No quiero hacerte daño... - Sollocé.

- ¿Me crees fácil de dañar? - Sonríe de lado - Créeme, no me harás nada, Beka... -

Lo miré un momento pero decidí ponerlo a prueba. Mi mano quedó a centímetros de su rostro cuando él la agarró siendo más rápido que yo, suspiré bajándola y apartando la mirada un momento antes de verlo de reojo y saltar hacia él.

- Prométeme que no dejarás que te haga daño... ni a ti ni a nadie... - Murmuré mientras me aferraba a él.

- Lo prometo... -

Al abrir los ojos, aún abrazando a Ethan, vi a los dos cazadores en el suelo. Me sentí realmente culpable por haber disfrutado de hacer eso.

- Ethan... ¿Siempre será así? -

- No. Te ayudaré para que no lo sea - Responde seguro y apoya su mano en mi mejilla para acariciarla con su pulgar.

- ¿Soy... Soy mala? -

Al parecer mi pregunta lo toma desprevenido ya que su rostro demostraba la clara sorpresa, pero entonces suspira y besa mi frente.

- No lo eres. Beka eres la mejor persona que he conocido, y yo... lamento meterte en todo esto... -

Lo miré, se veía culpable; acuné su rostro en mis manos y deposite un tierno beso en sus labios al cual correspondió.

- A pesar de todo... no me arrepiento de conocerte... Te amo, Ethan -

- También te amo, Beka -

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