11 : Obvio.

1.7K 258 320
                                    


—¿Lugar secreto?— Puso una cucharada de azúcar en su taza. — Eso suena patético.

—Si, probablemente lo era. — Suspiró y tapó su cara con sus manos en señal de frustración. — Va a pensar que soy un raro.

—No lo creo, ya debe estar acostumbrado a ti de cualquier forma. — Yashiro miro a su contrario y tomó un poco a su café antes de seguir. — Kou no es tan tonto como parece, él de seguro comprende.

Mitsuba apoyo sus codos en la mesa. — Tal vez tengas razón, o al menos eso espero.

Había pasado por lo menos una semana desde aquel momento con su menor, las cosas no parecían cambiadas del todo según lo que notaba Mitsuba, de alguna manera se alegraba por eso.

No quería ser él quien convirtiera su cálida relación a una llena de pena.

—Recuerdame venir a comer contigo más seguido. — Sonrío. Mitsuba reconocía una buena comida.

—¿Lo dices enserio?, porque llevas días invitandote a ti mismo.

—No, creo que mañana también me pasaré por aquí.

El balcón de la casa de yashiro era grande y bonito, tenía flores en todos los lados provocando un suave y dulce aroma, una pequeña mesa para dos en el centro junto a una radio.

—Como sea.

Yashiro notaba la expresión calmada de Mitsuba, su mirada estaba un poco perdida y masticaba de forma lenta. Tal vez estaba preocupado, así que se atrevió a preguntar.

—Mitsuba.. — Ella mencionó su nombre en un tono de voz algo bajo, pero aún no obtenía su atención. —.. Mitsuba

Por fin, sus ojos se fijaron en Yashiro. — ¿Qué sucede?

—Eso te iba a preguntar a ti. 

— ¿A mi? —Pausó.  —No me pasa nada.

—No mientas.

—Estoy bien. — Mitsuba balbuceo un poco, no era el hecho de hablar sobre sus sentimientos lo que le hiciera mentir. Simplemente era que ni si quiera él mismo sabía lo que le estaba pasando.

—No te creo, pero esperaré a que estés listo para hablar. —

Tal vez.. Solo era la nueva experiencia de abrirse completamente a una persona.

—¿Cuando lo vas a ver de nuevo?—Yashiro hablo de nuevo. —Es notable que te gusta pero no haces nada al respecto.

—No quiero hacerle sentir agobiado.. Prefiero tocar el tema a su tiempo.

Debía admitir que al principio Mitsuba detestaba a Kou, lo veía como un recuerdo a su cadena hacia un contrato. Pero, tal vez al idealizar que estarían juntos en un matrimonio, se obligo a si mismo a aceptarlo.

—¿Te preocupa que realmente no te guste? — Ambos se miraron, y Nene supo que ese era el tema cuando su contrario no respondió. — Hah, crees que solo estás inventando todo por tu destino, ¿verdad?

—Es que tiene sentido, facilitaría todo mi futuro simplemente pretender que lo quiero.

—Piensa bien en eso, porque podrías cometer errores.

De cualquier manera sin importar si sus sentimientos son reales o no, Kou no tenía ningunos.

Además, ¿realmente se conocían?
Para ellos no existía otro mundo fuera de contratos o imagen social.

—Entonces necesito tiempo para pensar.. — Aunque no quisiera, sentía que debía alejarse de su menor. — Le llamaré para saber que piensa.




















💸;



















—Tu teléfono está sonando, Kou.

—No me interesa, no debe ser importante.

—¿Cómo puedes estar tan seguro?

—Porque en este momento lo más importante esta enfrente de mi.

Aoi se sonrojo un poco y sonrio con dulzura, ambos estaban en una cafetería privada de alta clase.

Era la primera vez que ignoraba una llamada de Mitsuba y probablemente no sería la última, pero tiene justificación.

No sé debe ignorar a tu cita, sobre todo si era alguien tan preciada y linda como Aoi.
Kou sabía que tenía suerte de poder salir con ella y pretender algún lazo.

—La proxima vez deberíamos hornear en casa. —Ella tomó un poco a su taza.

—Es una buena idea, en serio me gustaría probar tu repostería. 

—¡Es bastante buena!, mi madre me ha enseñado desde que soy muy pequeña. —Habló con orgullo y cierta emoción, jamás tuvo a alguien además de sus padres para probar su comida. — No es por presumir, pero soy excelente en esta área.

—Podría ser un pastel de fresas. — Kou mencionó mientras masticaba. — Es mi postre favorito.

—Siempre pides cosas con fresas, pensé que las odiabas.

—Hace un tiempo era así, pero Mitsuba insistía tanto en que lo probara que terminé aceptando y adorandolo.

—Haré el mejor pastel de fresas que hayas probado en la vida. —Aoi sonaba determinada. — Lo prometo.

—En ese caso, debería hacer algo por ti. —Kou puso un pequeño puchero, se suponía que él debía dar los regalos a la chica y siempre resultaba siendo todo lo contrario.

—No te preocupes por eso, yo estoy bien así. En realidad, tu compañía es suficiente.

Ambos sonrieron, reconocían que estas citas en secreto eran un pequeño y perfecto escape de su realidad.

—No me detendré hasta encontrar el regalo perfecto, Aoi.

—Si tanto insistes, estaré esperando con ansias.

Kou alzó su mano sobre la mesa para quitar son su dedo una pequeña mancha de pastel en el rostro de su contraria, ocasionando que ambos se sintieran pequeños y ligeramente sonrojados.

Tiernos, ¿no?

Play date : Mitsukou Where stories live. Discover now