s e p t

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—¡Hyung! ¡Está nevando!—exclamaba el menor entusiasmado.
Hyunjin lo miró sonriente, mientras el castaño saltaba emocionado, con los copos de nieve cayendo sobre su brillante cabellera.
—Vas a enfermarte, In.—advirtió, acercándose a él para envolverlo en sus brazos.
Yang reposó su cabeza contra el pecho del contrario, siendo envuelto por su calidez sin oponer resistencia.
—Así mejor.—susurra el pelinegro contra sus ebras.
Jeongin sale de su escondite en el pecho del pelinegro y lo mira fijamente, con la nariz roja por el frío. Hwang sonríe por la ternura que el menor desprende y deposita un pequeño beso en la punta de su nariz.
Yang la arruga con vergüenza y Hyunjin suelta una pequeña risa.
Jeongin se acerca a sus labios deseoso, apenas rozándolos con los suyos y sonríe antes de besarlo.
Hyunjin lo mantiene entre sus brazos, mientras lo besa de forma tranquila.
—Vamos a casa In, hace frío.—susurra contra sus belfos.
El menor asiente, y entrelaza su mano con la del mayor en un gesto tímido. El pelinegro sonríe y le acaricia el dorso de la mano con el pulgar.
Ambos caminan por la ciudad de forma tranquila hasta el apartamento del pelinegro. Jeongin pasa más tiempo ahí que nunca, así que ya se puede considerar que viven juntos.

Yang se mete a la ducha para calmar un poco el frío, y Hyunjin termina de preparar la cena mientras.
La cabellera castaña del menor aparece en el umbral de la puerta minutos después, y el pelinegro lo atrae a sus brazos de nuevo, abrazándolo por la cintura mientras deja un pequeño beso en su cuello.
Yang se estremece ante su tacto, sintiendo sus vellos erizarse y su respiración pesada.
—Feliz Navidad, Mon Cheri.—habla el pelinegro, girándolo para quedar frente a él mientras sonríe con cariño, en un gesto sincero.
—Feliz Navidad, hyung.—concuerda Jeongin regalándole una de sus sonrisas metálicas.
Y, mientras el pelinegro lo besa de nuevo, París es el único testigo de su encuentro.

"Tus besos, vergonzosos ante mi tacto, son caricias a mi alma.
Tu cuerpo, sumiso bajo mis manos, se mezcla con mi corazón con calma.
Y tu amor, cargado de inocencia y pureza, es tu más bella y a la vez letal arma."
-H.H

parís [hyunin]Where stories live. Discover now