Tu crees en esas cosas del destino, crees que dos almas están unidas para amarse entre ellas. A pesar de que fueron separadas por la varias barreras que se interpusieron en sus vidas.
Ha pasado un año desde que la reina Elsa congelara por accidente...
Días han pasado desde que les di las flores, sin embargo para mi han sido devastadores, la vigilancia de Corona ha hecho que no pueda hacer bien las misiones de templario, ademas de que he pasado mas tiempo ocultando a mis amigos que soy templario que disfrutando pasando el tiempo con ellos, desde el día en que hice la misión de espía, no he vuelto a escuchar nada de los asesinos, lo único que tengo de pista es un baile pero no se donde se llevara a cabo, no se ha dicho nada por parte de los reyes y nuestros informantes en la orden no saben nada. Al menos este día se fue rápido entre platicas y risas de mi querida Emily y de los demás, al fin pude tener un día tranquilo.
Narración General:
La noche estaba en su apogeo, el aire frió se mezclaba con la luna y lo único que se podía escuchar el aleteo de los pájaros que buscaban refugio del frió y de la primera tormenta de nieve que se aproximaba al reino, cuando el ruido y el viento despertó a Shay.
- La ventana esta abierta - dijo mientras se levantaba a cerrarla.
Pero cuando cerro la ventana, un fuerte dolor de cabeza le llego, su vista de águila le llamaba.
- Aquí vamos de nuevo - dijo mientras se concentraba.
- Hay tormenta viajero. Estate atento - dijo el fantasma de la madre de Elsa.
- Esto ya es personal ¿No?... díganme que hice de malo para que ustedes me estén haciendo esto - dije mientras los miraba a ambos.
- La tormenta se esta acercando mas y mas, templario... no podemos confiar en ti... hasta que sepas tu pasado - dijo su padre.
- ¿Pasado?... ¿A que se refiere? - dijo mientras trataba buscar una respuesta.
- Ocupas la ultima pista para revelar tu pasado perdido, sin embargo has demostrado ser un guerrero exitoso, a pesar de que ocultas tus secretos- dijo su madre.
- Gracias por lo que me dijo pero... quiero saber porque están conmigo que les pude haber hecho -.
No hubo respuesta de los padres de Elsa, hasta que después de 4 minutos.
- La respuesta estará dentro de unos días - dijeron los dos.
- Maldición... no puedo esperar mas días... por favor -.
Seguido de eso los reyes de Arendelle se desvanecieron dejándome solo en la habitación, cerré la ventana de mi balcón y me volví a acostar.
Horas después:
Me levante temprano, me vestí y salí a entrenar con las espadas.
- ¿Que sera lo que les pude haber hecho... y que clase de pasado pude haber perdido? - dije mientras mis estocadas con la espada eran lentas.
En ese momento Hyatham y Gist van llegando.
- Veo que tus ataques son lentos - dijo Haytham al ver mis movimientos.
- Estoy distraído, no me puedo concentrar -.
- Pareces que tienes problemas Shay - dijo Gist.
- Los asesinos están planeando un ataque y no tenemos información - dije frustrado.
- Tranquilo Shay, en cualquier momento nuestros amigos nos dirán algo y así tendremos una estrategia para erradicarlos -.
- Lo se maestro... pero... no se me hace justo -.
- Justo... ¿Que? - dijo Haytham esperando una respuesta.
- Hummm... deberíamos decirles que somos templarios, podrán entendernos -.
- Y que quieres que les digamos... que mi trabajo es darles ordenes a ustedes dos para que cometan asesinatos, que pertenecemos a una antigua orden dedicada a formar paz, eso sugieres que hagamos -.
- Obvio que no, pero no hacer que nos odien y nos persigan como a los asesinos - dije tratando de buscar las palabras correctas.
- ¿Y porque tanto interés en eso Shay? - dijo Gist.
- Yo solo veo por los ideales de la orden, eso es lo mas recomendable hasta el momento -.
- ... je... tienes razón, lo haré en los siguientes días, hay que irnos Gist... espero que nos acompañes -.
El maestro Kenway y Gist se retiraron como si nada dejándome de nuevo solo.
- Tal vez pueda ser cierto, tal vez Elsa... me este gustando - dije al viento.
Narra Haytham:
Nos encontrábamos ya afuera de la casa de Shay, sin embargo Gist no paraba de verme.
- ¿Tengo algo en la cara Maestre Gist? -.
- Maestro, sabe que yo no cuestiono sus métodos pero... con todo respeto... va a ser lo que dijo Shay -.
- Obvio que no lo haré maestre Gist, un asunto es que el quiera ver por el bien de la orden y otro asunto diferente es que el tenga un afecto por la Reina -.
- ¿La Reina?, Elsa de Arendelle... ¿Esta seguro de esto maestro? - dijo Gist desconcertado.
- Aunque el diga que no es cierto, lo niegue y diga maravillas de Emily -.
- ¿Y entonces que haremos maestro? -.
- Seguirle la corriente... y cuando sea el momento exacto... encargarnos de este asunto... de momento actuaremos normales y nos enfrentaremos a los asesinos el día de esa fiesta -.
Aunque esto me duele ya que estaría dándole la espalda a un amigo y a su novia, el no puede estar con esa chica ya que lo único que ocasionaría seria un cambio de actitud de uno de los mejores hombres o simplemente es el miedo del daño que le pueda causar a Emily ya que ella siempre ha estado con nosotros en las buenas y en las malas. No me gustaría que ella se fuera por una de sus estupideces con esa chiquilla que puede hacer nieve.
Al caer la noche:
Me encontraba escribiendo mis vivencias en mi diario cuando de repente me sentí observado, como si estuvieran viéndome, mientras mi vista me empezaba a causar molestias, por lo que tuve que concentrarme para ver quien era, sin embargo note una pequeña nota.
Nota:
Espero que se divierta, maestro Kenway, que pronto estaremos en contacto.
Atte: Los asesinos
- Que demonios - dije al ver la nota.
Mire hacia la ventana para percatarme que a la distancia estaba un asesino que se perdió en la sombras de la noche.
Amables lectores, les recuerdo que mi nueva novela esta disponible
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