Capítulo II

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Llevaba varios minutos caminando de un lado a otro en mi pequeña oficina, pasaba mi mirada a la ventana de esta y luego al papel donde el tal "Ones" me había escrito.

Por alguna razón no había podido dejar de pensar en la frase destacada, "un galán yo conocía, que daba y nada tenía" ¿Qué habrá querido decir con eso?

Tenia el ceño fruncido y una expresión de desconcierto en mi rostro, me estaba volviendo loco solo por una carta mal redactada, intentaba hallar un significado pero siempre terminaba viendo la nota con confusión, luego de un tiempo con frustración, bufé y decidí dejar esa frase para después.

(...)

Me encontraba en la escena del robo, la sala de los diamantes, estaba observando la sala mientras Akutagawa buscaba por las esquinas y lugares donde se pudieran esconder cosas, alguna pista que nos pudiese ser de ayuda o alguna otra nota con otro mensaje que apoye al anterior.

Llevábamos un rato buscando y ya estaba agotado, el caso estaba siendo muy lento y aburrido, no había nada, solo unos pocos cristales en el suelo y uno que otro diamante que no pudieron robar, además de un reloj de carillón en una pared pero estaba dudoso de que en el artefacto que marcaba la hora hubiera alguna pista.

Estaba estresado por llegar a ningún lado, quería saber cuanto tiempo llevaba en esa habitación buscando quién sabe que de lo que dejaron atrás esos ladrones.

Ya estando completamente rendido al intentar entender que diablos significaba la nota decidí preguntarle a mi asistente, caminé hacia él pasando por el reloj.

- Akutagawa - este solo me miró en respuesta - podrías leer la nota que me dio la señorita Yosano, no encuentro mucho de lo que pudiésemos investigar pero me intriga esta frase - le pase la carta apuntando con mi dedo la frase subrayada.

Akutagawa se quedó leyendo para luego abrir sus ojos como platos, parecía interesado en la frase sin sentido que "Ones" había escrito, o tal vez sabía la respuesta de esta.

- Detective Nakahara- dijo luego de unos segundos inspeccionando cada centímetro de la nota -esta frase es un... acertijo, no se si sabe pero los Cuartos de Westminster- si lo conocía pero no entendía, supongo que mi cara de confusión lo motivó a explicar- son la sintonía más común en los relojes con carillón para señalar cada cuarto de hora y hora en punto. Está compuesta por un total de 4 con letra, una por cada cuarto, y que se canta, según la tradición, cada vez que el reloj toca su sintonía. También son conocidos como las campanadas de Westminster.

Si conocía el concepto y había oído sobre los cuartos de Westiminter, empecé a pensar en voz alta para ver a donde me llebava eso.

-La sintonía cambia según la cantidad de cuartos, es decir, si son las 12:00 sonará la sintonía completa y doce campanadas, si son las 12:15 sonará la sintonía del primer cuarto, si son las 12:30 sonarán dos cuartos y si son las 12:45 sonarán 3 cuartos.- Dije pensativo sin ninguna pizca de emoción, no entendía a donde quería llegar Akutagawa, miré el único reloj con carrillo de la habitación intentando buscar respuestas y luego a mi asistente. - a donde buscas llegar con esa explicación - dije con una voz irritada.

- Me refiero a que esta frase tiene como respuesta, al reloj que da los cuartos de hora. - ambos miramos al rincón en donde estaba ese reloj, algo hizo click en mi cabeza y mis pensamientos se ordenaron.

Estaba a punto de ir a ver el reloj en la habitación, pero un segundo después la luz se fue, dejando la habitación que carecía de ventanas a oscuras.

Genial, siempre tengo mala suerte cuando descubro algo nuevo en los casos, a ciegas tuve que prender una linterna, cuando algo de luz se hizo presente en la habitación pude ver con poca claridad que Akutagawa seguía en el mismo lugar.

Ambos empezamos a caminar a paso lento, para evitar tropezarnos con algo que hubiera en el suelo, hasta el reloj. La sala derrepente había caído en un silencio sepulcral, solo se escuchaban las pequeñas pisadas que dábamos mi asistente y yo.

Llegamos al reloj, que marcaba los cuartos de hora y un segundo después, de la nada, se empezó a escuchar la música de este con un volumen extremadamente fuerte, la música penetró en mis oídos tan fuerte y mi corazón se altero tanto que tuve que soltar un grito de susto, mientras tapaba mis oídos con mis manos para intentar apaciguar el dolor que me provocó el sonido, Akutagawa estaba igual, luego de eso, el sonido cesó y las luces se encendieron de nuevo, como por arte de magia, apareció una nota.

- Nakahara, se cayó un nota de el reloj. - dijo mi asistente, me acerque a él y tome la nota con cuidado, como si cualquier cosa que hiciera ma rompiera o cambiara su contenido, era exactamente igual a la anterior que me dio la señorita Yosano en mi oficina, abrí el sobre morado y este contenía otro escrito.

" Señor Nakahara:

Buenas tardes, se que el ruidoso e intimidante sonido de este reloj pueda ser horrible, pero mi amigo Ones me dijo que sería muy divertido asustarle, al parecer le divierte molestarlo, y eso que solo lo molesto ahora, es un poco extraño, ¿no cree?, bueno esta vez no será un acertijo pero como supone Ones usted ya sabe que el reloj tiene marcada una hora, esta noche habrá otro robo a los cuartos de la noche, en la dirección que muestra el reloj, no diré que lugar es pero para que se mantenga alerta.

Threes"

Releí la nota las veces que consideré necesario hasta casi saberla de memoria, intentando recolectar la mayor cantidad de información de esta, miré a mi asistente y hablé.

- Digamos que el que escribió esta carta era más joven que yo, porque me acaba de llamar señor, y soy joven, apenas tengo 22 años - dije un poco molesto y avergonzado - tenemos otra pista y eso vasta por hoy Akutagawa- dije mirándolo y luego a mi reloj de pulsera- ya es la hora del almuerzo, tomaremos una pausa del caso por ahora, avisaré a todos los recintos importantes en dirección oeste de la joyería, así lo más probable es que los atrapemos-

- Si fuera usted seguiría hasta acabar el caso... pero no soy quién para juzgar al gran detective Chuuya Nakahara - dijo Akutagawa para luego empezar a irse de la habitación dejándome solo.

Luego de que ya no viera la espalda de mi asistente, saqué mi teléfono, que se abría similar a una libreta, y revisé los mensajes, sonreí al ver el mensaje de Dazai, un amigo bastante querido por mi aunque nunca lo admitiría, me estaba invitando a almorzar con Yumeno kyusaku a su casa.

Dazai
Chuuya, Yumeno quiere invitarte a almorzar, dice que no nos has venido a ver, te esperamos, espero que tengas tiempo.

Revisé el reloj de nuevo para saber cuánto tiempo tenía, definitivamente iría almorzar con ellos, tenia mucho tempo sin verlos ya.

❝ 𝘛𝘩𝘪𝘦𝘧'𝘴 𝘯𝘰𝘵𝘦𝘴 ❞ - 『 𝚂𝚘𝚞𝚔𝚞𝚔𝚘 』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora