CAPÍTULO 3

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Pasaron varios días, Luka ya era amigo de Briseida y hablaban tanto por WhatsApp, como en persona, sus amigas le advirtieron tanto que se cansaron de que ella no las escuche, no la podían juzgar, el amor es así "ciego, sordo, mudo, cojudo y pelotudo".

Llego la fecha tan esperada para los enamorados, 14 de febrero, ella sin pensarlo decidió darle una carta, el por lo contrario no le dio nada, sus amigas le reprocharon como siempre, ella no hizo caso, solo decía que no era para tanto y aunque le dolía no podía reclamar nada, ellos solo eran amigos.

Ese mismo día en la salida Briseida vio a una chica de menor grado, quien llevaba un ramo de rosas muy hermoso, mientras la seguía con la mirada no pudo evitar ver que alguien estaba corriendo detrás de ella cuando fijo su mirada en la persona que estaba allí, era Luka, quien la abrazo por la cintura dándole besos en el cuello, subiendo a la misma moto, donde ella estuvo en algún momento, al ver esto se le hizo un nudo en la garganta, sus ojos se llenaran de lágrimas, dándose cuenta que el miraba a esa chica como ella lo miraba a él,

Briseida seco sus mejillas llenas de lágrimas, subió al auto y sonrió, como si no le hubiera dolido; al llegar a su casa se recostó, tratando de no pensar en lo que había visto, para distraerse agarro su móvil, cuando lo prendió tenia una llamada perdida de Luka; sus lágrimas brotaron nuevamente prometiéndose no volver a saber de él y mucho menos que él sea la razón de sus lágrimas.

Pasaron 3 semanas y aunque Luka intento hablarle ella lo evitaba en todo momento, pero él sabía qué hacer para tenerla de vuelta, un martes al salir de clases, se fue directo a casa de Briseida, ella llego unos minutos después cuando lo encontró en la cocina con Esperanza haciendo el almuerzo, ni bien ingreso él le sonrió diciendo:

- hola pequeña tardaste un poco, ya hicimos el almuerzo con Esperanza – ella algo confundida le pregunta:

- ¿qué haces aquí? No quiero saber nada de ti – Esperanza mira algo incomoda, e interrumpe la conversación:

- señorita Briseida lo siento, el joven dijo que era su amigo y que tenía una conversación urgente con usted – Briseida se quedó en silencio, tomó los platos y mientras los llevaba al comedor le respondió a Esperanza:

- no te preocupes Esperanza, después del almuerzo, hablaré con él.

En el almuerzo Briseida se la paso con el móvil, al ver eso Luka hizo lo mismo; al terminar Briseida lo llevo a su habitación y comenzó la plática:

- Bien Luka ¿Qué te hizo venir hasta acá? – Luka le sonríe y responde de forma agraciada:

- ¿no es obvio? Me evitaste durante mucho tiempo y no sé que hice para merecer ese trato, solo quiero recuperar a la chica que estuvo conmigo en aquel parque.

- esa chica murió el 14 de febrero, cuando te vio dándole besos y abrazos a una chica que llevaba un enorme ramo de rosas – respondió Briseida, tratando de ser fuerte, pero el nudo en la garganta y los ojos a punto de derramar un lágrima no cooperaban.

Luka quedo anonadado, con la respuesta, no sabía cómo ella lo había visto y mucho menos que decirle al respecto, mientras Briseida lo miraba fijamente esperando una respuesta; al cabo de 5 minutos, recién contesto:

- Bien, Briseida la chava con la que viste ese día es mi ex ¿okey? Su nombre es Lara, terminamos hace 3 días, pero aun no entiendo por que te molestaste si solo eres mi amiga. En ese momento Briseida se dio cuenta que no debes ilusionarte, hasta que suceda.

– tienes razón no debía molestarme contigo, pero me dolió, dejemos el tema ahí, si fue mi error perdón y si fue el tuyo te perdono. – Luka la miró y tenia los ojos llorosos entonces se aproximo la tomo de la cintura y la beso, el corazón de Briseida latía a mil por hora, cuando se separaron  Luka rompió el silencio:

- Briseida te quiero ¿sí? Incluso más que una amiga, pero también extraño a Lara, y no quiero lastimarte.

Briseida no entendía, ¿la quería como una mejor amiga? ¿Cómo novia? ¡coño! ¿Cómo qué? "te amo, pero también la amo a ella"; sé quedo con esas dudas durante aproximadamente un mes. Y aun después de ese tiempo no podía entrar en su cabeza ¿por qué la confundía tanto? Unos días la trataba como si fuera la única, sin embargo, pasaba unos cuantos días y estaba con otras chavas, dándoles el mismo trato que le daba a ella, le hablaba cuando quería, ¿y ella?, ella estaba ahí dispuesta a responder, pero, ¿por qué Luka hacía eso? ¡simple! Él sabía que la tenía en la palma de su mano, que, aunque él no estuviera para ella, ella estaría ahí para él.




NOTA DE AUTOR:

¿te doy un consejo?

¡Mírate! Estas para recibir el amor que das, para que piensen en ti cuando se apagan las luces y seas el primer deseo que alguien pida al despertar, mírate en el espejo no estas para un amor a medias, no estas para ser la inseguridad de alguien.

TU Y ELLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora