luzuplay;month

6;borrachos

Todos en Karmaland sabían que las fiestas en casa de Vegetta eran las mejores. Había muchísimo espacio y el anfitrión era el mejor, a pesar de siempre estar detrás de todos vigilando que no destrozaran su casa, siempre era muy amable con todos. 

Y ahí estaban nuestros protagonistas sentados en el césped en la parte trasera de la casa. La música era más baja ahí y no había nadie para molestar. 

— ¡Eh Luzu mira! —gritó Auron para después tirarse al suelo y hacer una marometa— ¡Soy James Bond! 

El castaño soltó una carcajada y lo imitó. El alcohol había llegado ya a sus cerebros y los empujaba a hacer tonterías. 

— Verdad o reto Auron —dijo Luzu mientras miraba el cielo nocturno. 

— Aaaaaah reto —respondió sin prestarle mucha atención. 

— Te reto a comer tierra. 

El contrario sin pensarlo mucho tomó un puñado de tierra del suelo y lo metió a su boca, empezó a toser y a escupirlo poco después. 

— ¡Que puto asco tío! —gritó. 

Luzu en cambio estaba descojonado dando carcajadas hasta que empezó a dolerle el estómago. 

El joven de miel tomó un trago de su cerveza para limpiarse la boca. 

— Que asco... Ahg ahora te toca ¿Verdad o reto? —preguntó Auron con intenciones de vengarse. 

— Verdad —respondió, a pesar de estar ebrio no era tonto. 

— ¿Has... Besado a un chico alguna vez? 

Hubo silencio un momento, la musica sonaba ahogada y lejana. 

— Si —se sentó y miró a su amigo— ¿Por que la pregunta Auroncito? 

— Solo curiosidad... 

Luzu se había acercado al menor notablemente. Los ojos de Auron bajaron a los labios del oji azul. 

— ¿De verdad tienes tanta curiosidad Auroncito? 

— Si... Nunca he besado a un chico antes... 

— Entonces... Me sentiré aforunado de ser el primero... 

Juntaron sus labios en un beso. Luzu se sorprendió por el sabor de sus labios, de verdad sabían a miel. 

Cuando estuvo por alejarse sintió las manos del menor pasar por su cintura, pegandolo más a el buscando por más de sus labios. 

Luzu se preguntó si de verdad era su primera vez besando a un chico, lo hacía demasiado bien. 

Se separaron unos segundos para respirar, Auron rio levemente al ver los labios de Luzu llenos de miel. 

Al notar esto el castaño lamio sus labios para limpiarlo, de una manera muy provocativa. 

— Luzu... —quería más de el, quería sentir sus labios hasta que se hincharan de tanto besarlos. Quería sus besos, quería su cuerpo— Me gustas... 

Cuando uno está ebrio suele ser muy sincero y el lo estaba haciendo. De verdad lo amaba, desde el primer día que lo vió.

Luzu abrió la boca para responder pero fue interrumpido por el vómito, sin tiempo para reaccionar, haciéndolo sobre la ropa de Auron. 

— ¡Joder Luzu que asco! —se quejo este olvidando por completo lo que había dicho segundos atrás. 

De todas maneras, olvidarían todo en la mañana.