CONFIANZA - Creek

NUEVE

Estaban reunidos en la mesa, Craig revolvía el cereal con asco mientras que su hermana comía como si de una bebé se tratará

—Campeón ¿Qué tienes?—Le preguntó el mayor con una sonrisa, Craig le miró con fastidio y sus ojeras resaltaron

Dejo caer la cuchara ensuciando parte de la mesa

—No tengo hambre—Dijo levantándose y retirándose de la mesa

Tricia rió con inocencia

—Hombres—Soltó la pelinaranja rodando los ojos

[×]

Se encontraba encerrado en su cuarto, sentía como si se este se achicara y lo asfixiaba. Usaba el computador tratando de ignorar esa horrible sensación

Hola
✓✓

Ese mensaje acabó con toda esa sensación, una sonrisa se formó en su rostro

Ojitos raros
✓✓

¿Hoy nos vemos?
✓✓

Claro!!
✓✓

¿Puedes a las 3?
✓✓

¿Tengo cara de ser un hombre ocupado?
✓✓

Ocupado viendo el techo xDD
✓✓

Déjame le aviso a Tris
✓✓

¿Tris?
✓✓

Mi hermana genio
✓✓

Ah ok
✓✓

Vio la hora, eran las dos de la tarde así que pensó que era buen tiempo para empezar a alistarse

—Mocosa de mierda—Llamó el pelinegro tras abrir la puerta de la pelinaranja sin previo aviso—Cámbiate—

—¿Por qué?—

—Vamos a salir—

—¿Nuestro tío lo sabe?—

—¿Tengo cara de que me importa?—Tras eso la menor se levantó y se dirigió a su armario a buscar ropa

El cerro la puerta y volvió a su cuarto, se baño maldiciendo por lo bajo

—Puta Red se gastó el agua caliente—Dijo respirando hondo para intentar soportar el agua fría

Tras ducharse salió, su cabello está ligeramente empapado más no le importo. Busco un ropa decente, una camisa con diseño de galaxia con una chaqueta negra, pantalón negro rasgado y zapatos converse con diseño de ajedrez

Se colocó el pantalón y dirigió inconsientemente su mirar al espejo, sus huesos eran notorios y al pasar su mano sin mucha dificultad se sentía
Recordó que ese pantalón le quedaba ajustado cuando lo compró y ahora le hacía falta una correa

Hizo una mueca para ponerse la camisa, no le importa su apariencia ¿No?

Se puso los zapatos y fue cuando sus ojos se pasearon en el cuarto en busca de aquel estuche negro

Bufó con rabia y salió

—¡Tris!, ¡¿Volviste agarrar mi estuche de nuevo?!—Exclamó saliendo de la habitación, hubo un silencio dudoso

—...No...—El mayor entró para encontrar a la menor maquillada erróneamente, suspiró

—Si te quieres maquillar dile a mamá o a mi—Tomó una de las coletas y lo jaló—Pero no hagas esas babosadas—

—¡Aaahhh! Si...—Contestó con queja

—¿Si qué?, ¿Si burro?—Tricia rió por lo bajo

—Si burro—Gracias por hacerse la don Comedia se ganó un Lepe

—Arreglate la cara que pareces la guasona—La niña obedeció yendo al baño donde había una crema para quitar el maquillaje (No sé cómo se llama Lol)

Se sentó en el cuarto de la menor y tomó sin su consentimiento el espejo que había, empezado a delinear sus ojos y a pintar sus labios de un color un poco más oscuro que su piel

—Listo—La niña llegó con la carita empapada—¿Vamos?—El mayor asintió dejando su estuche y el espejo de lado

En silencio salieron para no alarmar a los visitantes que se encontraban en la casa, ¿Qué estarán haciendo? Se preguntó el pelinegro sin hacerle mucha importancia

A la hora exacta llegaron al local, unos castaños lo recibieron

—Bienvenidos a la cafetería Tweak Bros, ¿En qué podemos ayudarles?—Dijo la señora con una cálida sonrisa

—Oh emm...—Craig puso su mano en el hombro de Tricia y la apegó hacia él—Buscamos a Tick—Explicó y se oyó una voz no muy lejana

—¡¡E-ES TWEEK!!—Gritó bajando con rapidez el rubio. El mayor de cabellos castaños se acercó

—Nos alegra que Tweek tenga mas amigos, sin ofender hijo pero ese chico Pete es raro—Habló el padre de familia

—Bueno...el no se aleja mucho si de raro se trata—Bromeó el de pecas

—¿Raro yo?, ¿Con que derecho lo dices?—Ambos chicos rieron, mientras se veían fijamente con cierto rubor en sus mejillas

—Bueno, espero que se divierta—Dijo la señora mientras los menores salían de la tienda

—Y ¿Qué quieres ver?—Preguntó el pelinegro

—No lo sé, solo conozco la escuela—Dijo dando una suave risa

—¿Te gustaría ver el lago? Hay días en que podemos pescar en el y hay otros en que se puede patinar en el—Sugirió la pequeña pelinaranja—¿Podemos ir, podemos ir, podemos ir?—Repetía con insistencia la de ojos verdes

—Si te callas vamos—Contestó el pelinegro haciendo callar a su hermana

—¿Instinto maternal?—Bromeó el rubio

[×]

El sol empezaba a esconderse y la luna salía del otro extremo dejando ver un espectáculo impresionante

Fue una larga tarde, la niña estaba ya cansada y adormecida por lo que, a pedido de la menor, el rubio la llevaba cargando

Llegaron al negocio-casa del más alto, por lo cual significaría una despedida

—Ok, ¿Nos dividimos las ganancias?—Bromeó el de ojos verdes

—Jeje si...¿No quieres quedarte en mi casa?—Tras esa frase ambos se sonrojaron—¡Osea!, Es que es tarde y...—Se justifico avergonzadose más

—Vale, tranquilo—Dijo tratando de calmar al de ojos bicolor