3"ℳ𝑒𝓈 𝒸𝒽𝒶𝑔𝓇𝒾𝓃𝓈...

199 42 17
                                    

❧‣☙

[—Y sin darme cuenta, ya era mayo.]

Cuatro meses habían pasado desde que llegó al pueblo sureño. tres, desde que convive con Alastor. 

Bueno, "convive".

En un principio, el hombre moreno lo despertaba todas las mañanas con un desayuno y una amplia sonrisa; le había permitido dormir en su dormitorio mientras él dormía en el sillón. Pasaba gran parte de la tarde con su huésped, y a veces, lo llevaba a caminar por el bosque o hasta los negocios más cercanos, donde le compraba lo que quisiera. Cuando debía ir a trabajar, Anthony siempre lo sintonizaba; si iba a cazar, en algunas ocasiones el rubio lo acompañaba si le era permitido. Incluso, cuando Alastor estaba de buen humor, lo llamaba Angel. Eso siempre lo desarmaba. Angel, a cambio, recompensaba su protección y buenos tratos haciendo algunos quehaceres que fue aprendiendo sobre el transcurso, algunos los cuales le enseñó su amigo, como cocinar carne o cortar leña. 

Pero algunos pájaros no se pueden encerrar.

Anthony nunca se había sentido tan querido, estable, cómodo... Y eso comenzaba a picar. No es que fuera un malagradecido, pero odiaba el conformismo, odiaba la rutina, no podía acostumbrarse porque esa no había sido su educación, siquiera recibió educación alguna; ¿sería así de llana el resto de su vida? Siempre se imaginó siendo una persona más del montón, sin preocupaciones, pero ahora que parecía llegar el día, estaba aterrado. Se rehusaba a continuar sus pasos hacia la tumba sin disfrutar el viaje como se debía, o como él creía que debía ser. Quería ser alguien, necesitaba demostrárselo a todos y a él mismo. 

Asfixiado de tanta vida simple, decidió cambiar un poco las cosas.  Pensó que podría ir solo esta vez a comprar cigarrillos, ya que el locutor siempre le traía luego del trabajo o iban juntos al pequeño negocio más cercano. Así que se puso un abrigo, llamó a uno de los sabuesos y salió en busca de tabaco para su cuerpo. 

Era extraño caminar sin Al, pero con el perro a su lado de alguna manera se sentía protegido. 

Ya con la caja de cigarrillos en mano y el Sol de pleno mayo dándole vigor, decidió continuar paseando entre las tiendas, hasta que encontró un humilde pero colorido puesto en un terreno baldío situado entre dos negocios, el cual vendía flores. 

—¡Buenas tardes, jovencita! Hermoso día de verano, ¿no cree?—saludó un hombre detrás de unas margaritas.

Anthony miró hacia sus costados, no había ninguna señorita cerca. Dos segundos después comprendió que se refería a él y no pudo evitar indignarse. Iba a defenderse pero aquel hombre apartó su rostro de las flores y el italiano se quedó sin habla. El florista era mucho más alto que él, vestía sombrero y bufanda, a pesar de ser un día caluroso, lo cual indicaba cierta extravagancia procedente de su persona. Aquel hombre de cabellos revueltos le había dirigido una sonrisa cordial, aunque pronto se esfumó cuando se percató de la "jovencita".

—¡Oh, realmente lo siento mucho muchacho! Es que desde aquí atrás creí que- bueno yo, debido a esas facciones tan delicadas, esas lindas pecas-

—No se preocupe, es un cumplido para mí que encuentre mi rostro bello—respondió el rubio con un tono de voz entre amable y coqueto—. Mi nombre es Anthony, estoy prácticamente viviendo aquí, ¿usted es?

—Tyco Dorchester, joven. Nací aquí y estoy progresando como verá en el negocio de la jardinería.— Se quitó el sombrero en gesto de saludo y procedió a cortar con delicadeza unos jazmines— El jazmín es la flor preferida de los ángeles, asumo que lo encontrará exquisito. 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jan 16, 2021 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

❧ 𝓝𝓸 𝓻𝓮𝓰𝓻𝓮𝓽𝓼 ☙ [Radiodust ; Hazbin Hotel]Where stories live. Discover now