2. Grito desgarrador.

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Años después....

Aileen y Cadie cuidaban tanto de las cosechas y también de los árboles que yacían en la región.

A pesar de los poderes de Diosa que ya tenía Aileen, ella también contaba con el control sobre los cultivos ,  por eso se le conocía como "La Diosa de la agricultura y la fertilidad".
Sus conocimientos se los transmitió a su única hija, Cadie.

Iris, la mensajera; se acerco a ellas. Cadie al solo verla se lanza a recibirla con alegría; era su única amiga ahí, ya que las ninfas no eran muy agraciadas con ella y su Madre no la dejaba acercarse a casi nadie.

-¡Iris!, ¿qué nos traes de nuevo?.- sonrío cálidamente Cadie.

-Una invitación a la boda de Harmonia y Cadmo,
Dominic desea que asistan.

-¿Enseri....- Cadie se ve interrumpida por su Madre que contesta en su lugar.
-No asistiremos, envía nuestras disculpas a Dominic y los cónyuges.

-¿Segura, Aileen?, el Titán Dominic y su esposa Nikki insistieron en tener su presencia en esa boda.- cuestionó Iris.
-Es mi última palabra Iris: no asistiremos, gracias.- dijo con cierto enojo en su voz haciendo énfasis en el NO.

Cadie se encontraba desconcertada, es cierto que su Madre se había alejado mucho de la gente del Olimpo; pero aún así se le hacía un misterio las razones y el desagrado hacia ellos.

-Bueno... yo les enviaré la respuesta, ¡nos vemos Cadie!.-le hizo un ademán de despedida con la mano y se fue dejando tras de sí un aura de arcoíris.

-Madre....- comenzó a decir Cadie pero se volvió a ver interrumpida por Aileen.
-Sigamos con nuestro trabajo, querida.

Sin rechistar, Cadie siguió recolectando frutos aún desconcertada y con mil preguntas en su cabeza.

(...)

-Y sin más rechazo la invitación la Diosa Aileen.- informó Iris a Dominic y a Nikki.

-¿Aún tiene rencores hacía nosotros?, algún día nos tendrá que ver a la cara y no seguir con esa insolencia.- dijo con firmeza Dominic.

-Querido, ¿no se te hace que tiene muchas razones para estar molesta?. Tu hermana se metio con su esposo.- musitó Nikki.

-Tonterías Nikki, solo es una desgraciada rencorosa.- Dominic se retiró a seguir con el festejo de los enamorados seguido por Nikki.

-Preciosa Iris ¿hasta donde viajaste a dar la invitación?- dijo en tono coqueto Harry a Iris.
-¿Para qué o qué quieres saberlo?.
-Curiosidad.-dijo Sam.- tardaste mucho y para nuestro Padre era importante.
-¡Fuiste a la Tierra!, queremos saber que exploraste ahí por supuesto.- grito Paddy con emoción.

-¿Nos podrías decir ya de una maldita vez?, no tenemos tu tiempo.- dijo con fastidio Tom.

-L-lejos del olimpo, en la Tierra ahí por los páramos.- Iris se vio intimidada por el hijo mayor de Dominic: Tom.

-¡Vengan aquí, inútiles!, vamos a hablar con los cónyuges.- ordeno Dominic a sus hijos.

Era normal que Dominic tratara así a sus hijos; quería evitar que se voltearán en su contra.

Toda la familia se encontraba ahí platicando con la feliz pareja.

-¿Por qué no divides tus reinos con tus hijos, Dominic?, sería fácil para ti.- dijo Cadmo.
-Tonterías, son mis reinos; mientras yo viva tendré el control absoluto de ellos.

-Eso es algo injusto, nosotros también podríamos dominar un reino.- musitó Paddy pero Dominic lo logró escuchar.

Vino a su cabeza la profecía de Urano, como Dominic destrono a su Padre. Uno de sus hijos haría lo mismo con él; y para Dominic se le hacía obvio que ese hijo sería Paddy. Y tendría que terminar con él .

-Acompáñame hijo mío, necesito hablar contigo.- esa frase heló la sangre de Nikki, ella era de las pocas personas que sabían de la profecía de Urano; pensaba que Dominic lo había olvidado pero estaba muy equivocada. Él iba a matar a su hijo, se negaba a creerlo.

El niño acompañó a su Padre a un lago alejado de la celebración; de un momento a otro, Dominic con una mano tomo del cuello a su hijo y se adentró al lago.
Paddy pataleó, luchó pero a diferencia de sus hermanos él era muy pequeño y sus esfuerzos eran en vano contra ese Titán sin corazón.
Dominic con su mano libre junto las piernas de Paddy.
-Perdóname hijo mío, pero no voy a permitir que me derroques.

Eso fue lo último que escuchó el niño antes que como sí su cuerpo fuera una ramita, lo partiera en dos, tirándolo al agua pintándola de rojo.

Nikki que había visto todo, soltó un grito desgarrador que resonó en todo el Olimpo, la tierra y el inframundo. El grito de dolor de una madre que había perdido a su pequeño hijo.

Amor a la oscuridad (Tom Holland)(Fanfic).Where stories live. Discover now