Rebelde Way: Bariloche (MI VERSIÓN)

Capitulo 16

Narra Marizza

Marizza: Hola mi amor

Luego de tres días de no verlo, me abalancé a su cuello. Su olor llenaron mis fosas nasales y esbocé una sonrisa.

Por mucho tiempo no quise aceptar que su presencia me hacía bien, pero ahora no lo podía disimular. Con sólo pensar en él o verlo, mi cara sonreía, al igual que mi interior.

Me sorprendió cuando no me correspondió el abrazo. Parecía rígido y distante.

Pablo: Hola. ¿Quién sos?

Agus: Agustín, amigo de Vico, Mia y Marizza, ¿Vos?

Pablo: Pablo, novio de Marizza

Agus: Todas tienen novio acá

Pablo: Si, ¿Algún problema?

Se fue acercando hacia él, pero lo retuve, sonriendo falsamente, otra vez no.

Marizza: No, ningún problema, vamos. Chau Agus

Mia: ¿Qué te pasa? ¿Por qué te pones así?

Manuel: ¿Cómo por qué? No me lo banco, se hace todo el canchero

Mia: ¿Estás celoso?

Ella se ríe ante la cara del morocho.

Manuel: ¿Yo celoso? Pff

Se acerca y la besa apasionadamente, a lo cual ella responde con el mismo entusiasmo.

Mia: No le vuelvas a pegar a Agustín, ¿Si?

Manuel: Si

Manuel largó un suspiro y la besa de nuevo.

Rocco: ¿Qué te pasa? ¿Por qué me traes así?

Vico: ¿Yo? ¡Le pegaste Agus!

Rocco: ¿Agus? Se llama Agustín, y estuvo provocandome todo el tiempo

Vico: Estaba jodiendo nada más. Vos estás celoso

Rocco: Yo no estoy celoso, no me van los celos

Vico: ¿Ah, no?

Rocco: No. Además vos también le seguías la onda

Vico: Es un amigo nada más

Se acerco para calmarlo y besarlo, pero él le corrió la cara. Rocco no era así, y tampoco le gustaba ese lado de él, no lo soportaba.

Vico: Cuando se te pasen estos celos ridículos, me avisas, ¿Si?

Vico se fue y dejó a Rocco enojado.

Estabamos con Pablo y lo notaba raro. Todavía no me entraba en la cabeza por qué estaba así. Es como si no le importara, ni siquiera un beso me había dado desde que... ¿Y si era eso lo que lo tenía así? ¿Y si no le había gustado? ¿Estaba decepcionado?

Marizza: ¿Qué te pasa? Tuve el accidente y ni bola me das

Pablo: Estaban muy juntos con "Agus"

Marizza: ¿Qué?

¿Estaba celoso? Me alivie un poco el hecho que no sea lo que pensaba, pero le seguía inquietando.

Pablo: Eso, ¿Te gusta?

Marizza: ¿Qué decis Pablo? ¿Vos estás desconfiando de mí?

Al ver que no me respondía, me di media vuelta y me traté de ir y me agarro del brazo. No podía creerlo. Después de todo lo que habíamos pasado, en especial aquella noche, arruinaba todo por una estupidez.

Marizza: Soltame

Pablo: ¿Vos te enojas?

Marizza: Si, yo me enojo. Porque me paso lo que paso, vos me salvas y todo bien. Hoy me despierto, te quería ver, agradecer, estar al lado tuyo y disfrutar de lo que nos queda del viaje, y te enojas porque le cure una herida a Agustín, sos un estúpido. Y yo pensando en que te habías arrepentido de lo que paso entre nosotros

Me solté de su agarre y tratándome el nudo en la garganta, lo vi a los ojos.

Marizza: Y cuando te digo que me sueltes, me soltas

Me fui, no soportaba verlo, me enferma cuando se pone así. Me fui a mi cabaña y me empecé a preparar para el boliche.

Narra Mia

Nos estabamos preparando con las chicas cuando tocan la puerta.

Mia: ¿Quién es?

Xx: ¡Tomás! ¿Está Pili?

Pili: Ahi voy

Guardó su maquillaje y se vio al espejo viendo como quedo. Abrio la puerta.

Pilar: Hola, amor

Tomás: Estás re linda mi amor, quiero llevarte a un lugar antes de ir a la fiesta, ¿Queres?

Pili vio para atrás y nosotras le hicimos señas de que vaya con él.

Pili: Dale, vamos. Chau chicas, nos vemos después

Todas: Chau

Pili: ¿A dónde vamos?

Tomás: Es una sorpresa, ¿Confías en mí?

Pili: Siempre

Tomás: Vamos

Nos terminamos de preparar y fuimos al boliche. Los chicos no habían llegado, entonces fuimos a bailar y Luján y Marizza fueron a la barra.

Lujan: ¿Qué te pasa?

Marizza: Nada, no quiero hablar de eso

Luján: Bueno, está bien

Marizza tomó un vaso de fernet rápidamente.

Luján: ¡Pará! Te va a hacer mal, te operaron ayer recién

Marizza: No jodas Luján. Otra por favor

El bartender le dio otro vaso y se lo tomó de una. No le importaba nada. En ese momento lo único que quería era olvidarse de todos sus problemas y disfrutar del viaje.

Luján: Marizza vos no sos así, no tomes por tomar

Marizza: Basta, Luján. No te gusta, andate

Luján se fue enojada y Marizza siguió tomando. Alguien le tocó el brazo y ella se dio vuelta enojada. Seguir escuchando los reproches de su amiga la hartaban.

Marizza: ¡Basta Luján!