Rebelde Way: Bariloche (MI VERSIÓN)

Capitulo 11

Narra Pablo

Llegamos al hospital y bajamos a las chicas, todavía inconsistentes. Entramos y Manuel le dijo a la recepcionista lo sucedido muy resumidamente y trajeron unas camillas.

Médico: No pueden pasar, cuando sepamos algo, les avisamos, mientras tanto llamen a los familiares

Pablo: Si, vienen para acá

Médico: Está bien, hasta luego

El médico se fue y me senté en un sillón y Mia se sentó al lado de mí, poniendo mi cabeza en su hombro, abrazándome.

Pablo: Ojalá estén bien

Mia: Lo van a estar. Ya las trajimos acá, todo va a salir bien

Pablo: Eso espero


Después de un rato, Manuel me despertó a Mia y a mí, habían llegado los chicos y Martín, que nos había acompañado.

Luna: Cómo están las chicas?

Marcos: Bien, el médico se las llevo hace rato

Laura: Cómo las encontraron?

Pablo: Estábamos caminando con las linternas y las vimos desmayadas las dos juntas y justo ahí había una ruta. Llamamos a Manuel y vinimos acá

Martín: Que suerte, bueno, sentémonos y esperemos

Todos nos volvimos a sentar, sólo habían venido: Luna, Laura, Martín, Nico y Pilar. Una hora después vino el médico.

Médico: Familiares de Luján Linares?

Marcos y Luna se pararon.

Marcos: Si, acá, Como está ella?

Médico: Sufrió hambre, mareos, un poco de hipotermia y cansancio. Está sedada e internada, pueden pasar a verla, de a dos, no más

Marcos: Gracias

Luna y él se fueron a ver a Luján y yo me paré y fui con el médico antes de que se vaya de nuevo.

Pablo: Y Marizza Andrade? Cómo está?

Médico: Ella está más complicada, además de sufrir lo mismo que la otra chica, sufrió también por un golpe que se dio en la cabeza y en el abdomen. Está en cirugía ya que tuvo una hemorragia interna en la cabeza, y la estamos controlando

Martín se acercó preocupado y se paró al lado mío.

Martin: Y va a estar bien?

Médico: Eso todavía no lo sabemos. Voy a venir cuando ésta termine, adiós

El médico se fue y me volví hacia Mía que estaba llorando y la abracé. Toda esta situación me estaba haciendo demasiado mal, necesitaba verla despierta y que me pelee o que me diga que esta bien.

Pablo: Va a estar bien, tranquila

Ella se separó del abrazo. Sus ojos estaban rojos de tanto llorar y eso me la bajo más.

Mia: Si le pasa algo me muero, es mi hermana y la amo

La volví a abrazar y nos sentamos de nuevo, largué un suspiro.

Pablo: Yo también
La consolé hasta que se quedo dormida de nuevo.


Marcos y Luna entraron a la habitación de Luján y ella estaba sedada y dormida como el médico había dicho y se sentaron uno a un lado de la cama.

Luna: Vas a estar bien, Luji

Marcos: Si, vas a estar bien. No sabes el susto que me pegué cuando la vi a ella desmayada en el bosque, de noche, con frío y toda pálida

Luna: Tranquilo, por suerte hicieron tiempo a traerlas acá

Marcos: Si, estuvimos todo el día buscándolas

Martin: Chicos, vayan a dormir a las cabañas, Pablo y yo nos quedamos y les avisamos

Mia: No, yo me quedo

Manuel: Mia, Martín tiene razón, vamos a dormir, mañana volvemos

Mia: No Manuel, yo me voy a quedar

Manuel: Está bien, Pilar y Laura, Vamos?

Las dos: Vamos, chau chicos, nos avisan

Pablo: Si, si les avisamos, chau

Los chicos salieron del hospital y justo cuando se subieron al auto y se fueron vino el médico.

Médico: Familiares de Marizza Andrade?

Mia, Martin y yo nos paramos.

Pablo: Si, acá, Cómo está?

Médico: Mal. Tuvo un paro cardíaco, y la tuvimos que reanimar, va a ser muy difícil salir de ésta

Mia se largó a llorar y yo la abracé atrayéndola hacia mí. Sentí las lagrimas en mi remera, mojándose. Un paro cardiaco? Tan grave estaba ella y yo acá sentado en unja estúpida silla sin hacer nada? Por lo menos la tenia que ver, no soportaba mas esa sensación de angustia y de espera. Sentí un nudo en la garganta que no podía contener.

Pablo: Todo esto por un golpe estúpido en la cabeza?

Médico: No fue sólo un golpe en la cabeza, se golpeó en una zona muy crítica y nos costó mucho controlar la hemorragia interna, ya que era mucha sangre y no sabíamos de donde provenía, y lo que provocó el paro cardíaco y por eso la tuvimos que reanimar

Martín: Bueno, gracias doctor

Médico: Voy a volver cuando tenga noticia

Mirando a nuestro profesor, Mia le suplicó que le asegurara que ella se iba a recuperar.

Mia: Martín, decime que va a estar bien, por favor

Martín: Ojalá pudiera decirte, pero no puedo

Pablo: Le dijiste a Sonia?

Martín: No, ahora debe estar dormida, y si le digo, va a querer venir para acá, mañana se lo digo tranquilo

Pablo: Está bien

Volvieron Marcos y Luna de la habitación de Luján y se acercaron preocupados.

Marcos: Cómo está Marizza?

Luna: Mia por qué lloras?

Se acercó a su amiga que seguía refugiada en mí y separó su cabeza de mi pecho, pero el resto del cuerpo lo mantuvo quieto.

Con la voz entrecortada, le respondió. Nunca habia visto en tan mal estado a mi amiga, y eso que la conozco hace bastante tiempo, desde que éramos chicos. Se notaba a simple vista que Marizza se habia convertido en una persona muy importante para ella.

Mia: A Marizza le dio un paro cardíaco
Se sorbió la nariz y se frotó los ojos para secarse las lágrimas de las mejillas.

Luna: Qué?

A ella también se le humedecieron los ojos, poniéndose muy triste.

Marcos: Pero va a estar bien?

Martin: No saben nada, todavía

Luna: Mia, vamos al baño a lavarte la cara

Agarró a su amiga y la separó de mí. Ella se apoyó en Luna y juntas fueron al baño y por primera vez sin Mia, me rompí y me largué a llorar.

Pablo: No puedo más, necesito que esté bien

Martín: Lo va a estar, ella es fuerte

Pasamos la noche como pudimos, a veces Luna lograba que Mia se durmiera, pero por los sillones no muy cómodos, se volvía a despertar, ella era la más sensible en todo esto. Yo me quedaba bastante quieto, no podía ni pensar en ir al baño o comer algo, sólo en ella.