1. Disculpe...¡DISCULPE!

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Salgo de mi trabajo, bueno ahora extrabajo, no puedo creer que ese desgraciado al que llamaba jefe me ha despedido por estar jugando al CandyCrash cinco minutos.¡ Aghh! Y si no fuera suficiente esta mañana me ha venido una visita inesperada de color rojo. Así que el humor que llevo es de mil demonios. ¿Qué más me podría ocurrir? Y como en una película el universo juega en mi contra y se pone a llover de repente.

Como era de esperarse no traigo paraguas y si no fuera suficiente mala suerte voy vestida solamente con un vestido negro hasta las rodillas, ya que me dejé la chaqueta esta mañana. Así que como única solución salgo corriendo en busca de alguna parada de bus, algún  restaurante o simplemente un lugar dónde resguardarme. 

Como una señal enviada de dios encuentro un café al lado derecho dela carretera. Me dispongo a correr hacia mi refugio cuando de repente un coche me pasa a todo gas a punto de atropellarme.

- Era de esperarse ya estaba teniendo demasiada suerte.- pienso irónicamente en mi cabeza, alcanzando la cafetería y entrando.

Me quedó asombrada con el lugar en el primer momento que meto un pie en él. Es una cafetería rústica con las paredes de un blanco gastado, en las cuáles cuelgan hermosas fotografías de tazas de café. Las mesas redondas están colocadas al lado de una gran barra de color marrón dónde se puede apreciar una máquina haciendo café con un  exquisito aroma que incluso llega hasta aquí. Como no podría faltar en toda cafetería vintage hay una bicicleta antigua, un poco oxidada, colgando de un pared. Pero lo que más me enamoró del lugar es el gran ventanal que hay a la derecha del lugar con vistas a la calle.

Me cuelo entre la gente para coger la mesa que da a la ventana antes de que alguien me la quite. Una vez sentada intento secarme la cara un poco con las servilletas cuando el camarero se me acerca.

- ¡Buenas tardes! ¿Que le pongo señorita?- me pregunta muy amable.

- Hola. Un café con leche muy caliente. Gracias.-

El chico apunta el pedido y se va dejándome otra vez con mis pensamientos. ¿Dónde trabajaré ahora? ¿Alex se enfadará conmigo? ¿Tendré que...

¡Ahhh! Pero que tonta aún no me he presentado. Me llamo Ella soy un chica morena, alta, con los ojos verdes de 23 años. A los 19 me escapé del machista de mi padre y la borracha de mi madre. Encontré el amor de mi vida en Alex un chico de 25 años pelo negro ojos azules y un soñador en toda regla. Aún no ha descubierto lo que le apasiona e; esta vida por  eso  aún no trabaja. Los dos vivimos hace dos años en un pequeño apartamento a a las afueras de la ciudad. Los gastos lógicamente los pago yo, bueno los pagaba porque ahora sin trabajo no se lo que haré. Podría trabajar en una cafetería o en un lugar parecido o...

-Disculpe... ¡DISCULPE!-

Había estado tan perdida en mis pensamientos que no me di cuenta que un chico me estaba hablando. Alto, ojos de un profundo gris, rubio tirando a moreno, bastante (mucho) guapo y un cuerpo digno de un dios griego...

-¿ Es usted sorda o algo?-

Mierda. Me había vuelto a pasar.

-Lo siento- me disculpé- ¿que se le ofrece?-

Me miró con una cara muy poco amigable y contestó - disculpe pero se encuentra usted en mi sitio asi que haga el favor de irse de inmediato.-

¿Pero a este tio que le pasaba?

Puse mi mejor sonrisa irónica - los siento pero aqui no pone su nombre... a menos claro que usted se llame made in China.- dije leyendo en una esquina de la mesa.

La cara del chico era todo un espectáculo. Sus ojos casi se salen de sus órbitas  mientras toda su cara se ponía roja de la ira.

- ¿Pero tu quien te crees que eres?¿Acaso no sabes quién soy yo?- ahora que lo decía sie que me resultaba un poco conocido - mire no me importa solamente puede hacerme el favor de irse a otra mesa por favor-.

-Mmm...No. Por favor déjese de molestar y váyase.- tengo que aclarar que yo normalmente no era tan borde pero hoy no era justamente mi día.

El hombre se dio media vuelta pero justo antes de irse susurró- atenta a las consecuencias-.

Yo solo me quedé observando la puerta por la que había salida sin saber si haría realidad su advertencia.





Y aquí acaba el primer capítulo espero que os haya gustado!


Un bestote💋

Lorca 

¡Ese sitio es mio!Where stories live. Discover now