『RESOLUCIÓN』

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"Después de la expansión inicial, el universo se enfrió lo suficiente para permitir la formación de simples átomos..."





10:00 a.m.

En otro lado, alejada del calor de un normal y atípico verano, se encontraba Uraraka paseando por los jardines cercados alrededor del campus, no era que le gustase dar paseos de manera espontanea así, pero en aquella ocasión se le revolvían miles de pensamientos, la mayoría tenían por autor a Bakugou quien la venia acosando en las ultimas semanas. No era que se conocieran antes de la preparatoria pero sentía como si lo hubiese estado viendo toda su vida, con lo poco que la dejaba respirar estos días.

Sus pasos eran pesados, no sentía ni siquiera el piso asfaltado debajo suyo, la dirección no era tampoco claro, solo se dejaba guiar por el fresco viento que corría alrededor suyo, una brisa que la rodeaba y la hacia sentir mejor.

Las hojas de los arboles chocaban en forma melodiosa, con un cielo despejado, azul y con nubes pulcras escurriéndose en el, mirándolo podía sentir una  extraña satisfacción como consuelo. ¿Como lidiar con sus problemas cuando el mundo parecía tan tranquilo y su vida tan perturbada? No era como si simplemente pudiera desechar sus sentimientos como un objeto inservible, no quería ni podía hacerlo. Pero a la única que terminarían haciendo daño seria ella misma. Si huidas ni atajos. ¿como encarar al amor sobre la amistad?

—Pense que habías huido de nuevo. ¿has estado dando vueltas hasta ahora?

Bajo la mirada del cielo para encontrarse frente suyo a Bakugou con el ceño fruncido, el viento movía las hebras de su cabello hacia su dirección radiante bajo el brillo del sol, se veía incandescente tal cual su personalidad. 

 —¿Que haces aquí?—pregunto con en tono bajo 

Katsuki se acerco a ella, Ochaco no retrocedió, lo miraba serena

—No es tu problema lo que haga

—Entonces tampoco el tuyo—camino a un lado de el para seguir su recorrido

Rápidamente Bakugou detuvo por el brazo a la pelimarron.

—¿Que pasa Cara redonda? Si quieres ponerte impertinente conmigo al menos venceme primero en una batalla de verdad—ladeo una sonrisa engreída

Para Uraraka el era la ultima persona que desease ver, pero no podía simplemente ignorarlo.

—Bakugou suéltame, quiero estar sola—hablo sin voltearse

Nada le había salido bien los últimos días.

"Tus notas han empeorado estos días. Si no quieres tomar reforzamiento por lo menos intenta subir tu rendimientos en los últimos exámenes. Te falta concentración... "

Las palabras de Ayuzawa-sensei le habían dado el ultimo golpe que necesitaba para estar desanimada, y aunque no fuese bueno para ella, decidió que lo mejor era aislarse lo mejor posible. Pensar a su manera que era lo correcto y que no. Poner en orden sus ideas no le vendría nada mal.

—¡¿Ah?!—reforzó su agarre y tiro de su brazo

Uraraka estaba enojada con el rubio. No podía dejarla sola ni siquiera en un momento así, y eso la sacaba de quicio. ¿Que mas era necesario para hacer su vida miserable? ¿cuanto mas queria arrinconarla? Se sentía cansada 

—Si quieres decir algo ahora es el momento

Y de pronto dejo de pensar. ¿La voz de Bakugou sonaba serena? e incluso..¿preocupada?. No, no podría ser. Era de Bakugou de quien estábamos hablando. Seguro su razón de arrastrarla, hasta Dios sabe donde, era solo para reprocharle y recordarle lo débil que era en comparación a el. Notas máximas, habilidades sobresalientes. Todo lo que un héroe a futuro soñaba el ya lo tenia por derecho. Y eso en el fondo la tenia celosa


(...)



Su cuerpo parecía el de un fantasma. Sin vida y sombrío. Seguramente algo debe haberle pasado, y probablemente tenga algo que ver su llamada a la sala de profesores. No era necesario que me entrometiera en su vida. ¡Ni si quiera se que hago aquí!. Pero con esa cara de espectro cualquiera se preocuparía ¡¿cierto?!. ¡Oh, joder como me voy arrepentir luego!

No había nadie por los alrededores de las calles dentro de la UE. Parecía que nadie salia por las afueras del gimnasio pero no estaba de mas asegurarse. Al observar sobre el paisaje los arboles eran los únicos testigos de su encuentro. Cuando Katsuki observo a Ochaco con su mirada por los suelo y con su inusual cara desdichada no pudo contener mas sus ansias de abrazarla. La menor no se lo esperaba para nada, abrió totalmente sus ojos sorprendida. La cabeza del rubio se acomodo en el hombro de Ochaco sus cabellos se entrelazaron y cosquilleaban en en cuello y oído derecho de la chica, los robustos brazos de Katsuki posicionados en su cintura dejaron inmóvil a la joven quien no sabia si debía devolver el abrazo.

—Normalmente me importaría una mierda estas cosas—resoplo—pero ya que se trata de ti no puedo fácilmente olvidarlo. Si algo te molesta dilo y ya. Saca la basura

Un idiota siempre sera un idiota donde quiera que este. Por eso, no había otra razón. Y aun con todo las lagrimas de la pequeña adolescente resbalaron por sus redondos cachetes, no quería dejarlo salir, pero se sentía mas débil que nunca, tan impotente que el simple hecho de tener a alguien fuerte a su lado le hacia pensar que podía tomar esa fuerza para si misma. Lentamente hundió sus manos en la espalda ancha de Bakugou.

—¿Como puedo reunir el valor?—sollozo—Estoy lejos de alcanzarlo...

Cada palabra era escuchada por Katsuki, entendía y le molestaban su mensaje, pero no sabia como enojarse con ella ahora. Palpo la cabeza de la chica

—Dile todo lo que pienses. Estoy seguro que incluso ese idiota entenderá

Y cuando lo hagas no volverás a llorar tan miserablemente como hoy. Te pararas con una mirada firme y risueña como siempre

El resto de los minutos la joven derramo sus últimos suspiros en el apoyo que por primera vez mostró Bakugou. Tal vez no era tan malo después de todo su compañía




»By: SHIMA

BIG BANG [Uraraka X Bakugou] (ABANDONADA)Where stories live. Discover now