One shots de México.

Tener Dos Padres No Es Malo... Perra.

Como todos los días, México era el primero en levantarse, sin embargo, esta vez fue diferente a las demás mañanas, su hija, Jatzibe, estaba muy emocionada por entrar a su nueva primaria.

Así que ella levantó a sus papás.

—¡Papás!— cayó justo encima del estómago de Rusia, provocando que este se hiciera un ovillo abrazando su cuerpo.
—Ugh... B-buenos días...— dijo sin aire, el latino se levantó también, mirando a su mocosa.

—Buenos días, escuincla, ¿Lista?— sacudió su cabello y se fue a arreglar, pues sería el quien dejaría a su hija, esta vez.
—Rusia, la próxima te toca a ti.— dijo saliendo del baño acomodándose su camisa blanca junto con sus respectivos pantalones negros con unos tenis.

El eslavo asintió sin ganas y se cubrió de nuevo con las sábanas.

La niña se subió al auto con algo de ayuda, pues era algo pequeña a su edad, pero eso no la detenía.

Fue viendo la panorama del lugar, jugando de vez en cuando con las orejas de su padre, quien soltaba leves risas sin quitar la mirada de la carretera.

Al llegar, la risa de los niños era los que reinaba, aunque uno que otro lloraba, Jatzibe tomo la mano de su papá y la apretó, estaba bastante emocionada, pero el miedo todavía llenaba su cuerpo.

Llegaron a la puerta, México se hincó hasta estar a la altura de su hija.

—Recuerda, si alguien te molesta... —

—Le digo a la maestra...—

—Si te sientes mal...—

—Le digo a la maestra...—

—Nos vemos, mi amor...— tomo la cabeza de su hija y le dio un suave beso en su frente.
—¡Adiós papi!— corrió hasta el salón que estaba anotado en la libretita colgada en su pecho, fue un regalo de sus padres y de verdad le gustaba.

Entro a su aula y se sentó en la primera banca que encontró.

Tenía una sonrisa en su rostro, mirando a sus demás compañeros, destacando un grupo de niños y niñas que se cuchicheaban entre ellos, hasta que uno de ellos apunto a ella para susurrarle algo a una niña de cabello oscuro.

Soltó un suspiro y miró a la ventana a su lado.

—¡Oh! ¡Laila!— gritó abrazando a su amiga, quien era hija de Japón y Corea del Sur.

Era un año menor pero era japonesa, así que se saltó todo Kinder.

Aquella niña la abrazó de igual manera, ambas reían, la plática era amena y divertida, pues se conocían de mucho.

La maestra llegó, el silencio se hizo presente al poco tiempo.
—Buenos días mis niños, soy Vanessa Colette, soy su nueva maestra.— les dedicó una sonrisa.

—¿Por qué no nos conocemos todos?— camino hasta Jatzibe, pues esta era la primera de la principal fila.
—Vamos querida, di tu nombre, lo que más te gusta hace...— la niña asintió y se levantó de su lugar.

—Yo soy Jatzibe, tengo 6 años y me gusta jugar con mis papás.— sonrió con dulzura.
—Oh cierto, vi a tu padre en la mañana, parecían muy unidos...— le dedicó una sonrisa y está se volvió a sentar, para después, su amiga se levantara.

—Soy Laila, me gusta jugar con espadas.— se sentó de nuevo, eso era algo que la representaba, su seriedad ante las cosas.
—B-bueno...— fue siguiendo con todos los niños, no había ningún problema con los demás...

Pero había una niña, que no dejaba de ver a Jatzibe con algo de curiosidad.

Fue cuando levantó su mano y la maestra le dio el permiso de hablar.

—Maestra, ¿Es normal tener dos papás?— la hija del latino miró a la chica.
—Oh Mary, por supuesto que no, tiene que ser mamá y papá.— Vanessa explicó de manera serena.

—Pues Jatzibe tiene dos padres, ¿No la hace anormal a ella también?— la chica de cabello oscuro apuntó a nuestra protagonista, quien se sonrojo al ser vista por todos.
—Hmmm, realmente es problema de cada quien...— la maestra miró de manera rigurosa a la de cabellos dorados.

[...]

Los días y meses pasaron, tenían 5 en la escuela, pronto pasarían a sexto grado, pero Jatzibe quería irse de la escuela, pues tanto Mary cómo otros niños, incluyendo la maestra, no dejaban de molestarla.

—¿Y como están tus PAPÁS, Jatzi~?— aquella irritable chica comenzó a picar la mejilla de la contraria.
—Escuche que sus papás se besan en público...— susurro una niña causando algunos sonidos sorprendidos.

—Que te valga verga.—

—Uy~ se enojó...— el grupo de niños comenzaron a reírse.

El timbre de la salido sonó, Jatzibe salió corriendo del aula, Rusia lo esperaba con una sonrisa.
—Hola hi-

Sus palabras fueron calladas al ver como su hija lo abrazaba fuertemente, aferrándose a su pecho.
—Vamos a casa...— la chica lo miro con sus ojos cristalinos, nunca les había dicho nada del tema.

[...]

México miraba a su hija, ya habían tenido una plática sobre aquello, el eslavo simplemente soltaba suspiros, observando a su amado.

—Escucha muy bien lo que te voy a decir... Lo harás no importa que...— el latino miró a su hija y le dedicó una sonrisa.

Al día siguiente, Jatzibe iba con una sonrisa, al entrar al aula, Mary platicaba con sus amigos, se acercó lentamente a ella y la miró.

—¿Qué quieres feno-

Jatzibe le dio un golpe en su cara y antes de que otra chica le devolviera la acción, está le mando una fuerte patada en su estomago.

—Sabes querida, mis papás son mejor que los tuyos en muchos aspectos, los quiero tanto como no tienes idea, nunca en la vida, me sentiría avergonzada de ellos...— se hincó hasta quedar a su altura.

—Tener dos padres no es malo... Perra...— lo dejo en el suelo.

Tomo un libro y miró a la maestra que iba entrando.
—¡Jatzibe! ¿¡Que-

Le lanzó aquel objeto justo en la cara, saliendo del aula gritando fuertemente.

—¡ADIOS PUTAS!— tomo su mochila y se fue con sus padres, pues ya la habían sacado de la escuela.

La neta no me gustó el capítulo

Se aceptan críticas.

Lxs amo!