HESITATE

Parte 9 ~ Danielle Jonas

A las pocas semanas de haber llegado inscribí a Minerva en el colegio que Nathy me había recomendado, teniendo en claro que me iba a encontrar con el hermano mayor de los Jonas en cualquier momento.

- Mañana es tu primer día de escuela – dije cantarinamente a Minerva mientras le servía el almuerzo - ¿Estás nerviosa?

- Un poco... creo – quedó mirando su plato y tomó lentamente el tenedor

- Cariño – me senté a su lado y besé su cabello – lo entiendo, todo es nuevo para ti, desde el colegio hasta el idioma

- Nos fuimos de casa porque tú querías – murmuró mientras jugaba con la comida – nunca me lo preguntaste

Tomé aire y miré el techo por un instante. Sabía que en algún momento yo me volvería en la mala de la película

- Minerva – me miró – ya te expliqué porqué teníamos que venir, no sólo debes vivir la realidad en Francia, también quise que vivieras lo que yo viví aquí – le sonreí

- No fue lo mismo que le dijiste a marraine Nathy... mi papá puede estar aquí ¿cierto?

Joder que esta niña es lista, me dejó sin habla

- No me preguntaste si yo lo quería conocer – volvió su mirada al plato – Ed es buen papá conmigo

- Minerva – suspiré – ya conversamos esto

- No lo quiero conocer, Teddy es mi papá y nadie más lo va a ser – se levantó y fue con paso decidido a su habitación, cerrando la puerta de golpe

Mi teléfono sonó y en la pantalla vi el nombre de mi mejor amiga

- ¿Qué hiciste para que la niña esté tan molesta? – dijo en un instante

- A veces no me gusta que seamos vecinas – bufé – nos escuchó hablar de Nicholas el otro día

- ¿Decidiste al final? ¿La llevarás a la casa de sus abuelos?

- No quiere conocerlo – suspiré – y la entiendo, Ed la ha criado todos estos años, los padres de él son sus abuelos... no le puedo quitar esa idea de la nada

- En algún momento Minerva tendrá que conocer a Nick, habrá un momento donde ella querrá saber de dónde vino.

- Si es como yo en ese sentido, tendrán que pasar 25 años por lo menos – reí – no le puedo prohibir a Nick el conocer a su hija, no es justo para él... A pesar de lo que pasamos, él tiene el derecho por lo menos de saber que tiene una hija y que tiene la posibilidad de tener relación con ella.

- Dime cuando estén listas, es mi ahijada, merezco estar con ella en todo momento

Rodé los ojos

- Siempre estarás para ella, lo tengo claro

- Ahora ve y arregla tus cosas con ella, ¡mañana tiene su primer día! No puede ir con mala cara

- Si... ya... te hablo cualquier cosa – corté la llamada y dejé mi teléfono en el pantalón.

Caminé hacia la habitación de Mine y di unos pequeños golpes, al no recibir respuesta, le hablé

- Hija ¿podemos hablar? – no recibí respuesta otra vez – Minerva, voy a entrar

Abrí la puerta y la encontré con fotos repartidas por toda la cama, sentí un frío recorrer mi espalda

- ¿Es él? – me preguntó indicando una foto – ¿Él es mi papa?

- ¿Dónde encontraste estas fotos?

- Marraine, me dio una caja con unas fotos y su cámara. No lo quise abrir antes... hasta que recordé que él podría estar en estas fotos