Capítulo 13: Decisiones

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En qué momento pasó una hora y media de clases. Fuck si sigo así, no podré graduarme.

Pero como carajos me iba a concentrar si no sabía nada de ella y lo peor de todo es que tampoco era como si pudiera escribirle a preguntar. Miré la pantalla de mi celular sin esperanza alguna y de repente esta se iluminó.

En un milisegundo experimenté esa sensación de la que las personas suelen hablar, esa sensación que tienes de que el corazón te va a saltar fuera del pecho.

*Mensaje de texto*

-Hola mi bonita, te necesito y te extraño. Me preguntaba si tal vez podía ir a tu departamento y quedarme un rato contigo 💛

Volví a bloquear la pantalla de mi celular y alcancé a Kim quien ya iba unos pasos más adelante.

-¿Todo bien?

-Si, era Johan

-Y?

-Quiere dormir conmigo

-Uy uy dormir dormir o dormir no domir?

-Las dos supongo...

-Oye y ... ¿Ya lo hicieron? -preguntó mi amiga expectante a mi respuesta.

-No, aún no. -sonreí, moviendo mi cabeza de un lado a otro. Kim y yo nos teníamos tanta confianza que ese tipo de preguntas venían sin filtro.

-¿Y qué están esperando, el matrimonio? -se burló con una gran carcajada.

-Pues ayer, casi pasó algo.

-Pero llegaste sola al departamento. Y antes de eso dijiste que habías coincidido en un plan con tu jefa y su novio.

-Exacto!

-Omg What! Escupelo ya! ¿Qué pasó?

*Flash back noche anterior*

-Oye como que Johan ya lleva mucho tiempo en el baño no? -comentó Mario

-Si tienes razón... iré por él

-¿Su novio necesita niñera en el baño señorita Calle?

Tal vez solo este un poco mareado -respondí seria ante el cometario de Garzón y me puse de pie con dirección al cuarto de baño.

Toda la noche María José no había hecho más que fastidiar a Johan, y quería entender sus motivos, pero no podía justificar su actuar. Johan no le había hecho nada, si tanto quería odiar a alguien debía ser a mi.

-¿Johan estas bien? -golpee varias veces la puerta sin obtener ninguna respuesta.

-Baby me estas preocupando voy a entrar ok?

Giré la perilla de la puerta con la esperanza de que no estuviera asegurada y así fue. Al entrar pude ver a Johan sentado en el piso, con la cabeza arrimada contra la pared.

-Bonita, hola disculpa por no responder no me estoy sintiendo bien. - dijo en voz baja con media sonrisa dibujada en su rostro, estaba tan pálido que era innegable su malestar.

-Te ves muy mal bebé! ¿Estás muy mareado?

-No bonita no es eso, solo no me estoy sintiendo bien. -intentó ponerse de pie, pero se desvaneció al piso en su intento.

-Llamaré una ambulancia! -tomé mi celular en medio del pánico que sentía. Entré al baño esperando encontrarme a mi novio mareado por los efectos del alcohol, pero en cambio me encontré con un Johan a punto de desmayarse. En realidad estaba mal, algo andaba muy mal.

CON LAS GANAS | CACHÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora