Capítulo 18

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Llego a la casa de Sayuri su madre abre la puerta para que yo entre, parece ser que el señor Damián no estaba en casa, el hermanito estaba en la sala jugando video juegos, parecía la versión occidental de Kyuhyun puesto que las dos veces que lo he visto está pegado a los video juegos.

- Annyeong ¿cómo estás? – le digo al chico que seguía jugando.

- Hola Hyung, bien y ¿tú? – me dice sin apartar la vista del juego.

- Bien gracias, dime ¿tu hermana está en casa ahora? –

- Si, está arriba escuché que dijo que iba a salir contigo esta noche, debe estar arreglándose – el chico siguió jugando el video juego, realmente era igual a Kyuhyun, cuando está jugando no contesta y cuando lo hace no quita la vista del juego; en ese momento aparece Sayuri en las escaleras, me saluda y se dirige a la cocina a decirle a su madre que vendría conmigo a algún lado.

Ya en el auto me dirigí al centro de la ciudad donde había un restaurante que estaba seguro que le iba a gustar, no lo sé pero realmente se veía linda esta noche a pesar que no se veía como en las pasarelas cuando modelaba.

- Bien Sayuri ya llegamos.

- ¡Woah! ¡Qué lindo lugar! – me dice mientras miraba la fachada

- Sabía que te gustaría. – dije orgulloso de mi elección

- Supiste adivinar mi gusto oppa – me pellizca la mejilla como si fuera un niño pequeño.

- ¿En serio? Gracias - la tomo de la mano y entramos al lugar – Sayuri y te tengo una sorpresa más grande – le digo mientras nos acomodamos en una mesa.

- ¿Qué cosa?

- Aquí hay salas de karaoke por si quieres cantar unas canciones.

- ¡¿Qué?! – me dice con los ojos bien abiertos - ¡¿Dónde... donde?! – realmente me gustó ver su cara de emoción.

- Pues está por allí en el segundo piso, el primero es solo el restaurante los otros dos pisos son karaokes – le digo señalando unas escaleras y la puerta del ascensor.

- Esto es genial, ¿podemos ir un rato después de comer? – me dice sonriendo nuevamente

- Claro, esa es la idea, no te habría traído aquí por nada – digo devolviéndole una sonrisa.

- ¡Genial! Pero hay un problema... yo no sé cantar muy bien – dice poniéndose un poco colorada.

- Eso no importa – le digo riéndome le hago señas de que se acerque un poco más – ¿se te olvidó que tu novio es cantante? – le digo en su oído para luego alejarme y ver como su cara estaba totalmente roja.

- Este... yo.... ¿por qué el mesero tarda tanto con la comida? – dice abanicándose con la mano y tratando de calmarse un poco.

La cena transcurrió normal como tenía pensado, aunque hubo algunas fans que se acercaron a pedirnos autógrafos pero de resto todo fue normal, las chicas que se nos acercaron nos preguntaron si estábamos saliendo pero dijimos que no, que todo era un mal entendido, a Sayuri la puso roja el comentario de una de ellas quien dijo que nos veíamos bien juntos, de resto de la noche todo pasó normal; Después de terminar de comer le dijimos al administrador que nos diera una de las salas de karaoke, el señor aceptó tranquilamente y nos llevó a una de las salas en el tercer piso (esta sala la tenía previamente preparada por petición mía), nos entrega la llave y nos dice que no hay ningún problema si deseamos algo de comer que él lo traía.

- Qué lindo lugar - dice mientras entraba a la habitación.

- Está todo listo, mira allí está la pantalla, los micrófonos y la consola con todas las canciones que quieras.

- Es súper, no dejas de sorprenderme oppa, dime si ahora me siento en este sofá ¿no me caerán rosas en la cabeza? – dice riéndose dirigiéndose al sofá.

- No, pero si tú quieres puedo hacer que hagan eso – digo medio gracioso – bueno ¿cuál es la primera canción que quieres escuchar? – digo para comenzar el karaoke.

- No sé, la verdad no lo sé... oh espera... - va a la consola y busca una de las canciones – ¡esta! Quiero esta canción – dice poniendo a reproducir "stand by me" la canción que cantó SHINee para el drama "boys before flowers".

- ¿Esa? Porque no me imaginé que pondrías esa, sabiendo lo mucho que te encanta esa historia.

- Oppa, no solo soy una ELF también soy una SHAWOL – dice lanzándome una mirada – y bien vas a cantar o que – me apremia pasándome el micrófono.

- Está bien, está bien, ya voy su majestad – ambos reímos un poco y reinicio la canción para empezar a cantar, mientras cantaba veía como su cara se iluminaba y trataba de cantar la canción – y bien ¿te gustó? – digo al final de la canción, ella asiente con la cabeza – bien ahora te toca a ti cantar – le digo acercándole el micrófono

- ¡No! ¡yo tengo una voz fea! – nuevamente con sus pretextos para no cantar – ¡Desafino terrible!

- No importa, si no sabes cantar bien no importa, yo quiero escucharte.

- ¡Oppa! ¡Yo no canto bien el coreano! Además que mi pronunciación es pésima a pesar del tiempo que tengo aquí.

- Eso no importa yo te ayudo – le digo tomándola de la mano y poniéndole el micrófono en su mano.

- Está bien, con conste que lo advertí, no te burles si digo algo mal o que no debía decir o si me desafiné feo.

- Te juro que si dices algo mal no me río y menos si te desafinas – digo mientras levanto mi mano – y bien cual vas a cantar

- Yo... este... no te burles ¿está bien? Sé que te la sabes – me dice mientras sonaba la pista de "Bonamana" una de nuestras canciones – perdóname oppa pero ya sabes soy una ELF pero eso sí, si tengo problemas con la letra y las notas altas por favor ayúdame – hace pucherito.

- Claro, con gusto te enseño bonita – ambos reímos y ella empieza a cantar, a pesar que se le veía nerviosa se le veía linda y tierna tratando de imitar los movimientos de cada uno en las partes que le correspondían a cada quién.

- Oppa, te burlaste de mí – negué con la cabeza – sabías que hacía esto muy mal y tú te reíste.

- Te dije que no te preocuparas, además que eres muy buena, pero solo cuando te ponen las canciones romanizadas – digo riéndome – pero me agrada tu esfuerzo preciosa – digo mientras le doy un abrazo.

Después de unas cuantas canciones decidimos irnos del lugar, tenía planeado llevarla a la torre de Namsan sabía que le gustaría subir hasta allá, tenía planeado hacer de esa cita una cita romántica por las tantas veces en las que no pude darle ese ambiente.

Desde ese día todo cambióWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu