Cápitulo 3

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Zeta

Durante la reunión Edward y Dion fueron los que más hablaron sobre los problemas de Andragos y de lo que el segundo pudo observar de camino hacia aquí, además de lo que hacer un trato entre ambos supondría. Todo iba bien hasta que James intervino.

-¿Por qué has arriesgado a tres personas para devolver a dos niños a un territorio es cual os dio la espalda?- pregunto James.


- Con las pintas que tienen es normal que pensemos lo que pensamos- dijo Axel.

Eso nos dejo a todos en la sala bastante impactados aunque no era nada que otras personas no hubieran pensado. Yo me limite a mirarlo fijamente y por el aspecto de su cara creo que se dio cuenta.

-Es una buena pregunta, pero yo no soy el más indicado para responder a ella- dijo Edward mirándome fijamente.

- Esos niños no merecen vivir la mierda que muchos de nosotros vivimos en nuestra niñez- solte sin mirar a nadie en concreto.

-Muchos de mis hombres han encontrado cosas que son de gran utilidad a las afueras- dijo Dion apoyando los codos sobre la mesa y mirándome. No hizo falta decir que ya sabia quienes lo dejaban, el comentario era más como un agradecimiento.

- Seremos todo lo que queráis, pero somos honrados- dijo Marcus- Hemos llegado a hacer cosas que nunca nos habíamos planteado- muchos en la sala asintieron dándole la razón y yo no puede estar más agradecida.

Algo que Marcus tiene razón es que mi división y algunos de la suya actuamos sin pensarlo muchas veces. Eso la causa de que muchas veces nos pongamos en peligro. Me acuerdo del día que reuní a todos, Marcus, July, Dousentry, Theo y Leo , me preguntaron que si yo de verdad quería su ayuda porque no hacía como todos e intentaba comprarla, yo les respondí que si la quería, pero que no me valía la pena comprarla porque lo que quería no se podía pagar con nada. A partir de ese día somos como uñas y carne.

Cuando iba a responder un gran estruendo sonó acompañado de la alarma que daba hacia El Claro. Me levante y salí prácticamente volando de la sala en dirección allí, podía oir un moton de pasos seguirme, pero en este momento poco me importaba. Por el camino me encontré con Rupert, el encargado de dar de comer a todos los animales.

Rupert es un vampiro de 40, cuya familia fue asesinada a manos de Sanders, el hijo del rey vampiro en una de sus cacerías. Cuando se presento ante el rey este no quiso escucharlo y decidio desterrarlo, poco después conoció a Edward cuando aún no era líder de Andragos. Pese a las insistencias de este último de que aceptará ser su mano derecha, nunca lo acepto y a cambio le pidió una habitación y poder estudiar y cuidar a estas criaturas. El a sido la persona que me ha enseñado todo lo que se de ellas, nunca me cansaré de escucharle contar historias sobre las aventuras de él con Edward.

-Uno de los novatos a entrado en la zona de Neit diciendo que un gatuco de mierda no le daba ningún miedo- dijo el seriamente, confirmando mis sospechas.

-Pues como no lleguemos a tiempo ese gatuco de mierda se lo va a zampar sin pensárselo mucho- dije- Mira que cuando pedimos gente la quería con dos dedos de frente.

Agarre los guantes que usaba cuando trabajaba con los animales y junto con Rupert corrimos hacia la zona. Bajamos las escaleras hacia el túnel y lo cruzamos. Fuera de este estaba El Claro, un campo abierto protegido por zarzales y hortigas que impedían en paso desde fuera formando una capsula gigante, solo que el techo esta cubierto por cristal resistente a golpes, por lo tanto solo se podía acceder a ahí por el túnel. Los animales están separados por secciones teniendo en cuenta su alimentación, es decir, los herbívoros están todos juntos y los carnívoros igual ,aunque de estos últimos no hay un gran número.

AndragosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora