All Alone

L

Ya eran las dos y media de la tarde cuando Dowoon salió de clases. JiHyun se fue diciendo "En media hora nos juntamos aquí afuera, tienes treinta minutos para arreglarte" y Dowoon solo contestó "Hola, digo Adiós". Pues bueno, ahora ya eran las 3 y Dowoon estaba arreglado y listo esperando a la muchacha.

Luego de cinco minutos llega Jihyun. Él la mira y se da cuenta de que ella tiene un gran sentido de la moda, algo que le gusta muchísimo.

-T~Te ves bien- dice Dowoon tímidamente. Ella se sonroja

-G~Gra~cias.. Dowoonie, tú también te ves bien.

-Grasas. ¡Ay!- se queja cuando las palabras no le salen bien. Ella ríe -Quise decir Gracias- dice mientras es contagiado por la risa de ella.

-Lo sé.

Ambos caminaron hacia un lugar cualquiera, no tenían un destino en realidad.

-¿Cuántos años tienes, Woonie?- Pregunta para quitar la incomodidad

-Tengo diecinueve ¿Tú?

-Tengo dieciocho- él se sorprendió. Creía que era su noona, pero no era así.

De a poco los nervios en él iban desapareciendo, al fin y al cabo ella le hacía sentir cómodo.

-Entonces... eso quiere decir que soy tu..

-Oppa- interrumpió ella sonriendo tiernamente -¿No te molesta que te diga Woonie? Es que me gusta decirte así.

-Y a mi me gusta que me digas Woonie- acotó Dowoon, ni siquiera pensó bien en las cosas que dijo, solo lo hizo y ya

Él la observa y sonríe al verla hacer lo mismo. Quiere acercarse y besarla, decirle que le gusta, pero se acobarda y mira hacia adelante con miedo a que ella lea sus pensamientos. Con miedo a que ella se vaya y lo deje completamente solo.

-y... ¿Dónde iremos?- pregunta él luego de un rato

-Solo a... caminar- responde disfrutando el día, el viento y la compañía de Dowoon.

-¿Quieres un helado?- él se dirige a ella y Jihyun le responde que sí, así que Dowoon saca sus poquitos ahorros y le compra un helado. Solo uno, porque era lo que le alcanzaba.

-¿Quieres?- pregunta ella llevando el helado a la cara del mayor. El solo da una probada muy tímidamente, pero Jihyun lo acerca un poco más y al ver el rechazo de Yoon, mancha su nariz. Ambos ríen. Cualquiera pensaría que son novios desde hace años, desde hace meses o semanas. Incluso podrían pensar que son mejores amigos, pero ni siquiera se acercan un poco; ellos a penas se habían hablado antes y ahora en realidad a él solamente le gustaba ella. A ella le interesaba él.

El ambiente era bastante cómodo para ser la primera vez que se hablaban, prácticamente, pero ambos sabían que había un interés en el otro, ya sea en forma de amor o amistad, lo sentían en el fondo de su tímido corazoncito, sin embargo, no querían aceptar eso, pues ambos sentían que los dejarían.

(...)

-Gracias, Dowoon, me divertí- Llegaron a casa de la chica, pues tras muchos "No es necesario" Dowoon la convenció y ella le dejó acompañarla a su casa

-Sí, yo igual. Aunque yo debo ser quien agradezca, pues no me hubiera atrevido a invitarte antes- Ella sonrie en grande, había algo en ese chico que le hacía sonreír así.

Luego de despedirse, la chica entra en su casa y Dowoon se dirige a la propia.

Al llegar al departamento, entra él solo, encontrando soledad en su sola casa. Se acuesta en su pequeña y solitaria cama para luego dormir un rato. Solo, completamente solo.

(...)

Sin darse cuenta, el tiempo pasó y Dowoon despertó a eso de las cuatro de la madrugada, sin haberse dado cuenta de que durmió más de lo que debía, pues no había comido, ni cepillado sus dientes, ni mucho menos se habia duchado con agua fría, como todos los días.

Ese Sábado decide ir a buscar un trabajo, pues se sentía capaz por primera vez. Se levanta a eso de las siete de la mañana, se baña en ese fria ducha y come otro paquete de ramen, debía ir a comprar más. Luego de acabar, se cepilla los dientes y sale de casa con sus cosas en mano.

Estuvo buscando y buscando. A eso de las tres de la tarde el hambre atacó, así que fue por un pequeño lugar donde vendían dulces y más cosas no saludables, en donde compró dos barras de chocolate y una botella de agua con ese poco dinero que le quedaba.

Al voltear Dowoon, vio un cartel

Se solicita mesero
Lunes a Domingo de 4 p.m a 9 p.m
+19 años

El cartel, obviamente, tenía más cosas solicitadas, pero Yoon cumplía todas, así que decidió entrar.

-Hola- Saludó con una reverencia

-Hola ¿Tiene alguna mesa reservada?

-No, No... vengo por el anuncio, ¿Buscan mesero?

-Ah, venga, pase por aquí- La amable señora lo hace pasar a un despacho en donde un hombre le miraba seriamente

-Hola- Se inclina -Vengo por lo del mesero necesitado

-¡Qué bien! Eres el único que ha venido en todo el tiempo que lo pusimos. Ya llevamos un mes esperando a alguien que quiera ayudar, pues la abuela ya no puede moverse tanto.

-Claro- Asiente comprendiendo.

Luego de un par de preguntas y cosas solicitadas, el hombre comienza a hablar.

-Perfecto ¿Te apetecería empezar mañana?- Yoon asiente como un cachorro mientras se levanta y hace una gran reverencia de noventa grados.

-¡Se lo agradecería!- Hablan un par de cosas más y, una vez terminan todo, Dowoon se va a casa feliz al fin. Pues las cosas nada mal le estaban saliendo ¿Verdad?