Gay ships. Harry Potter.

Pansmione #1 🏳️‍🌈

Hermione caminaba apresuradamente por los pasillos de Howarts.

Desde que Umbrige había sido nombrada nueva inquisidora y de que hubiera fundado la brigada inquisitorial no le gustaba andar sola por los pasillos.

-¡Granger!

La chica se detuvo al escuchar la voz que la llamaba, y, armándose de paciencia se giro para enfrentar a Malfoy y a sus amigos.

-¿Qué quieres Malfoy?

Le rubio alzó una ceja y la miró divertido.

-Venía a decirte que voy a tener que quitarle puntos a Gryffindor, ibas demasiado rápido.

La castaña gruñó, pero no dijo nada, pues aunque lo hiciera nada cambiaría.

-También vamos a quitarte puntos por sangre sucia y por tener esa horrible cara de troll.

Zabini y Nott, quienes se encontraban junto a Malfoy soltaron una carcajada.

Hermione apretó los puños, conteniéndose para no sacar la varita.

-Vámonos ya, la sangre sucia apesta.

Seguido al comentario de Zabini se escucharon un par de carcajadas y Hermione sintió como la empujaban.

Una vez ella se encontraba en el suelo y los Slytherins se habían ido suspiró tranquila.

-¿Necesitas ayuda Granger?

Hermione subió la mirada enfadada, chocando con los ojos de Pansy Parkinson, quien parecía preocupada.

La castaña se levantó ignorando la mano que le extendía la otra chica.

-La necesitaba hace un rato, pero supongo que no te conviene que te vean siendo amable con una sangre sucia como yo.

Y dicho esto Hermione se dio la vuelta, dispuesta a continuar su camino.

-Espera, Hermione.

Pansy agarró su muñeca pero Hermione se giró y apartó su mano rápidamente.

Pansy la miró suplicante.

-Hermione, entiéndeme, si se enteran de que eres mi amiga seré una paria en Slytherin, y ni hablar de lo que me harían en casa.

La castaña suspiró.

-Por eso lo digo, es mejor que no seamos amigas, es mejor que no volvamos a hablar. Adiós Pansy.

Cuando Hermione desapareció por el pasillo, una extraña presión se implantó en el pecho de Pansy.

Suspiró agotada, era lo mejor para ambas, Hermione tenía razón, igual que siempre.

Pero, a pesar de saber eso, había algo en ella que la decía que eso no podía terminar, no así.

Pansy intentó ignorar esa sensación, pues temía cuál era el final que quería para aquella historia.

Se marchó a su sala común dispuesta a dormir, con la esperanza de librarse de aquel sentimiento.

                                ***

A las tres de la mañana Hermione salió de su cama dándose por vencida en la tarea de dormir.

La conversación que tuvo con Pansy no dejaba de darle vueltas en la cabeza.

Ella había hecho lo correcto, lo tenía claro. Pansy no podía ser su amiga, no ahora al menos.

Además, Hermione sabía que alejarse de ella ayudaría a calmar los nervios y el acelerado latido de su corazón cuando la morena se acercaba.

Ella no era tonta, sabía lo que significaban aquellas sensaciones, y solo era una razón más para alejarse de Pansy.

Hermione bajó a su sala común, intentando así librarse de la sensación de encierro que empezaba a sufrir, pero pronto se dio cuenta de que aquello no le bastaba.

Salió de su sala común con cuidado de que nadie la viera y muy nerviosa, era la primera vez que salía a estas horas sola.

Se deslizó por los corredores hasta salir al patio, y se disponía a caminar un rato, cuando escuchó un sonido no muy lejos.

Hermione se giró hacia donde había venido el sonido, escuchando lo que parecían ser sollozos.

Cuando vio a Pansy allí se quedó congelada.

-¡Granger!

Parkinson se sobresaltó ante la presencia de la castaña y secó rápidamente sus lágrimas con vergüenza.

Hermione suspiró, maldiciendo en su mente, porque a pesar de saber que debía alejarse no fue capaz de hacerlo.

Se sentó junto a la morena y la miró preocupada.

-¿Qué ocurre Pansy?

Parkinson cerró los ojos y suspiró, sería sincera, total, no tenía nada que perder.

-Estoy harta Hermione, no quiero convertirme en mortifaga, pero tengo que hacerlo, no quiero luchar junto al que no debe ser nombrado, ni ayudar a la cara de sapo, y no quiero dejar de ser tu... Amiga, pero no tengo otra opción.

Hermione le dedicó una sonrisa comprensiva a la chica sentada junto a ella.

-Siempre hay otras opciones, pero te entiendo. No todo el mundo está dispuesto a arriesgar su vida o perder a su familia sólo por no opinar lo mismo.

Pansy suspiró y entrelazó sus dedos con los de la otra chica.

-Quizá cuando todo esto acabe podremos volver a ser amigas.

Hermione asintió con una sonrisa triste y apoyó su cabeza en el hombro de su compañera.

-A partir de esta noche hasta que todo termine.