Natsukashii (All x Tanjiro)

Capitulo 1.

-S-si.

-Los pilares son espadachines muy hábiles, se fortalecieron a sí mismos superando un entrenamiento muy duro.-su sonrisa tan cálida no se perdía en ningún momento.-Se entrenaron para proteger a su Omega y sus futuros cachorros, su legado. Su fuerza la han demostrado al vencer algunas lunas.

-¡Efectivamente!.

-Por eso el mundo los aprecia, esperaran lo mejor de ti y tu de ellos, procura dirigirte a ellos de la forma adecuada.

-Si.

-Sanemi, Obanai. No sean muy crueles con los menores y sobretodo con su Omega, el los acompañará por el camino de sus vidas, pasará a ser parte de ustedes y ustedes de él, cuiden su tacto.

-Como usted diga.

-Como diga.

-Ya terminamos de hablar Tanjiro, puedes retirarte.-concedió.

-Kamado puede quedarse en mi finca.-concedió Kocho, levantando una de sus manos.

-'¿Eh?'.

La pilar de Insectos aplaudio.

-Pueden llevárselos por favor.-la chica que anteriormente había pedido la caja al Pilar fue por Nezuko viendo como la menor la observó apenas entro a su campo de visión.

-¡Disculpen!.-el hombre que lo había despertado apareció corriendo, se arrodilló frente al Patrón y luego a los pilares, tomo a Tanjiro y lo puso en su espalda llevándoselo de manera rápida.

-Muy bien empezemos la reu...

-¡Espere un poco por favor!.

El Patrón volteo hacia donde provenía la voz del Omega, Tanjiro llegó corriendo siendo seguido por el hombre y la mujer que se harían cargo de él.

-Déjeme darle un cabezazo al Alfa de la cicatriz, por las veces que apuñalo a Nezuko, he de hacerlo.

-¡Detente!.

-¡Para con esto!.

Dejó de removerse al sentir el golpe de una piedra en su cabeza luego una en su frente y una última en su mejilla, dejándolo en el suelo.

-Nunca interrumpas al Patrón cuando habla.-murmuró el Alfa que no había dicho casi nada en su juicio.

-Lo lamentamos mucho.

-Realmente lo sentimos.

-Llevenselo.-ordenó con calma el Patrón.

-¡Si!.-el hombre volvió a correr con el Omega esta vez cargándolo en su hombro.

-Tanjiro, dale saludos a Tamayo.-dijo el Patrón una vez el Omega estuvo alejado de él.

Se sorprendió viendo hacia la dirección de la sede, ¿como era que el Patrón conocía a Tamayo?.

-E-esperen un segundo mencionó a Tamayo, ¡Ay!.-se quejo al recibir un golpe de parte de la mujer.

-Cállate, hiciste que se enojarán con nosotros.-comentó la chica dándole golpes en la cara.-Los pilares daban miedo, podrás ser su Omega y no tener represalias pero a nosotros nos retarán, ¡esto no te lo perdono!

-¡Jamás!.-gritó el hombre.

-¡Discúlpate!.

-Si, discúlpate.

-Lo siento.-murmuró decaído.

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