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No sabía cuánto tiempo había pasado, solo era consciente de que no era mucho y que estarían en ese avión durante tres horas.

Todos los trabajadores se encontraban sentados bastante juntos, agrupados y distinguiéndose de los demás pasajeros, y él no era la excepción. Taehyung realmente se sentía incómodo, era asfixiante respirar el mismo aire que más de cincuenta personas respiraban también. Los susurros de algunos hablando, los ronquidos de otros, las respiraciones que, a pesar de la climatización, se sentían demasiado calientes a su alrededor.

El pelirrubio se estaba poniendo nervioso, su enfermedad volviendo a actuar en su contra. Es muy cierto que la agorafobia trata precisamente de lugares abiertos, pero los pacientes con este tipo de trastorno pueden presentar ciertos síntomas en situaciones o lugares que considere una amenaza para su estabilidad. Ya se había acostumbrado a los lugares cerrados y llenos de mucha gente, sino su ya no tan constante asistencia a los bares y clubes le sería imposible. Había aprendido a controlarlo y gracias a eso logró calificar ese tipo de lugar y situación o circunstancia, como una zona segura para sí mismo.

Sin embargo parecía que todo su esfuerzo por disminuir los síntomas y poder realizar más actividades habían desaparecido, lo supo cuando sintió el temblor en sus manos y el aire demasiado pesado y sucio.

No podía respirar, su pecho bajaba y subía violentamente a medida que se agitaba, ganándose algunas miradas de confusión por parte de los desconocidos y algunas de preocupación por parte de sus empleados.

- Jungkook..- pronunció como su estado le pudo permitir, pero nadie escuchó, mucho menos el pelinegro que se encontraba tres filas más adelante y escuchando música, posiblemente dormido.

Al no obtener alguna respuesta se desesperó, tratando de llegar al estante de arriba dónde yacía un pequeño bolso, mismo que su hermano mayor le dió antes de salir por si algo pasaba.

Y gracias a todo por la precaución de Kim SeokJin, porque Taehyung se sintió aliviado al encontrar los ansiolíticos que le había recetado su terapeuta. Tomó dos pastillas de golpe, sin agua, tragando lo más rápido que podía.

- Jungkook- volvió a llamar, no obteniendo respuesta, sintiéndose aún peor al sentir las dos cápsulas en su garganta todavía, sumándose al nudo que comenzaba a formarse por su angustia.

- Señor Kim, ¿Sucede algo?.. - Preguntó un muchacho a su lado, que Taehyung sabía trabajaba en la empresa, pero no había visto hasta el momento que escuchó su voz hablarle, lejana.

El empleado restregó sus ojos para enfocarlos bien debido a que acababa de despertar, y puso una de sus manos en el hombro del mayor, ganándose una reacción que para nada esperó. El pelirrubio se alejó bruscamente, respirando muy rápido, su piel brillando debido al sudor, y su mirada dirigiéndose al sujeto como si fuera el peor monstruo, lo más horrible a aterrorizante.

- N-no me toques... Jung-Jung... Busca a J-Jungkook..- logró decir, tartamudeando en un intento de expresar lo que quería, mas sus temblores y recientes mareos, dejando su cerebro nublado.

- ¿Quiere que busque al fotógrafo? - preguntó, como asegurándose de qué era lo que quería y que realmente había escuchado bien.

Taehyung asintió repetidas veces.

Lo escuchó llamar al menor por su nombre, estaba a su lado, pero se oía tan lejano... ¿Por qué todo de repente se volvió tan borroso?. Cerró sus ojos, pensando en algo que lo hiciese controlarse y calmar sus latidos.

Nada.

No encontraba algo en su cabeza que pudiese tranquilizarlo, estaba perdido, tendría un ataque de pánico en medio del vuelo, le iba a arruinar el viaje a sus empleados pero sobre todo, a Kook.

Focus on me | VKook (+18)[Completa]Where stories live. Discover now